Todos los ministros de ‘tournée’

Ayer en el noticiario de la RTE Irlandesa, el que ve todo dios a las 9 de la noche una vez ya has cenado, se anunciaba el conocido ‘sorteo ministerial de San Patricio’. Una especie de carrusel que envía a todos los ministros de este país de ruta durante dos o tres días por todo el mundo en el día nacional. Ese en el que los monumentos de medio planeta se iluminan de verde ‘irish’ para homenajear a expatriados, o no, que tienen origen gaélico.
La cosa no tendría más significado que el hecho de tener a un atajo de políticos de viaje oficial sino fuera por lo que logran y cómo lo logran. El reparto no es aleatorio, los países elegidos y los ministros enviados responden a un criterio estratégico y, por si fuera poco, se preparan equipos complementarios que no van de turismo si no a la caza de ‘deals’ entre pinta y pinta de Guiness.

Para hacernos una idea (demostrable), el coste para las arcas públicas de tan ‘curioso’ batallón político es de apenas 300.000 euros. Hay países que se lo ventilarían con las dietas de un solo ministro y no miro a nadie. Sin embargo el ‘revenue’ que se auditaron en la edición pasada, fue superior a los 10 millones de euros en acuerdos básicos y un ahorro estimativo de casi 20 millones en publicidad. Salir en todos los medios del planeta en plan ‘friendly’ y con imágenes de tu país (cuando no llueve) tiene un valor ciertamente muy alto. Además, por supuesto, certifican que ese esfuerzo viajero es siempre el inicio de procesos comerciales que estos días, además, se han ido conocido.

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Es un ataque frontal de todo un Consejo de Ministros y en plan divertido. Volverán a sentarse y bromear tras una reunión ya de tipo anual el presidente irlandés Enda Kenny y el norteamericano Obama. Volverán a China, Japón, Australia, Brasil, Francia, Alemania, México, Rusia, Dinamarca, Canadá y otros. La geografía es para atenderla y estudiarla. Incluso, y es destacable el tratamiento que se le da a California es de ‘país propio’. Allí va un ministro en concreto. Hay mucho que celebrar y mucho que negociar en Palo Alto, Mountain View, Cupertino y San Francisco.

¿Que suele pasar después? Aquí van tres apuntes que se han materializado en pocos años y obviamente dependen de mucho más que del viaje de un ministro, pero, por lo menos, empieza así en muchos casos. De un político se espera, al menos, que estimule, lidere y cierre. El proceso lo establecen los técnicos.

1. El primer tema fue el cierre de un acuerdo entre Estados Unidos e Irlanda para permitir que la industria cárnica pudiera ser vendida sin restricciones ni controles (que si sufren otros países europeos) en todo el territorio americano. Sin aranceles, ni sobre costes de control, lo que hace mucho más competitivo la ya muy competitiva carne irlandesa. Por calidad y por tratamiento.

2. El segundo también tiene que ver con esa industria, la cárnica. China acordó con el propio presidente del país, la semana pasada, iniciar la importación sin requerimientos complejos de la carne irlandesa. En apenas un año la tercera industria exportadora de carne del mundo se ha zampado dos mercados nuevos que suponen el doble del que ahora tenían disponible.

3. El tercero, el que me parece más interesante. Corrían rumores que Apple estaba examinando localizar en Suecia, Dinamarca, Noruega, Finlandia o incluso Islandia un lugar para construir su nuevo centro de datos para Europa. Finalmente el premio ha sido repartido entre los daneses y los irlandeses que no parecían tener opciones inicialmente, pues en este caso, el tema tributario no jugaba a favor. Era un tema climático, imagina lo que supone poner en marcha todo ese cúmulo de servidores ofreciendo respuestas a tiempo real para iTunes, App Store, iMessage, Maps o la propia Siri. Calor. Apple invertirá 850 millones de euros en el desarrollo de un nuevo centro de gestión de datos para ayudar en la ejecución de esos servicios de datos.

Pero, como siempre, todo no es bueno, de eso ya hemos hablado. Sigue siendo complicado vivir aquí. Cada vez es más caro y falto de servicios que en España, por ejemplo, son asumidos como derechos fundamentales. Y sigue siendo complejo gestionar tu propia empresa en base a usos y costumbres que, todavía, me cuesta entender y de los que aprendo o me desespero. Sigue el paro excesivamente alto, cuesta encontrar trabajo para los que vienen pensando que esto es como ‘Silicon Valley’, sigue el consumo interno bajo y las cargas impositivas en forma de todo tipo de tasas siguen en aumento a pesar de todo. Exportan mucho, el cambio de modelo se va aplicando, pero siguen jugándosela todo a que la sociedad aguante tanta presión. Veremos si lo equilibran y les sale bien.

Aparecen nubarrones en sectores en los que ya no son competitivos, nuevas hipotecas sin límite, mucho nuevo ladrillo que asoma, pero, por lo menos, parece que los ministros tienen claro para quien trabajan y quienes les pagan. Asciende en las encuestas (en algunas ya las lidera) un nuevo lider antiausteridad, Paul Murphy, al estilo Podemos o Siritza. No obstante, a destacar que los políticos irlandeses hablan muy poco de ellos mismos. Está mal visto y los vigilan bastante. Trato con algunos y realmente son políticos, eso es evidente, pero tienen muy presente que los observan, que hay una especie de ‘escucha activa’ de la que no pueden desprenderse.

Será que los ‘mitings’ son en los pubs y eso ayuda mucho, pero aquí la política es acción y mucha menos politiqueo de partido. Aquí el tema ‘de partido’ es un modelo de acercamiento por distritos, por condados, más que un organigrama con todo dios viviendo ‘liberado’ y estructuras muy reducidas y donde todos tienen que rendir cuentas periódicamente ante sus votantes inmediatos a pesar de ser un político de rango alto.

Se los llevan de ‘tournée’ pero, visto lo visto y escuchando los avisos de que van a tener que explicar ‘que lograron en sus viajes’, no van de turismo. ¿Que pasaría si el 12 de octubre enviamos a los ministros españoles por el mundo?

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