FROB, FROB, FROB
La aprobación ayer del nuevo fondo de rescate bancario, el FROB, es el ejemplo más evidente de que la sociedad española está muerta, que sus dirigentes son unos irresponsables sin criterio ni perspectiva y que el sistema financiero español está quebrado de punta a punta. Hemos pasado del “mejor sistema bancario del mundo” a las intervenciones, a las fusiones obligadas, al rescate de cajas insolventes y, ahora, a los fondos antiquiebra. Un Fondo de Rescate que es un refrito del que ya tuvieron que activar urgentemente de la mano de los banqueros ibéricos, el Fondo de Adquisición de Activos Financieros, que resultó ser a la práctica un mecano extremadamente sofisticado para poner a buen recaudo los intereses de los más grandes y dejar a la intemperie a los más pequeños.
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a aprobación ayer del nuevo fondo de rescate bancario, el FROB, es el ejemplo más evidente de que la sociedad española está muerta, que sus dirigentes son unos irresponsables sin criterio ni perspectiva y que el sistema financiero español está quebrado de punta a punta. Hemos pasado del “mejor sistema bancario del mundo” a las intervenciones, a las fusiones obligadas, al rescate de cajas insolventes y, ahora, a los fondos antiquiebra. Un Fondo de Rescate que es un refrito del que ya tuvieron que activar urgentemente de la mano de los banqueros ibéricos, el Fondo de Adquisición de Activos Financieros, que resultó ser a la práctica un mecano extremadamente sofisticado para poner a buen recaudo los intereses de los más grandes y dejar a la intemperie a los más pequeños.
Lo que sabemos en estos momentos sobre el FROB es que tiene pinta de hurto legal. Zapatero y Mariano de la mano con la mayoría de banqueros han decidido gestionar en crisis para perpetuarla. El gobierno espera que las entidades crediticias no quiebren y que, si lo hacen, no se evidencie, de ahí el voto con el PP. El PP espera que sus amigos no sufran. El hecho de que esos amigotes sean unos ineptos, corruptos, inservibles y peligrosos ayudó al voto con el gobierno.
En realidad ahora lo que tocaba no era un FROB, ni un FAAF, lo que tocaba era dejar que algunos quebraran por haber contribuido dedicadamente a generar el pufo económico de dimensiones bíblicas. En lugar de poner ante la justicia a muchos directivos bancarios de este país por haber hurgado en nuestro futuro de ese modo indecente, se les premia con el dinero de todos y se les garantiza el trabajo de modo vitalicio. A cambio sólo se les pide que sigan concediendo capital y crédito a quienes toque hacerlo y cuando sea preciso.
Por cierto, ¿Cuánto costó el FAAF y cuanto cuesta el FROB? Difícil de saber, pero la traducción estructural de todo es espantosa. España lleva emitida deuda pública por valor de casi 60.000 millones de Euros para intentar pagar todo lo que tenemos entre manos, pero lo jodido es que esa deuda no ha habido manera de colocarla en los mercados externos. Una emisión que multiplica por 30 la que se emitió durante todo el año pasado y sin comprador externo. Habéis leído bien, 30 veces la del año pasado y estamos en julio.
Ahora viene lo mejor. Como la deuda no se ha podido colocar se han tenido que activar los sistemas de flujo que permite la normativa. Por un lado solicitar al Banco de España que la suscriba y por otro buscar el capital donde sea, aunque tenga que meter la mano en los fondos previstos para ayudas sociales o lo que sea. Como la morosidad aumenta por culpa de los vencimientos de deuda en casi un billón de euros y la gestación de problemas integrales del sistema bancario crecen sin reparo, se ha aparecido por “generación espontánea” un nuevo Fondo de rescate. El curioso y malsonante FROB.
Ahora bien, lo importante ya no es que en el sistema bancario español haya insolvencias retrasadas, quiebras escondidas y fusiones obligatorias, no, lo grave es que no se ha definido el uso real de ese fondo, no se tiene certeza de cual va a ser su reparto, el método de control y como piensan atender el ingente desajuste de deuda que se avecina en términos de Estado. A fecha de hoy, la deuda total de España ya debe superar el 175 % del PIB. No hay precedentes en el mundo que pueda compararse a esa barbaridad. Podemos obviarlo y pensar “que todo se arreglará” o asumir que eso tiene muy mala pinta.
PASCAL LAMY & RICHARD BERNER
Hay gente que la única explicación que veo a su actitud, es que de niño, en sus cumpleaños, el primer pedazo de pastel nunca era para ellos. Los “brotesverdistas” empiezan a ser como una especie de secta unidireccional sin criterio que otorga el valor del conocimiento a los que durante años negaron la crisis, le dieron todo tipo de nombres y evitaron atajar su gigantesco y nocivo efecto final por incapacidad o por mala fe electoral, tanto da. Son los que ven su futuro asegurado por un paraguas funcionarial o institucional que nadie puede garantizarles. Que atiendan algunas opiniones solventes que llegan de Estados Unidos, lo necesitan.
Hay gente que la única explicación que veo a su actitud, es que de niño, en sus cumpleaños, el primer pedazo de pastel nunca era para ellos. Los “brotesverdistas” empiezan a ser como una especie de secta unidireccional sin criterio que otorga el valor del conocimiento a los que durante años negaron la crisis, le dieron todo tipo de nombres y evitaron atajar su gigantesco y nocivo efecto final por incapacidad o por mala fe electoral, tanto da. Son los que ven su futuro asegurado por un paraguas funcionarial o institucional que nadie puede garantizarles. Que atiendan algunas opiniones solventes que llegan de Estados Unidos, lo necesitan.
Ayer fue un día de mensajes catastrofistas. Por un lado Pascal Lamy, director general de la Organización Mundial de Comercio ayer comentó algo que hace referencia a una de las cosas que más me preocupan desde el principio de este escenario de crisis global. Lamy dijo que “lo peor de la crisis en materia social está por venir”. Obviamente no ha descubierto ningún mineral desconocido ni nada parecido pero si es importante que lo advierta un responsable de una organización planetaria. Desde este blog, muchos seguimos asegurando que la crisis financiera fue el síntoma de una crisis sistémica y esta traerá graves tensiones sociales desconocidas u olvidadas por la mayoría del mundo occidental.
En otro sentido Richard Berner, economista de Morgan Stanley, sentenció que lo peor de la crisis económica todavía no ha pasado en los Estados Unidos y que el “gran esperado desastre fiscal en Estados Unidos ya está en marcha”. Es una obviedad que el enorme déficit fiscal y sus niveles de deuda derivadas en breve se descontrolarán. Mantener las promesas de beneficios sociales requerirá un endeudamiento o impuestos insostenibles de manera que se va restando credibilidad a la capacidad para financiar inversiones y sostener el crecimiento. En esa tónica Berner asegura que “la creciente deuda hará aumentar las tasas de interés, reduciendo el capital y la productividad e incrementando el servicio de la deuda, además, esos factores no sólo reducirán en forma constante nuestro estándar de vida, sino que pondrán en peligro la estabilidad económica y financiera americana y por defecto de medio mundo”.
DEFLACION vs HIPERINFLACION
Robert Prechter es uno de los pocos analistas que ha sobrevivido al crash de 2008 en Wall Street. Considera que la situación de la bolsa actual se trata de un rally de mercado bajista, por lo que, en algún momento, se retomarán las caídas. Según Prechter esa fase coincidirá con una devastadora deflación que destruirá la economía en términos globales. Seguramente exagera y lo que intenta es dar un toque de atención a tanto brote verde internacional y a tanto tango. Por ejemplo, lo que este analista dice es que todo el momento de ascenso de los mercados se enmarca en un superciclo bajista que comenzó en enero de 2000 y que terminará con el Dow Jones en 400 puntos.
Robert Prechter es uno de los pocos analistas que ha sobrevivido al crash de 2008 en Wall Street. Considera que la situación de la bolsa actual se trata de un rally de mercado bajista, por lo que, en algún momento, se retomarán las caídas. Según Prechter esa fase coincidirá con una devastadora deflación que destruirá la economía en términos globales. Seguramente exagera y lo que intenta es dar un toque de atención a tanto brote verde internacional y a tanto tango. Por ejemplo, lo que este analista dice es que todo el momento de ascenso de los mercados se enmarca en un superciclo bajista que comenzó en enero de 2000 y que terminará con el Dow Jones en 400 puntos.
El DJ en 400 puntos parece una locura sacada de la mente de un sociópata de los mercados, o un catastrofista agorero que intenta obtener protagonismo en un momento de proyecciones positivas. Pues Prechter no es un cualquiera. Una de sus publicaciones periódicas de gestión patrimonial posiciona una selección inversora, basada en los sistemas de análisis técnico de la onda de Elliott, que gana un casi un 17% en el último año, mientras que el mercado Wilshire 5000 pierde un 33%. Aunque su método es puramente técnico, si es cierto que de vez en cuando utiliza el entorno económico para deducir ciclos y situaciones. Hace tiempo que su gran predicción garantiza que en meses vamos a ver una tremenda deflación en EEUU y por defecto o derivación de la geoeconomía dependiente en Europa.
Aquí hablamos de deflación hace mucho. Cuando era algo inasumible por muchos, cuando hablar de bajada de precios era impensable, cuando un IPC negativo parecía ciencia ficción o cuando la vida era color pastel. Ahora los precios están en deflación técnica pero seguimos escuchando que es coyuntural y que el petróleo es el causante. Yo no digo que no vaya a cambiar en breve, todo es posible, pero eso de que no estamos en deflación se lo cuentan a aquellos comerciantes que se ven obligados a bajar los precios por culpa de un consumo anoréxico que los ahoga o a los que están revisando sus contratos a la baja y que supone la descapitalización de muchos patrimonios.
Es cierto que yo también considero que medir un concepto como la deflación en base a patrones de mediados del siglo XX, como el valor de consumo y no atender a medidas mucho más globales que interfieren en el coste de las cosas, es un error pero ahora mismo tenemos lo que tenemos y en gran medida sirve para definir un escenario de contracción desconocido hasta hoy, en este país y en gran parte del mundo. Lo inédito de la situación y su velocidad de deterioro ha implicado que en los próximos meses las noticias no sean tan malas. Las comparativas interanuales mostraran un frenazo de la destrucción de la economía y una perversa aparente mejora, e incluso la deflación técnica no acabará por estancarse y se moderará e incluso desaparecerá, pero eso si será coyuntural. En cuanto el dólar se recupere, que lo hará, el coste del petróleo volverá a caer y en cadena el resto de precios. Una deflación cada vez menos dependiente del crudo se irá transformando en algo mucho más estructural y se retroalimentará de sus propias consecuencias. El ciclo vicioso ya ha empezado y está sedimentando una parada técnica de la economía que describía muy bien Centeno hace poco.
Cada vez son más los que hablan de hiperinflación a corto plazo. Las dudas sobre una posterior hiperinflación, sin embargo son evidentes. ¿Cómo es posible que el oro no refleje esa opción? Los inversores saben muy bien cuánto crédito se está inyectando en la economía. Con el IPC en la mayoría de países reflejando deflación y unas altas expectativas de hiperinflación a medio plazo, todo parecía dispuesto para que la la primera arrase todos los sectores de la economía o la segunda lo haga muy difícil evitarlo. Además es evidente que los gobiernos no están en condiciones de evitar ninguna de las dos. Pienso que es muy probable que esa máxima que afirma que los precios recuperarán vigor y se lanzarán a una escalada basada en el ingente volumen de dinero inyectado esperando a las puertas del sistema no se produzca, pero advierto que razonamientos como los de rssnews, los cuales recomiendo, hacen una buena aportación que puede hacer dudar y que agradezco profundamente para alimentar el debate de modo inteligente y nutritivo.
Por ejemplo, me parece muy interesante el razonamiento sobre que “aún mostrándose signos de apariencia deflacionista sobre la economía doméstica o bancaria, es tan grande la cantidad de dinero disponible para salir del dólar cuando sea oportuno, que cualquier materia prima es candidata potencial para dispararse de precio con independencia de su demanda física. Y hay ya suficientes instrumentos financieros más o menos populares para poder hacerlo”. Me da que empieza a haber consenso sobre que es inevitable la hiperinflación, pero me parece sospechoso ese nivel de acuerdo. Por ejemplo, todo el mundo dice que el dólar está en riesgos históricos cuando lo que parece evidente es que está un suelo en su valor.
Otro aspecto es que el petróleo hace seis meses que está subiendo. En enero el precio del barril Brent era de 39,52 dólares y hoy es de 69,99, casi el doble, lo que parece que de momento no está marcando ninguna tendencia en el sentido de que el crudo es el principal responsable de la deflación técnica. Si bien es cierto que hace justo un año el barril estaba en 147 dólares y que a partir de entonces inició el descenso. Todo es posible, incluso que la bajada de precios general en todos los sectores de la economía no se produzca y que esa comparativa interanual del precio de los carburantes acabe por estabilizar la inflación resultante en términos más normales, pero también podría ser que la caída de costes, de expectativas y de consumo hubiera calado definitivamente en un proceso de destrucción del valor de las cosas y ahora ya poco o nada pudiera incidir esa normalización aparente del precio del barril de petróleo.
Ahora bien, si es deflación técnica, entonces, la hiperinflación es un riesgo evidente a corto plazo, si es una deflación estructural, la parada económica es una posibilidad factible. ¿Qué queda? Que los gobiernos, si los gobiernos pues son los que determinan por desgracia los elementos de estructura económica que ahora se precisan, actúen con precaución, activando sectores estratégicos y dejando morir los que no lo son, asumiendo el valor de su cometido y aceptando que en estos tiempos hay que actuar con perspectiva más que con sentido electoral. Toca asumir la parte más fea de política y acometer las reformas.
Se acaba el tiempo, pues, sea una parada técnica de la economía o una hiperinflación catastrófica, cada vez más gente engorda las listas del subsidio y más familias se van a dormir sin cenar. El término medio entre deflación e hiperinflación depende de políticas activas que pongan en el tejido empresarial las opciones de supervivencia e inversión para desencallar este asunto. Subiendo impuestos al tejido activo de esta sociedad no vamos a lograrlo. Me temo que a la pregunta: ¿deflación o hiperinflación?, la respuesta es intrascendente, lo esencial sería averiguar el tamaño del despropósito que puede provocar lo uno o lo otro, pues para saber como resolverlo, antes es preciso conocer el punto de partida.
Saco sin fondo.
Los inversores ven desplomarse la rentabilidad de la deuda pública española. La remuneración de las Letras del Tesoro llegó al 1% a 12 meses cuando en septiembre pasado estaban al 4,29%. El motivo de este descenso está detrás de la caída de tipos, de las turbulencias financieras y de la menor credibilidad de la fuente estatal. Los “clientes” de este producto se alejan poco a poco. La verdad es que no es malo que así suceda si a cambio permite que el mercado general gane en atractivo y ayude a normalizar el escenario normalizado de recuperación, pero en realidad perjudica la capacidad del Estado para financiar su endeudamiento.
Los inversores ven desplomarse la rentabilidad de la deuda pública española. La remuneración de las Letras del Tesoro llegó al 1% a 12 meses cuando en septiembre pasado estaban al 4,29%. El motivo de este descenso está detrás de la caída de tipos, de las turbulencias financieras y de la menor credibilidad de la fuente estatal. Los “clientes” de este producto se alejan poco a poco. La verdad es que no es malo que así suceda si a cambio permite que el mercado general gane en atractivo y ayude a normalizar el escenario normalizado de recuperación, pero en realidad perjudica la capacidad del Estado para financiar su endeudamiento.
A medida que el atractivo de los bonos públicos desciende la credibilidad para endeudarse del Estado también lo hace. Por eso, decisiones gubernamentales como emitir 100.000 millones de deuda pública para este año, son una locura, pues no hacen más que complicar un disparado déficit público cada vez más, sobretodo atendiendo a que el techo presupuestario crecerá un 14% y la recaudación fiscal descenderá un 10%. En este sentido hay que empezar a apretar botones de emergencia pues el déficit público español se triplicó en mayo si lo comparamos con las cifras de abril.
Trichet dijo la semana pasada que Gobierno Español "no tiene más margen para endeudarse”. No obstante a “palabras necias, oídos sordos” debe pensar el gobierno. Lo peor de todo es que el gobierno de España necesita emitir esa deuda pública por importe de 100.000 millones de euros este año obligatoriamente. Si pretende afrontar el desbarajuste de gasto que se ha ido fabricando el solito no tiene otra opción. Sin embargo en esa cantidad no se incluyen los otros 90.000 millones destinados al rescate de la banca española. Si España alcanza el demencial endeudamiento récord de 190.000 millones de euros la cosa va a ponerse muy fea para agarrarse al tren de la recuperación cuando ésta se produzca en otros países occidentales.
Cada vez es más evidente que nosotros nos hemos bajado del tren, seguimos en la estación, cada vez más solos y menos preparados para comprar un nuevo billete de un convoy que no está ni anunciado en los tablones informativos. No todos los países van en ese tren que se aleja, todos no, algunos se han quedado con nosotros, pero de los que podemos considerar importantes, esos que nunca hablaron de brotes verdes, esos ya han empezado a trabajar para no hundirse en el barro durante décadas. Uno de los salvavidas es, sin duda, no hipotecar el futuro.
A este ritmo, se puede estimar que la deuda pública alcanzará el 66,2% del PIB en 2010 lo que cifra la factura de la crisis en unos 300.000 millones de euros más o menos. Muy probablemente nos estemos quedando cortos ante la acuciante necesidad de rescatar al sistema financiero español. Al tiempo. Hace unos meses nadie aceptaba la palabra “corralito”, ahora es evidente que el sistema deberá ser rescatado in extremis y se ocultará una insolvencia generalizada con dicho plan.
Si bien hasta ahora España no ha tenido problemas para colocar las fuertes emisiones de este año, no parece que sea tan simple vender los casi 50.000 millones que faltan por colocar todavía, puesto que el mercado de bonos se está deteriorando claramente ante las fuertes emisiones de todos los países occidentales y la baja rentabilidad adquirida. A ver como nos enfrentamos a este circulo vicioso.
LA DEUDA DE LAS CAJAS
Cuando Juan Ramon Quintas, presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorro, dijo esta semana que como el gobierno no dispusiera un fondo de rescate flexible, se nos vendría a medio plazo un “diluvio de intervenciones”, lo que quería decir era “alto riesgo de quiebras en cadena”. La verdad es que no ha pasado nada. La repercusión de sus palabras ha llegado a un par de editoriales, un silencio vergonzoso desde la política y una abulia global de los afectados. Todos están pringaos.
Cuando Juan Ramon Quintas, presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorro, dijo esta semana que como el gobierno no dispusiera un fondo de rescate flexible, se nos vendría a medio plazo un “diluvio de intervenciones”, lo que quería decir era “alto riesgo de quiebras en cadena”. La verdad es que no ha pasado nada. La repercusión de sus palabras ha llegado a un par de editoriales, un silencio vergonzoso desde la política y una abulia global de los afectados. Todos están pringaos.
Pero si vamos al asunto en concreto y analizamos lo que Quintas comentó vemos que las pérdidas que se anuncian son muy alarmantes. Perdidas por el aumento radical de ajustes de valoración de los activos en el sistema de las cajas y la morosidad hasta casi 30.000 millones de euros. Al parecer la bajada de ingresos recurrentes alcanzará los 40.000 millones y, obviamente, un simple cálculo sobre la diferencia entre estas dos partidas, vemos que se alcanza unos casi 10.000 millones que no son suficientes para soportar la explotación de un sistema que llega a 30.000 millones. Por tanto los números rojos de las cajas españolas ya estarían cerca de los 20.000 millones sin los famosos extraordinarios que seguro esconden el ajo del asunto.
Los problemas de morosidad van a acentuarse, eso es evidente, pero lo que no se sabe es hasta cuanto. La cifra final es difícil de prever pero desde “la Caixa” ya se ha pronunciado la cifra 15%, algo inédito y difícilmente soportable y con un enorme riesgo sistémico para nuestra banca. Por este motivo la acción debe ser urgente e integral. No se deben cometer errores que pudieran afectar a las entidades que si están bien y se debe atacar estructuralmente y de forma implacable contra las que falsearon sus expectativas.
El fondo no debe ser flexible, eso como decir que las ayudas a las entidades más afectadas deben ocultar la mala gestión desarrollada por sus responsables y esperar que, a partir de esa transferencia generalizada, muchas cajas sobrevivan artificialmente en un escenario ficticio cuando en un contexto natural morirían. Además, ese fondo obsceno puede ser un método poco saludable para imponer reglas del juego diferenciadas entre los que si han hecho bien su trabajo y los que se han dedicado a ejercer de mamporreros.
A mi modo de ver ya va siendo hora que algunas cajas caigan definitivamente. Liquidar las más tóxicas, las que están retorciendo el sistema, es algo que un gobierno valiente debería de hacer para poder afrontar el camino menos complejo para salir de la crisis. Hay demasiadas entidades, cajas la mayoría, que han intoxicado el modelo y han influido determinantemente a conformar una burbuja económica inasumible.
Las cajas han elevado la morosidad mientras veían caer sus coberturas, ahora planean fusiones a propuesta del Banco de España para endurecer sus posiciones e intentar salvarse, han contribuido con su expansión territorial fuera de toda lógica a una sobrecapacidad del propio sistema y, finalmente, todas ellas viven bajo el peso de la política que impide acciones generalizadas pues siempre hay una comunidad o un partido que le interesa no ejecutarlas. Ese veneno de las cuotas participativas y otros elementos de intervención y manoseo de la política allí donde haya algo para medrar ha provocado gran parte de la burbuja financiera que nos explotará en la cara el año que viene. Sólo podría evitarlo una acción integral, estructural y decididamente bajo un pacto global y de Estado.
Mi propuesta pasa por asumir que ahora mismo se debe actuar desde la frialdad y la valentía para poner a cada uno en su sitio, hacer eficiente el sistema y procurar que, bajo el paraguas de esta crisis, se ataque el sistema financiero ligado a las cajas con reformas de calado y con la liquidación de quien deba ser liquidado, duela o escueza. El problema es la epidermis tan fina de los que deben llevar a cabo dicha reforma, pero también cabe que en momentos como estos aparezcan los verdaderos líderes, los hombres o mujeres capaces de pasar a la historia nadando a contra corriente. Alguno habrá espero…
CONSUMO Y OCUPACION
Hace poco, en una conferencia que ofrecí en una universidad andaluza dije que al que me acusara de pesimista lo acribillaba a ideas. Traducir los entrelineados de la información económica y descubrir que se nos ocultan cosas no es hacer lecturas interesadas de la realidad buscando malas noticias sino todo lo contrario, es el método que utilizo para aportar ideas realistas acerca de cómo salir de todo esto. Está claro que quedarnos en el pesimismo no ayudará a una recuperación que aun tardará mucho en llegar, pero lo ilusorio y la mentira sistemática en color pastel ayuda mucho menos.
Hace poco, en una conferencia que ofrecí en una universidad andaluza dije que al que me acusara de pesimista lo acribillaba a ideas. Traducir los entrelineados de la información económica y descubrir que se nos ocultan cosas no es hacer lecturas interesadas de la realidad buscando malas noticias sino todo lo contrario, es el método que utilizo para aportar ideas realistas acerca de cómo salir de todo esto. Está claro que quedarnos en el pesimismo no ayudará a una recuperación que aun tardará mucho en llegar, pero lo ilusorio y la mentira sistemática en color pastel ayuda mucho menos.
La economía de nuestro país debe reforzar su industria y sus exportaciones pero nada hace presagiar que eso pueda pasar en los próximos años. No puede ser que se pretenda seguir basando el modelo de creación de empleo en los servicios y la construcción. Por eso es determinante que todos los que emprendemos jugándonos nuestro patrimonio creando ocupación, sepamos hasta que punto las ayudas del gobierno a la industria se canalizan adecuadamente y llegan a las empresas para crear empleo e impulsar un consumo sostenible.
Ingentes cantidades de dinero para obras menores municipales o para subvencionar la fabricación de un coche no aportan valor estructural sino empleo puntual y, lo que es peor, no me garantiza como emprendedor que mi esfuerzo esté siendo valorado y protegido. La verdad es que las decisiones de nuestros gobernantes son erráticas y preocupan por la improvisación que reflejan. El hombre que negó la crisis y sus repercusiones durante dos años es quien debe sacarnos de ella. Parece difícil que eso pueda pasar y además la historia juzgará en su medida a quien, por esa irresponsabilidad, provocó que nuestro drama fuera mucho mayor del que nos tocaba en realidad. Por cierto la historia juzgará también a su oposición por ser incapaz de ofrecer nada al respecto y apuntarse a la evidencia en lugar de haberse adelantado en su día.
Por eso, y en ese sentido, lo importante no es saber cuando saldremos de la crisis sino de que modo. Debemos intentar sobrevivir en el momento que la tormenta nos arrecie con más fuerza, pero también es nuestra obligación empezar a pensar en cuando todo esto amaine. Esperar que nuestros gobernantes tengan en consideración algunas premisas básicas y estratégicas es cuanto me preocupa ahora.
Resumiendo son dos aspectos muy generales que me quitan el poco sueño que suelo tener. Es preciso evitar errores como no tomar medidas contra el paro a medio y largo plazo y sólo acudir a la gestación de empleo temporal y de poca continuidad atendiendo a un interés por acentuar el consumo rápido. Ninguna sociedad puede tener progreso y equilibrio cuando cuenta con nuestras tasas de desempleo. Y en segundo término, y en contraposición al pensamiento general que determina una ecuación simple en la que a más ocupación más consumo y a más consumo mayor liquidez como elemento crucial para salir de la crisis, nos podemos encontrar con un problema inesperado de falta de consumo aunque mejore la economía.
Los consumidores, por norma, se entregan a ciclos largos de gasto que van seguidos de otros periodos también largos de ahorro en los que reposan. Tras quince años de consumo enloquecido, los españoles están saciados, lo que explicaría la anorexia económica y su deflación derivada. El consumidor se ha vuelto oportunista y sabe que esperando, obtendrá la mercancía a un precio mucho más asequible. Si bien ahora hablamos de crisis de financiación, no podría ser que si volviera a hacerse posible el crédito con mayor flexibilidad, ¿el consumo ya no volvería a ser como antes?
En cualquiera de los casos será imprescindible que en las fases de gasto futuras, los consumidores dejen de utilizar el crecimiento de valor de su riqueza inmovilizada para conseguir endeudarse más como una alternativa al ahorro. Algo que siempre funcionó de un modo poco convencional puede ser toxico para una fase de recuperación aun lejana.
BONOS BASURA
La agencia financiera Moody’s amenazó hace un par de meses que bajaría la calificación de hasta 36 entidades españolas, y ha cumplido. Según éstos, la extensión de la recesión en España durante el 2010 afectará a la fortaleza de las emisiones de deuda y títulos híbridos de nuestro sistema financiero. Cuando se acepté que la crisis se agudizará durante el próximo año y que no se irá hasta entrado el 2012, la calificación bancaria será aun más inquietante. No obstante en esta ocasión, las notas han repartido adecuadamente el castigo. Si bien Santander, BBVA y Banesto siguen sobrevolando el escenario más complejo, otras entidades ya rozan lo que se viene a conocer como “bonos basura”.
La agencia financiera Moody's amenazó hace un par de meses que bajaría la calificación de hasta 36 entidades españolas, y ha cumplido. Según éstos, la extensión de la recesión en España durante el 2010 afectará a la fortaleza de las emisiones de deuda y títulos híbridos de nuestro sistema financiero. Cuando se acepté que la crisis se agudizará durante el próximo año y que no se irá hasta entrado el 2012, la calificación bancaria será aun más inquietante. No obstante en esta ocasión, las notas han repartido adecuadamente el castigo. Si bien Santander, BBVA y Banesto siguen sobrevolando el escenario más complejo, otras entidades ya rozan lo que se viene a conocer como “bonos basura”.
Esas entidades en situación muy compleja son Banco Guipuzcoano, Caixa d'estalvis de Tarragona, Caja de Burgos, Caja España, Caja de Canarias, Caixa d'estalvis de Manresa, Banco de Valencia, Caja de Ahorros del Mediterráneo, Caixa d’estalvis de Terrasa, Caja de Ávila y Caja Segovia. Estas entidades están ya en zona, según Moody’s, de riesgo, pues poseen demasiados elementos exclusivamente especulativos y con evidentes faltas de activos inversores.
La conclusión según el informe presentado es que la mayoría de esta lista en revisión negativa está a un paso del impago, que sería el valor inmediatamente inferior según ese catálogo de calificación de riesgo. Lo más interesante es que la dirección colegiada del “sistema financiero más robusto del mundo” ya ha recomendado a algunos bancos que emprendan medidas para captar capital mediante emisiones de acciones preferentes por ejemplo.
Leer el informe de Moody's pone los pelos de punta. Según ese documento la entidad de estudio y calificación "continúa preocupada porque la presión general sobre la capitalización española no ha sido suficientemente abordada" y asegura que, "a menos que se pongan medidas de apoyo y sean adoptadas por terceros tanto privados como el propio Gobierno, algunos colchones de capital podrían verse afectados pronto por las alteraciones de sus activos". Suerte que tenemos un fondo de garantía infinito.
REDES SOCIALES PERCIBIDAS
Hoy he estado en el Hotel Westin Palace para dar una conferencia sobre “Redes Sociales percibidas, nuevas métricas de publicidad para los entornos web actuales”. El efecto que he producido en el auditorio se puede ver aquí o aquí. Durante algo más de media hora y ante los responsables de comunicación de las principales empresas de este país, entre ellas una decena de Ibex35, y agentes implicados en las adiministraciones públicas estatales, autonómicas y locales. He intentado ahondar con el planteamiento que las redes sociales digitales en si mismas no significan nada si no se logra enlazar con elementos de carácter analógico. Se precisan acciones que monotoricen las redes sociales percibidas. He explicado que las métricas que hasta ahora se usan son réplicas de los sistemas de medición tradicionales y eso en la web social no sirve. El buzz (ruido en la red) es un sistema en decadencia. No funciona para medir pues responde a los patrones de uso y análisis tradicionales y que ahora no son eficientes. Finalmente he buscado elegir los elementos básicos de enlace entre la mética digital en la web social y su génesis en lo analógico. En los próximos días seguiré atendiendo este tema en este blog.
Hoy he estado en el Hotel Westin Palace para dar una conferencia sobre “Redes Sociales percibidas, nuevas métricas de publicidad para los entornos web actuales“. El efecto que he producido en el auditorio se puede ver aquí o aquí. Durante algo más de media hora y ante los responsables de comunicación de las principales empresas de este país, entre ellas una decena de Ibex35, y agentes implicados en las adiministraciones públicas estatales, autonómicas y locales. He intentado ahondar con el planteamiento que las redes sociales digitales en si mismas no significan nada si no se logra enlazar con elementos de carácter analógico. Se precisan acciones que monotoricen las redes sociales percibidas. He explicado que las métricas que hasta ahora se usan son réplicas de los sistemas de medición tradicionales y eso en la web social no sirve. El buzz (ruido en la red) es un sistema en decadencia. No funciona para medir pues responde a los patrones de uso y análisis tradicionales y que ahora no son eficientes. Finalmente he buscado elegir los elementos básicos de enlace entre la mética digital en la web social y su génesis en lo analógico. En los próximos días seguiré atendiendo este tema en este blog.
OBRA PUBLICA INEFICIENTE
El último informe de la Seopan de los constructores advierte que la licitación de obra pública de Estado ha caído un 70% en un año. Obviamente esa reducción no se contraresta con el PlanE y el catálogo de obras menores en el ámbito municipal que se ha ventilado 8000 millones de euros. El empequeñecimiento de la inversión en infraestructuras denota que el gobierno no asumió nunca el tamaño de la crisis. No pensaron que la caída de ingresos del Estado se reducirían una cuarta parte mientras que el gasto se debería de incrementar en costes de todo tipo vinculados al paro y a los programas de acción paliativa.
Los planteamientos de la izquierda económica en épocas de crisis suele ser la de aplicar gasto público como palanca y vincularlo a obras de infraestructuras. De las medidas que se pueden adoptar esa es una y suele dar resultado. El problema es que no suelen ser acciones de respuesta inmediata pues precisan de estrategia a medio plazo. Por esto sabemos que es preciso para que su uso sea efectivo, que la crisis se prevea con tiempo, se asuma y se adopten planes de inversión con mucha antelación. En nuestro caso eso no ha sucedido y ahora las políticas aplicadas a la salida keynesiana típica queda lejos de las capacidades de acción del gobierno de Zapatero.
El último informe de la Seopan de los constructores advierte que la licitación de obra pública de Estado ha caído un 70% en un año. Obviamente esa reducción no se contraresta con el PlanE y el catálogo de obras menores en el ámbito municipal que se ha ventilado 8000 millones de euros. El empequeñecimiento de la inversión en infraestructuras denota que el gobierno no asumió nunca el tamaño de la crisis. No pensaron que la caída de ingresos del Estado se reducirían una cuarta parte mientras que el gasto se debería de incrementar en costes de todo tipo vinculados al paro y a los programas de acción paliativa. Por todo ello el déficit está fuera de control. Se empieza a aceptar que rozaremos el 10% o incluso más.
La primera consecuencia es que el Estado ya no tiene fondos para ejecutar obras públicas. Las elecciones europeas pasarán sin pena ni gloria y tras ellas la realidad irá tomando forma. Se alejarán los focos y se nos aparecerán las sombras. Los ejercicios malabares del ministro de Fomento dejarán de parecer planes de desarrollo ambicioso y se toparán con la imposibilidad de ejecutar con partidas de presupuestos en curso ninguna obra relevante.
Blanco ha optado por solicitar la participación del sector privado en ese modelo keynesiano además de adelantar obras indicadas para ejercicios presupuestarios futuros, pero la verdad pesa como el plomo y se muestra obtusa.
El Estado ya no tiene posibilidades de ser arbitrario en el gasto ni de hacerlo de modo discrecional pues ya no puede solicitar financiacion crediticia extraordinaria para la financiacion de ninguna obra destacada. Para que se concedan nuevas vias financieras que superen los presupuestos aprovados debe acudir al parlamento y explicarse. Debería de responder demasiadas preguntas: que, como , cuando, cuanto y porque. A parte que hay que mostrar solvencia y explicar como se espera saldar las deudas y el déficit que se va acumulando. Pinta mal para Zapatero y para Blanco si esa es la única via.
El tope de gasto aprobado por los diputados de este país son 160000 millones de euros y todo ello está ya comprometido en el mejor de los casos, o ya se ha gastado en el peor, pues se han aplicado a partidas sociales por culpa de la caida del empleo. El único camino que le queda al gobierno es pedir un aumento de ese techo inversor al parlamento que sea realista y atienda a la situación económica del pais, esa situación que niegan o disimulan pero que conocen perfectamente.
Por eso a uno se le queda cara de tonto cuando escucha que la inversión publica dará cumplida respuesta a la caída de la economía. Eso es pura propaganda que para que sea realidad y atienda a un masivo plan inversor necesita pasar su propia via parlamentaria a fin de que se genere una nueva estructura económica a nivel presupustaria que lo permita.
A todo esto, me pregunto si la oposición del PP tiene idea de lo que estoy hablando.
NEGAR LA DEFLACION
Hace tiempo que este blog habla de deflación y sabemos que es un escenario siniestro. El mayor problema de la deflación es que sólo se puede combatir con uno de los elementos que nos ha llevado a esta crisis, fabricando billetes y no capital. La inyección de dinero en el sistema suele incentivar el consumo y con él, según el manual, se inicia la recuperación. La impresora ha ido a toda máquina desde hace meses y parece que no surte efecto, se ha puesto el dinero a coste cero y todo indica que tampoco está generando confianza inversora. Los brotes verdes siguen muy verdes. Hoy hemos conocido la imparable caída de la inflación. El dato adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado IPCA se redujo seis décimas en mayo hasta situarse en el -0,8% interanual. Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, con este, son ya tres los meses en los que el indicador registra tasas negativas. Ya podemos ir hablando de Deflación.
Hace tiempo que este blog habla de deflación y sabemos que es un escenario siniestro. El mayor problema de la deflación es que sólo se puede combatir con uno de los elementos que nos ha llevado a esta crisis, fabricando billetes y no capital. La inyección de dinero en el sistema suele incentivar el consumo y con él, según el manual, se inicia la recuperación. La impresora ha ido a toda máquina desde hace meses y parece que no surte efecto, se ha puesto el dinero a coste cero y todo indica que tampoco está generando confianza inversora. Los brotes verdes siguen muy verdes. Hoy hemos conocido la imparable caída de la inflación. El dato adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado IPCA se redujo seis décimas en mayo hasta situarse en el -0,8% interanual. Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, con este, son ya tres los meses en los que el indicador registra tasas negativas. Ya podemos ir hablando de deflación.
Está claro que esta caída de precios es inédita en nuestro entorno y que depende en gran medida de factores no estructurales, pero aporta valor al hecho de que nuestra económica está anoréxica. No tiene porque ser una deflación como las académicas y ser corta, de recorrido escaso, pero sin embargo eso no la convierte en algo tremendamente nocivo. Con la deflación llega el paro desmedido, la caída del PIB, la reducción de solvencia, la parada técnica de la economía, las revisiones salariales desconocidas y la reducción de toda lógica mercantil.
Esta caída ha sido mayor de lo que esperaban todo Dios. La semana pasada en el debate sobre “economía y redes sociales” en el que estuve, se habló que en el peor de los casos el dato se situaría en el -0,7%. Pues ha sido un poco más. Se trata del tercer registro negativo interanual consecutivo de la historia del IPCA y que si coíncide con el IPC el 10 de junio, supondría la tercera caída de precios desde principios de los 60, algo inédito.
Y a todo esto el gobierno descarta la deflación. A esto hay que ponerle pinzas pues en deflación ya estamos. Técnica y prácticamente. Estamos en la parte que favorece a unos y encomienda a otros. Para los que pagan lo mismo con sueldos similares la cosa pinta bien, para los que venden más barato consumiendo a precios de siempre el tema es otro. De todos modos poco a pocos eso se va a ir traduciendo en el deterioro de las fases de gestión económica. Poco a poco a todos se nos va a atragantar esta caída de precios, es cuestión de tiempo. Que a finales de año puede repuntar y situarse en tasas positivas es posible debido a la afección del crudo, pero en general la desidia industrial y su producción no se verá sustituida por una alegría inversora.
Volvemos a estar donde siempre. La realidad es una, los economistas lo traducimos, los políticos lo niegan, los ciudadanos celebran la Champions y siguen aumentando los parados y la gente que se va a dormir sin cenar. Ahora resulta que Deflación es una caída generalizada y prolongada de los precios y no el mecanismo local de cálculo para alquileres, revisiones de precios por valor IPC, etc. Pues va a ser divertido observar como se gestionan algunos cambios de cuotas en modelos mercantiles que se revisan estos días por orden contractual el valor de pago.
Además, la caída ha sido de vértigo. Desde julio de 2008, cuando alcanzó su máximo en el 5,3%, el IPCA ha descendido más de 6 puntos. Es cierto que, coincidiendo con la tendencia a la baja del precio del petróleo y con el abaratamiento de algunos alimentos. No obstante hay que entender que hace un año, en mayo de 2008, la tasa interanual del IPCA estaba ya en el 4,7%.
Para los que defienden que el IPCA no vale, que el importante es la inflación subyacente, esa que no contiene ni alimentos frescos o energéticos, cabe decir que el petróleo ya ha duplicado su precio en los últimos meses y aún así el IPC armonizado se está dando el batacazo. A mi modo de ver, hay que empezar a hablar de deflación, de lo que supone y de cómo pretendemos luchar contra ella, negarla solo agrandará el problema como ya hicieron con la crisis doméstica hace un año.
MAQUILLAR EL DETERIORO
Uno de mis diarios franceses predilectos, La Tribune, se descargó este domingo con un artículo de Sophie Rolland en el que hace referencia a la reconsideración de Moody’s y la solvencia de nuestros bancos. Concretamente dice que la agencia revisará el conjunto de instituciones financieras de la Península Ibérica. La mayoría de las calificaciones de deuda senior y de los títulos híbridos emitidos por estos bancos debería revisarse a la baja. El artículo se refiere exactamente en estos términos: “Durante algún tiempo alejados de la crisis financiera, los bancos españoles sufren cada vez más el deterioro de la situación económica. Los resultados del primer trimestre han venido a ilustrar las dificultades del sector bancario: los beneficios acumulados por las cinco instituciones financieras más importantes españolas han retrocedido un 18%. Moody´s anticipa que ‘la continuación del deterioro de la calidad de activos de los bancos españoles’ esta semana ha degradado las calificaciones de solidez financiera de 36 instituciones. Además, contempla la posibilidad de degradar las clasificaciones de la deuda”
Uno de mis diarios franceses predilectos, La Tribune, se descargó este domingo con un artículo de Sophie Rolland en el que hace referencia a la reconsideración de Moody’s y la solvencia de nuestros bancos. Concretamente dice que la agencia revisará el conjunto de instituciones financieras de la Península Ibérica. La mayoría de las calificaciones de deuda senior y de los títulos híbridos emitidos por estos bancos debería revisarse a la baja. El artículo se refiere exactamente en estos términos: “Durante algún tiempo alejados de la crisis financiera, los bancos españoles sufren cada vez más el deterioro de la situación económica. Los resultados del primer trimestre han venido a ilustrar las dificultades del sector bancario: los beneficios acumulados por las cinco instituciones financieras más importantes españolas han retrocedido un 18%. Moody´s anticipa que ‘la continuación del deterioro de la calidad de activos de los bancos españoles’ esta semana ha degradado las calificaciones de solidez financiera de 36 instituciones. Además, contempla la posibilidad de degradar las clasificaciones de la deuda"
Será por esto o por lo otro que bancos y cajas se han lanzado a la carrera de las participaciones preferentes y han anunciado emisiones por importe de casi 10.000 millones de euros. Debo explicar que las participaciones preferentes rescatan los ratios de solvencia de las entidades financieras en un momento en que los inversores de los mercados de todo el mundo tienen sus modelos de análisis en referencias como el 'core capital' y el 'Tier1' a la hora de tomar decisiones de compra y venta de títulos. Seguimos con esa dinámica de maquillarlo todo.
Este tipo de preferentes son un instrumento complejo y de riesgo elevado que puede generar rentabilidad, pero también pérdidas en el capital dependiendo de la situación del mercado. En resumen y traduciendo en lenguaje plano, que su retribución está condicionada a los beneficios del emisor, y sólo pueden amortizarse si la entidad lo considera adecuado.
Es curioso que los bancos y cajas basen estas acciones en participaciones preferentes que no cotizan en Bolsa, sino que se negocian en un mercado organizado, y aunque pueden tener un contrato de liquidez ésta es limitada, por lo que no es fácil deshacer la inversión una vez realizada. Este tipo de escenarios no otorgan transparencia y confianza, precisamente lo que más se necesita ahora.
¿ENREDADOS SOCIALES?
Ayer estuve en Segovia donde pronuncié la ponencia sobre redes sociales y marketing a los alumnos del máster de Comunicación estratégica a través de las nuevas tecnologías de la Universidad de Valladolid, e intenté explicar que las redes sociales digitales por si solas no son eficientes en el mundo de la publicidad o de la comunicación, por ello les ofrecí mi teoría de que si esto no se traslada correctamente al cliente, si no se le explica que hay que buscar encajes sociológicos con entornos analógicos, pronto todo este ecosistema digital repleto de términos muy atractivos puede pincharse. Os dejo con algunas preguntas que me hicieron al terminar y os recomiendo la que también ofreció Javier Celaya.
Ayer estuve en Segovia donde pronuncié la ponencia sobre redes sociales y marketing a los alumnos del máster de Comunicación estratégica a través de las nuevas tecnologías de la Universidad de Valladolid, e intenté explicar que las redes sociales digitales por si solas no son eficientes en el mundo de la publicidad o de la comunicación, por ello les ofrecí mi teoría de que si esto no se traslada correctamente al cliente, si no se le explica que hay que buscar encajes sociológicos con entornos analógicos, pronto todo este ecosistema digital repleto de términos muy atractivos puede pincharse. Os dejo con algunas preguntas que me hicieron al terminar y os recomiendo la que también ofreció Javier Celaya.
SUMERGIDOS EN LA RECESION
En la crónica que ayer publicaba La Tribune ayer, titulada “España sumergida en la recesión”, Thierry Maliniak señalaba que “España continúa hundiéndose en la crisis. Todo lleva a creer que las cifras definitivas del 20 de mayo indicarán un nuevo y fuerte repliegue tanto del consumo de las familias como de la inversión que, en el cuarto trimestre de 2008 descendieron, en términos anuales un 2,3% y un 9,3% respectivamente. Y, si mejora el comportamiento de la demanda exterior, será por el retroceso de las importaciones inducido por la recesión”. Por Creo que las cifras van a ser muy similares a lo que en ese artículo se refiere. Lo sabremos mañana.
En la crónica que ayer publicaba La Tribune ayer, titulada “España sumergida en la recesión”, Thierry Maliniak señalaba que “España continúa hundiéndose en la crisis. Todo lleva a creer que las cifras definitivas del 20 de mayo indicarán un nuevo y fuerte repliegue tanto del consumo de las familias como de la inversión que, en el cuarto trimestre de 2008 descendieron, en términos anuales un 2,3% y un 9,3% respectivamente. Y, si mejora el comportamiento de la demanda exterior, será por el retroceso de las importaciones inducido por la recesión”. Creo que las cifras van a ser muy similares a lo que en ese artículo se refiere. Lo sabremos mañana.
En el mismo artículo también se arremete desde otro punto vista que aquí hemos comentado muchas veces. Maliniak dice que “hasta ahora, las cifras del PIB en España eran ligeramente menos desfavorables que las de la media de la eurozona. Pero esta reprimenda es importante por dos motivos: en primer lugar, porque para un ritmo de recesión dado, España destruye más empleos que sus vecinos. Y porque todos los organismos internacionales afirman que la recuperación será más lenta al sur de los Pirineos que en el resto”. A partir de ahora vamos a ir digiriendo noticias de que el mundo va ralentizando la caída mientras que en España se irán indigestando las cifras.
A medida que el tiempo se consume las opciones de salir de esta situación sin sacrificios gigantescos se aleja. En este tema no ayuda demasiado que el escenario de los mercados continúe con su rally alcista. Mientras nos hacen creer que la bolsa sube por estar descontando un escenario de recuperación económica, lo que en realidad puede estar pasando es que estamos ante un proceso de estabilización en el mercado y que tiene que ver más con las medidas coyunturales y de dudoso valor estructural, que con una salida de la crisis real. La bolsa no refleja los problemas a los que se enfrentan las empresas de nuestro país. Problemas que no son mayores que a los que se enfrentan muchas compañías americanas o europeas, pero que difieren en su evolución y en su desarrollo. Aquí vamos a tener que lidiar con una caída del consumo brutal y con un aumento de la morosidad desconocido que en otros países no tendrá esta envergadura.
La evidencia de esa caída del consumo y de la producción industrial y en como afecta a las empresas no se verá en 2009, ese será el año de la adaptación. Las compañías que no sean capaces de acomodarse de modo ágil a este ecosistema tan difícil tendrán gravísimos problemas para sobrevivir durante el segundo trimestre de 2010, cuando empiecen a verificarse los estados contables sin posibilidad de maquillaje.
ESTAN CAMBIANDO LAS REGLAS
Este post es algo más denso de lo habitual. Espero poder explicar una de las preocupaciones que me invaden los últimos días y que tiene que ver con el riesgo de cambiar el tablero y las reglas de un juego en el que nuestro futuro está tatuado. Lo intentaré. Durante los últimos años, tanto Europa como los EUA han realizado un gran esfuerzo, no exento de sacrificios, para intentar que se armonizaran los métodos contables y los modelos financieros a nivel internacional. Los llamados Internacional Financial Reporting Standards se han ido convalidando con los Generally Accepted Accounting Principles of the USA. Mucha gente desconoce que los sistemas de calibrado financiero son distintos entre nuestro entorno euro y los americanos. Pues bien, en los últimos tiempos ese objetivo de consensuar un mecanismo único a nivel mundial parecía una probabilidad inmediata. La verdad es que no solo es deseable que así sea, sino que es casi imprescindible para darle credibilidad a los elementos de medida y análisis de la economía mundial. Sin embargo nuestro gozo en un pozo.
Este post es algo más denso de lo habitual. Espero poder explicar una de las preocupaciones que me invaden los últimos días y que tiene que ver con el riesgo de cambiar el tablero y las reglas de un juego en el que nuestro futuro está tatuado. Lo intentaré. Durante los últimos años, tanto Europa como los EUA han realizado un gran esfuerzo, no exento de sacrificios, para intentar que se armonizaran los métodos contables y los modelos financieros a nivel internacional. Los llamados Internacional Financial Reporting Standards se han ido convalidando con los Generally Accepted Accounting Principles of the USA. Mucha gente desconoce que los sistemas de calibrado financiero son distintos entre nuestro entorno euro y los americanos. Pues bien, en los últimos tiempos ese objetivo de consensuar un mecanismo único a nivel mundial parecía una probabilidad inmediata. La verdad es que no solo es deseable que así sea, sino que es casi imprescindible para darle credibilidad a los elementos de medida y análisis de la economía mundial. Sin embargo nuestro gozo en un pozo.
La crisis del sistema financiero internacional ha derrumbado todo lo hecho en ese sentido y ha obligado a implantar modificaciones al proyecto de reforma global. Por ejemplo, una de las más desagradables hace referencia a la posibilidad de que determinados activos puedan ser reclasificados sin previo aviso, de manera que se permite a una entidad de gestión patrimonial valorar sus activos al valor que se considere de mercado. Así se evita aflorar las pérdidas derivadas que tener esos activos puede representar. Hablando en plata, que ahora no se exige reconocer las pérdidas.
Sé que estáis pensando que eso no es lícito. No lo es. Es como cambiar las reglas del juego cuando te conviene. Unas nuevas normas que traerán graves consecuencias para todos. Desde ahora, y gracias a esta crisis curiosamente, es mucho más difícil conocer la verdadera situación de un negocio en base a sus resultados presentados a nivel financiero. Es contradictorio, lo lógico sería que una crisis del sistema obligara a mejorar los mecanismos de transparencia en la gestión, en la contabilidad y en el flujo financiero. Como ayer comentábamos, esta recesión trae consigo más opacidad y más oligarquía inútil.
Para los que asesoramos a inversores, ahora es mucho más complejo hacer nuestro trabajo. Se ha complicado mucho encontrar información financiera diáfana, la mayoría empiezan a no reflejar claramente la situación de las empresas cotizadas. Hay quien dice que esto no es tan grave, que siempre ha sucedido y que el maquillaje contable es una realidad de la que no podemos abstraernos. Falso, así nunca había pasado. Este cambio de normas solo favorece a los que han tenido una mala gestión de su negocio e imposibilita la competencia adecuada. Estamos ante una nueva ración de mentiras que son muy nocivas para la economía en general y que tarde o temprano llegará a la economía real.
Hay que tener en cuenta que cambiar las reglas genera ineficiencias en la bolsa ya que coloca al nivel de los notables a los suspensos. Está claro quien va a pagar todo esto. ¿Lo adivináis? Exacto, los contribuyentes. A cambio, los artífices de esos cambios argumentan que se están produciendo en un momento de grave crisis y en un contexto que lo exige. Sin embargo eso es otra falacia. No podemos aceptar que las reglas se exceptúen cuando interese, sería como decir que los mercados financieros solo son fiables en épocas de crecimiento e incluso en etapas de burbujas incontrolables. No me lo trago.
Seguramente esa variante de la regla reconocida en un escenario como el actual permitirá sobrevolar la situación a corto plazo, pero en un futuro algo más general todos estos cambios y excepciones van a repercutir en un ambiente falseado y de escasa credibilidad que repercutirá finalmente en una falta de confianza estructural. Esa falta de confianza fue la que nos puso entre la espada y la pared hace un par de veranos y no hay manera de que algunos aprendan la lección.
LA LOCURA DEL DEFICIT PUBLICO
En esta sección del blog se intentará a diario buscar fragmentos de la prensa internacional que nos cuenten las cosas como están pasando, visto que en nuestro país va a ser difícil o casi imposible que suceda, pues unos pintarán de rosa la realidad y los otros se emperrarán en demostrar que no tienen puta idea de lo que realmente está pasando. En este sentido ayer se podía leer en La Tribune francesa un artículo de Valérie Ségond titulado “La loca apuesta del déficit público”. A continuación os muestro un extracto muy acertado y que os propongo a debate.
En esta sección del blog se intentará a diario buscar fragmentos de la prensa internacional que nos cuenten las cosas como están pasando, visto que en nuestro país va a ser difícil o casi imposible que suceda, pues unos pintarán de rosa la realidad y los otros se emperrarán en demostrar que no tienen puta idea de lo que realmente está pasando. En este sentido ayer se podía leer en La Tribune francesa un artículo de Valérie Ségond titulado “La loca apuesta del déficit público”. A continuación os muestro un extracto muy acertado y que os propongo a debate.
“El déficit y las deudas públicas de las grandes economías estallan. El FMI que, a finales de diciembre, invitaba a los gobiernos a emprender políticas presupuestarias agresivas para evitar la deflación, hoy les pide que demuestren cuanto antes que sus estrategias de retorno al equilibrio de las finanzas públicas son creíbles: es una señal que no engaña. Se perfila una preocupación sorda respecto de la salida de la crisis. Si habiendo escarmentado por un endurecimiento de la obtención del crédito que les ha llevado al borde del precipicio, las empresas se hacen de rogar a la hora de invertir y de contratar personal para desarrollarse, el paro seguirá creciendo y los hogares tendrán que apretarse el cinturón aún más. Podría ser posible que un crecimiento sin efecto palanca, es decir un crecimiento débil, se perfile en el horizonte. Hay tres condiciones para que el endeudamiento del Estado no sea malo en sí: que prepare el futuro; que se mantenga por debajo de un nivel que no rompa las anticipaciones de los agentes privados, únicos creadores de riquezas; y que no aparezca en un entorno cíclico. El endeudamiento de los Estados sólo es soportable si los agentes privados no temen endeudarse de nuevo.” ¿Cuántos de estos tres preceptos cumple el enloquecido reto presupuestario de Zapatero?
¿POR QUE SUBEN LAS BOLSAS?
Ayer pudimos ver como en las cabezas de los insectos que nos representan en el congreso de los diputados solo hay atajos partidistas. Se han olvidado definitivamente de lo que nos ocupa. Unos aportando propuestas que vamos a pagar todos y otros asegurando que ellos si son capaces de darle la vuelta a esto. Un presidente superado por el temario pues de economía no tiene la más mínima idea y un jefe de la oposición arruinado por su propia ignorancia en el mismo tema. Patético. Y mientras este país se autodestruye gracias al pilotaje suicida de nuestros representantes, las bolsas a lo suyo. La pregunta que me hace mucha gente estos días es ¿Cómo puede ser que si todo va tan mal la bolsa vaya tan bien?
El Ibex está viviendo un rebote, eso es algo evidente. Ha pasado de los 6700 a primeros de marzo a los 9000 largos de hoy. Podemos decir que el indicador selectivo español ha subido un 40% desde entonces. Algo que no es aislado pues en Wall Street y en el Eurostoxx también ha sucedido. Lo curioso es que estas subidas desproporcionadas que deben haber hecho ricos a unos cuantos, se sucedían en paralelo a noticias nefastas. La actividad económica está en una fase muy negativa pero no parece afectar a los índices bursátiles. El crecimiento negativo de 4 puntos para Europa, de 6 para España o de, por segundo trimestre consecutivo, de 6,2 % en los EUA no parece que sean datos que debieran animar las bolsas.
Ayer pudimos ver como en las cabezas de los insectos que nos representan en el congreso de los diputados solo hay atajos partidistas. Se han olvidado definitivamente de lo que nos ocupa. Unos aportando propuestas que vamos a pagar todos y otros asegurando que ellos si son capaces de darle la vuelta a esto. Un presidente superado por el temario pues de economía no tiene la más mínima idea y un jefe de la oposición arruinado por su propia ignorancia en el mismo tema. Patético. Y mientras este país se autodestruye gracias al pilotaje suicida de nuestros representantes, las bolsas a lo suyo. La pregunta que me hace mucha gente estos días es ¿Cómo puede ser que si todo va tan mal la bolsa vaya tan bien?
El Ibex está viviendo un rebote, eso es algo evidente. Ha pasado de los 6700 a primeros de marzo a los 9000 largos de hoy. Podemos decir que el indicador selectivo español ha subido un 40% desde entonces. Algo que no es aislado pues en Wall Street y en el Eurostoxx también ha sucedido. Lo curioso es que estas subidas desproporcionadas que deben haber hecho ricos a unos cuantos, se sucedían en paralelo a noticias nefastas. La actividad económica está en una fase muy negativa pero no parece afectar a los índices bursátiles. El crecimiento negativo de 4 puntos para Europa, de 6 para España o de, por segundo trimestre consecutivo, de 6,2 % en los EUA no parece que sean datos que debieran animar las bolsas.
Los motivos por los que se está produciendo esta paradoja pueden ser varios pero yo destacaré los siguientes, que además muestran un patrón de conducta muy inestable pero que de momento está preparando el territorio para una nueva modificación de las tendencias:
Por un lado destaca la impresión de que el mercado estaba sobrevendido y que una vez se ha interpretado que la cosa no era tan dura como en los años 30, los inversores han regresado. De hecho había valores con precio técnicamente nulo. Algunos bancos valían menos que los depósitos que tenían y sin contar su valor patrimonial fuera el que fuese. Eso parece que tenía que corregirse.
Por otra banda, los famosos brotes verdes están siendo la tónica mediática de última hora. Sabemos que la tendencia informativa actual es la de no informar sobre lo malo e incidir sobre lo bueno. Nadie parece dispuesto a saborear las malas noticias ni a aceptar un cambio sistémico. La opinión pública disfruta con cualquier dato que aporte esperanza y le da igual si esas cifras conllevan pan para hoy y hambre para mañana. Lo importante es positivar el escenario. En eso estamos y es cierto que algunas noticias hablan de que los “signos de recuperación” cada vez son más evidentes. Obviamente ese espejismo conduce al aumento de la confianza y con ella los inversores asumen que lo peor ya ha pasado.
Por último cabe destacar que los bancos centrales se están empleando a fondo y en su decidida actuación muchos inversores han interpretado un futuro mejor a corto plazo. Poner tipos al 1% en Europa, comprar deuda, vender el dinero gratis en EUA o asumir la nacionalización de algunas entidades han reforzado el sistema financiero y la confianza ha llegado en algunos campos del interbancario trasladando a la bolsa una tranquilidad que no deja de ser aparente.
Pues bien, no es oro todo lo que reluce. Para empezar algunas empresas que estaban sobrevendidas lo estuvieron por unos resultados previstos muy negativos que al final no lo fueron tanto. Esa impresión de que las cosas no están tan mal como nos pensamos ha dado alas a algunas cotizaciones. El problema es que no se atiende que si la previsión de caída en beneficios de una empresa era del -40% y al final ha resultado ser del una tasa negativa del 25, la realidad es que esa empresa está en graves pérdidas por mucho que no sean tan grandes como algunos “analistas” predijeron. Por otra parte, los datos positivos en la economía son el resultado de inyecciones que se deberán de pagar tarde o temprano y que no conllevan una solución estructural sino coyuntural. Y finalmente, la garantía de los bancos centrales de que la bajada histórica y peligrosa de tipos hasta estos niveles casi nulos no será algo puntual sino que la previsión es mantener el precio del dinero al 1% o más bajo incluso cuando la recuperación sea real lo que va a provocar es otra burbuja de consumo aun mayor. El error se volverá a cometer y eso, aunque las bolsas ahora no lo reflejen, ya tendrán tiempo de entrar en pánico.
Llevo muchos años trabajando en bolsa y se que ahí se apuesta por que las cosas pueden mejorar aunque las noticias digan lo contrario y además es muy habitual que esa actitud acabe dando resultados. Sin embargo la bolsa, los inversores, los banqueros, los gobiernos, los periodistas, los economistas, los docentes y todos los hijos de puta que salen hasta de debajo de las piedras en época electoral, saben que esto es una gran mentira.
Fijaros bien. En los EUA y debido a decisiones que han modificado leyes contables, los bancos pueden esconder sus pérdidas sufridas con las subprime o créditos de dudoso cobro. Evidentemente al hacer un balance en el que no reflejas esas pérdidas, lograrás que salga positivo en la mayoría de los casos, pero eso no deja de ser un gesto tramposo por muy legal que sea. El gobierno de Obama permite posponer la publicación de las pérdidas pero sin embargo no les permite actuar en virtud de esos números por que en realidad están tremendamente jodidos. No pueden mantener el nivel de crédito que el sistema americano consumista precisa. Sin crédito la recuperación no será efectiva y acabará por hundir el patrón deficitario que la administración Obama ha puesto en marcha.
La sensación de que aquí la gente se engaña al solitario es sorprendente. Resulata que el indice VIX, un valor que analiza el riesgo de que se repita otro crack del 29 ha pasado de un 96% de probabilidad a un 33 en los últimos días. Ese descenso del pánico se debe a una gran mentira que se aguanta en una decisión política que permite esconder las pérdidas a los bancos americanos. En España ya se ha planteado lo mismo y las cajas han dejado de tener la obligación de explicarse en ese sentido.
Todo es como surrealista. Ellos cambiando las reglas, maquillando lo que no se debe ver o viéndolo como interesa, mientras la gente vive de espaldas a todo ello intentando mantener su vida de juguete y color pastel a modo de clase media exuberante y ligeramente distanciada de tanta miseria.
De todos modos las bolsas están sobrevaloradas. Se suele decir que predicen escenarios, que aportan datos sobre lo que va a pasar. Sin embargo no siempre es así. Las bolsas se basan en la publicación de resultados de las empresas cotizadas y en este sentido vienen buenos tiempos pues la mayoría de esas empresas irán presentando mejores resultados de los esperados porque lo peor, como decíamos, no fue 2008, ni lo será 2009, lo peor está por llegar y se llama 2010. Muchos inversores lo saben pero juegan a corto esperando recuperar lo perdido el año pasado y sobredimensionando con cualquier noticia favorable sus activos y ganando los ratios expuestos.
La pena de todo ello es que todo esto es cartón piedra, basado en datos maquillados, virtuales y en el que todos saben que no representa la realidad. Los inversores que ya tienen posiciones asentadas esperan que otros entren con fuerza y revaliden sus apuestas. En todo caso, no hagan caso de cómo vaya la bolsa, ahora mismo es un escenario para gestores patrimoniales que eluden atender lo que pasa realmente y prefieren el río revuelto. Sirve para justificar los dichosos brotes verdes.
TRICHET SUMA Y SIGUE
Nassim Nicholas Taleb, investigador financiero estadounidense y miembro del Instituto de Ciencias Matemáticas de la Universidad de Nueva York, dijo ayer en Singapur que “este es el periodo más difícil en términos económicos de la historia para la humanidad, porque los gobiernos no tienen el control de la situación”. Taleb considera que nos acercamos a una “gran deflación” aunque tiene claro que la sucederá una hiperinflación desconocida hasta la fecha en occidente por culpa de la impresión generalizada de dinero de los gobiernos. Y eso es pecisamente lo que ha decidido hacer Trichet.
Nassim Nicholas Taleb, investigador financiero estadounidense y miembro del Instituto de Ciencias Matemáticas de la Universidad de Nueva York, dijo ayer en Singapur que “este es el periodo más difícil en términos económicos de la historia para la humanidad, porque los gobiernos no tienen el control de la situación". Taleb considera que nos acercamos a una “gran deflación” aunque tiene claro que la sucederá una hiperinflación desconocida hasta la fecha en occidente por culpa de la impresión generalizada de dinero de los gobiernos. Y eso es pecisamente lo que ha decidido hacer Trichet.
Resulta que una vez ha asumido Trichet que se está quedando sin munición y que los tipos de interés no se pueden bajar mucho más, va a atender a medidas extraordinarias para combatir una crisis que él también obvió irresponsablemente. Su método de poner en marcha las impresoras de billetes será comprando deuda y títulos hipotecarios a entidades, curiosamente alemanas la gran mayoría, y ampliando los plazos de financiación a los bancos hasta los doce meses. Su voluntad es relativamente razonable, lo que no tengo claro es si hacerlo tan tarde va a servir de algo. El amigo Jean Claude intenta activar la economía para que no pase como en Japón donde las inyecciones no sirvieron de nada y, como sabemos que este hombre está obsesionado con la inflación, ha estado retrasando estas acciones lo máximo posible para que no se le descontrole en forma de hiperinflación. La historia demuestra que este hombre se equivoca más que habla y las consecuencias suelen ser desastrosas. Hace un año se negaba a rebajar tipos, al contrario los subía y no atendía a las voces de alarma que reflejaban una desaceleración de la zona euro y a una evidencia de que era el precio del crudo el que mantenía la inflación tan alta.
En Europa dicen que el crecimiento del PIB será un 4 por ciento negativo. Probablemente será bastante más, un 6 o 6,5 con toda seguridad. En el Banco Central lo saben, como saben alguna cosa más. La banca está muy dañada y por mucho que baje los tipos ésta no traslada esas reducciones a la economía real.
¿Por qué Trichet ha admitido al final comprar deuda defectuosa? Intenta desbloquear el mercado hipotecario, por lo menos el de titulaciones, a fin de que los bancos empaqueten sus prestamos, los vendan en cédulas y puedan seguir operando. Es el único mecanismo que permite hoy en día que el mercado crediticio funcione. Él espera que esa liquidez real en el sistema tras las compras de deuda ayude a reducir el euribor aun más y que se traslade realmente a las familias y empresas. El problema, sin embargo, es que los gobiernos no actúan, no acometen reformas estructurales en la banca. Si no reforman los sistemas bancarios no se logrará dejar el sector en posición adecuada para poder recapitalizar y en consecuencia prestar.
Trichet ha decidido no atender a la historia y adentrarse en lo desconocido, llegando a tasas inéditas en el precio del dinero por un lado y en la adopción de medidas extraordinarias por el otro. El error vuelve a ser manual. La deuda presiona el sistema y tiene que ser reemplazada por renta variable, ya que los bonos, aunque parecen estables, tienen muchos riesgos escondidos. Por el contrario la renta variable es inestable, pero evidencia lo que tienes. Mientras las cortinas de humo se suceden las unas a las otras, mientras nos adentramos en el enfangado universo paralelo de las encuestas electorales, el mundo sigue su curso. A la vez que aquí vivimos en playback (unos hacen como que cantan/gobiernan y otros hacemos como que nos lo creemos), la verdad será que en el mundo financiero global, los derivados de crédito y las divisas causarán miles de millones de euros de pérdidas más. Van a producirse grandes roturas aun, va a haber más pérdidas para las compañías que tienen derivados de crédito. Esto, que ahora parece algo que se aleja, regresará a finales de año y con una virulencia aun mayor.
Pd. Recomiendo toda la obra de Taleb, alguien que en su obra expone la tendencia humana a sobrevalorar la causalidad y a creer que el mundo es más explicable de lo que realmente es, buscando explicaciones incluso cuando no las hay.
ELECTIONS EUROPEENNES
Hace unos días, durante la conferencia de Krugman en Bruselas, conocí a Christoph B. Schiltz. Este alemán, economista escolástico y poco dado a la exageración acusó al premio Nóbel de no dar soluciones realistas a unos problemas que había identificado tarde y a cuyo diagnóstico se apuntó al final. Dejando de lado ese juicio, me gustaría destacar lo que este alemán señalaba hoy en su columna del Die Welt. Concretamente decía que “este año, la economía de la UE caerá en un cuatro por ciento. Hasta el año 2010 se perderán 8,5 millones de empleos. Son cifras dramáticas, y mucho más graves de lo que se esperaba hace un par de meses. La caída es cada vez más profunda. Y nadie puede decir cuándo acabará el descalabro en Europa”. Seguramente se queda corto y lo sabe. Sólo un detalle: ¿se acuerdan de los datos de crecimiento y creación de empleo de hace tan sólo un año? La caída no tiene comparación y el frenazo no va a ser tan sencillo como todos los gobiernos europeos parecen querer transmitir aprovechando las andanadas optimistas de Obama. Recuerden que todos están en territorio electoral y es cuestión de un mes que el rio recupere su cauce y la cruda realidad aparezca con él.
Hace unos días, durante la conferencia de Krugman en Bruselas, conocí a Christoph B. Schiltz. Este alemán, economista escolástico y poco dado a la exageración acusó al premio Nóbel de no dar soluciones realistas a unos problemas que había identificado tarde y a cuyo diagnóstico se apuntó al final. Dejando de lado ese juicio, me gustaría destacar lo que este alemán señalaba hoy en su columna del Die Welt. Concretamente decía que “este año, la economía de la UE caerá en un cuatro por ciento. Hasta el año 2010 se perderán 8,5 millones de empleos. Son cifras dramáticas, y mucho más graves de lo que se esperaba hace un par de meses. La caída es cada vez más profunda. Y nadie puede decir cuándo acabará el descalabro en Europa”. Seguramente se queda corto y lo sabe. Sólo un detalle: ¿se acuerdan de los datos de crecimiento y creación de empleo de hace tan sólo un año? La caída no tiene comparación y el frenazo no va a ser tan sencillo como todos los gobiernos europeos parecen querer transmitir aprovechando las andanadas optimistas de Obama. Recuerden que todos están en territorio electoral y es cuestión de un mes que el rio recupere su cauce y la cruda realidad aparezca con él.
MENOS BRANDING Y MÁS TRABAJAR
Seguimos con la cosa esta de innovar pues es en la innovación donde aparecen las mayores incoherencias en épocas de crisis. Es en este momento cuando innovar por innovar no es prudente ni rentable, hay que hacerlo estratégicamente. Tampoco es bueno generar marca por generarla, como tampoco tiene sentido estar en las redes sociales por estar. Toca escuchar, atender y trazar planificadamente una operativa que atienda todos esos módulos. Ahora no toca tanta marca, ahora toca empresa y no es lo mismo.
Aunque la noticia del dia para los de la propaganda y el sosiego planificado sea que el paro empieza a remitir yo no voy a tratar ese tema con urgencia. Mañana, con más calma, daré mis claves a la mezquina estrategia de nuestros gobernantes y la inutilidad manifiesta de sus opositores en el tema de la ocupación. Hoy, permitidme que siga abordando la cosa esta de innovar, pues es en la innovación donde aparecen las mayores incoherencias en épocas de crisis. Es en este momento cuando innovar por innovar no es prudente ni rentable, hay que hacerlo estratégicamente. Tampoco es bueno generar marca por generarla, como tampoco tiene sentido estar en las redes sociales por estar. Toca escuchar, atender y trazar planificadamente una operativa que atienda todos esos módulos. Ahora no toca tanta marca, ahora toca empresa y no es lo mismo.
Por ejemplo, hay una empresa de complementos para hombres que descubrí en Madrid hace poco y que, a partir de casi una decena de tiendas, intentan vender fundamentalmente corbatas. La innovación parte de ese ejercicio de marca exterior, llenando el escaparate de colores brillantes con el muestrario de las corbatas más llamativas. El comprador, al entrar, “se siente en una tienda de caramelos” y acaba comprando por empatía más que por precio. No está mal, es un ejemplo de innovar en lo cercano que busca la rentabilidad inmediata a partir de la interacción con el usuario/cliente y no en lo sustancial ni en la producción. La marca no es la tienda ni su decoración, la marca aquí queda en segundo plano pues nadie la busca, entran al pasar por delante, atienden el reclamo empresarial y aceptan una “experiencia de uso”. No deja de ser el costumer insight de toda la vida, pero me parece muy ilustrativo.
En un momento como este, hay que atender nuevos ecosistemas de relación en los negocios. Muchas empresas que cerrarán sus comercios en breve, abrirán otras en escenarios digitales creyendo que “reducir costes de instalación” mejorará márgenes. Error si ese es el único motivo. Hay que conectar lo digital con lo analógico y buscar la sinergia entre ambas cadenas. Vender la idea de que la marca se puede crear a partir exclusivamente de entornos en redes sociales es una falacia que yo no voy a compartir. Trabajo ese campo, busco como construir comunidades entorno a empresas en escenarios de redes sociales y por eso sé que eso no es suficiente. Mi empresa, que habla de redes sociales y presencia en ellas, acaba de incluir en su gestión aplicativos de relación analógica en su catalogo para atender esto que comento y que considero clave en un escenario de desastre económico como el que está a punto de llegar y que durará un lustro como mínimo.
Otros venderán el humo que quieran pero yo siempre aconsejaré coordinar los dos elementos. Las redes sociales no pueden ser el dorado, no lo son. Las redes sociales no son el soporte ideal en exclusiva. Hay que ser honesto y aceptar que se deben conectar las influencias digitales con las conductas analógicas.
El marketing digital se desinflará como se desinflaron otros globos. Ahora todo el mundo cree que puede vender publicidad esencial en Internet y en los socialmedia pero no he visto nadie que aporte valor a ese aspecto, nadie que incorpore un puente real y efectivo a ese sistema bidireccional entre la calle y el silicio. ¿Qué visitas genera una acción en facebook? ¿Qué tránsito aporta un user en twitter? Si somos serios aceptaremos que eso es vender burras mientras no se logre crear comunidades híbridas entro lo real y lo etéreo. Como dice Didac Lee, al final lo importante es ingresar más dinero que el que gastas. Que vendas dos y compres uno.
¿CRISIS DE CREDITO?
Hay un dicho que dice “si no puedes mejorar el silencio, no abras la boca”. Eso deben pensar algunos “expertos” que durante años sostuvieron la crisis no es sistémica y que los que defendemos este hecho estamos poco más que bajo los efluvios de la crisis porcina. Para los instalados en la zozobra incorporo este video que algunos lectores han recomendado. Habla de la crisis de crédito pero que sin ser demasiado “experto” uno se puede dar cuenta de que hay algo de sistémico en esa crisis. Por cierto, que nada tiene que ver con la crisis del capitalismo, eso, lo diga quien lo diga, es otra cosa.
Existe un dicho que dice “si no puedes mejorar el silencio, no abras la boca”. Eso deben pensar algunos “expertos” que durante años sostuvieron que la crisis solo era financiera y que los que defendemos que ahora vivimos una situación de precrisis sistémica que se traducirá de modos muy distintos en cada una de las adopciones domésticas, estamos poco más que bajo los efluvios de la crisis porcina. Para los instalados en la zozobra incorporo este video que algunos lectores han recomendado. Habla de la crisis de crédito pero que sin ser demasiado “experto” uno se puede dar cuenta de que hay algo de sistémico en esa crisis. Por cierto, que nada tiene que ver con la crisis del capitalismo, eso, lo diga quien lo diga, es otra cosa.