Salir de España
Leo que “infiltrada”, una lectora especialmente lúcida, habla de “salir de España para montar negocios”. Coincido. De hecho vamos a trabajar ese aspecto en diversos posts futuros. No lo digo yo sólo, empieza a ser una constante entre emprendedores y gente que está harta de ver como sus ilusiones se van por el desagüe. Como muchos sabéis, estoy desarrollando mi actividad emprendedora fuera de España. Fue una decisión que tomé hace ya algunos años y que ahora se ha convertido en la prioridad de manera definitiva. Sigo sin ver opciones aquí, considero que al final todo será una especie de barrizal donde unos trabajaremos mucho, pagaremos muchos impuestos y por contra se nos concederán pocos servicios y mucho subsidio.
Pero hay riesgos, hay que atender muy bien el tema y asesorarse adecuadamente. Uno de mis destinos es Panamá, por un tema puramente estratégico a nível logístico pues es un hub latam para ingresar en ese continente, por ser un entorno financiero de primer orden y por su capacidad para transmitir el interés por el negocio de base tecnológica al resto de Centroamérica. Hoy hemos sabido que el gobierno panameño tiene pensado emitir deuda. Puede ser por dos razones: o bien porque se la ven venir debido a la dependencia yankee o por que van a acometer grandes proyectos no cubiertos por los presupuestos objetivos.
De hecho el gobierno de Martinelli contrató a Daiwa Securities Capital Markets Co. y Mitsubishi UFJ Securities Co. para vender bonos denominados en yenes en Japón, según una persona familiarizada con la transacción. Conozco al ministro de Economía y Finanzas de Panamá, Don Alberto Vallarino, y sé que su intención es la de dotar de mayor poder y liquidez al ejecutivo para afrontar diversos proyectos, pero sin embargo me preocupa que pudiera deberse a esa falta de dinamismo que la economía norteamericana está trasladando al país caribeño.
¿Expectativa Aumentada?
Pronto podré informaros de algo que me llevará a Boston a corto plazo. Esa ciudad es donde el Massachusetts Institute of Technology tiene su sede. Mientras acabo de rematar lo temas que me vinculará con ese espacio hub tecnológico y del conocimiento, os dejo con el enlace del review que publica el propio MIT. Es brutal. Siempre aporta datos frescos y de primera mano pues en gran medida todo lo que allí se cuece acaba siendo un modelo de negocio a medio plazo. Hoy me hago eco de un artículo que cuestiona que las empresas que están trabajando los primeros aplicativos en Realiad Aumentada no logran obtener ningún tipo de mejora empresarial en sus negocios.
Según se desprende del informe de Kristina Grifantini “con esta tecnología, y su creciente popularidad en los teléfonos inteligentes equipados con sensores, provoca que los responsables de marketing estén tratando de usar la RA para vender de todo, desde comida hasta entradas para conciertos”. Sin embargo, de momento no logran aumentar su realidad contable.
Es cierto que por muy “cool” que parezca la Realidad Aumentada, si no aporta valor real no generará beneficios, aunque si lo consideramos como lo que es, un experimento en fase inicial para ir descubriendo lo que es factible y lo que no, podremos adaptar su viabilidad dinámicamente. Hay algunos ejemplos interesantes como el uso de Disney para promover La Nouba, una función de Cirque du Soleil, con una aplicación que captura el “factor sorpresa“ del espectáculo acrobático.
En la actualidad, los espectadores de algunos centros comerciales selectos en Florida pueden usar sus teléfonos para hacer que aparezcan cinco imágenes de los artistas. Pueden ver a un bailarín virtual saltar a través de la fuente de agua del centro comercial, o caminar sobre una cuerda floja por encima de sus cabezas.
La campaña es demasiado innovadora y reciente como para saber si ha aumentado la venta de entradas, sin embargo uno de los responsables de Disney ya ha dicho de que “la página de ventas por Internet del espectáculo experimentó un número significativo de visitas adicionales”. ¿Realidad o Expectativa aumentada?
Rescate tipo “Schäuble”
Ayer leía en el “Der Spiegel” la entrevista a Wolfgang Schäuble, el ministro económico alemán. Pocos medios han dado importancia a lo que el político aleman relata cuando la verdad es que propone cosas que deberían de poner a temblar a miles de inversores privados.
Schäuble propone un nuevo modelo de rescate para países de la Unión Europea que entren en crisis de liquidez. Concretamente explica que en ese rescate “habría varias fases, una de las cuales supondría que los acreedores privados deberían renunciar a parte del dinero que se les debe”. Curiosa manera de ir anunciando “la quita” que les espera a algunos propietarios de bonos.
Schäuble lo justifica diciendo que “la UE no se creó para enriquecer a inversores financieros, ya que imagina un mecanismo en dos fases. En la primera, cuando un país entre en problemas de liquidez, la UE pondrá en funcionamiento un plan de ajuste como en el caso griego. Durante esa fase, la fecha de vencimiento de los bonos de deuda estatal podría prolongarse. Si eso no ayuda, los acreedores privados, en una segunda fase, tendrían que renunciar a parte de sus derechos. A cambio, se les daría una garantía sobre el resto”. Y se queda tan ancho.
¿No vamos a hacer nada?
En mi próximo libro, que a partir del 16 estará disponible, hablo del Estado Inconveniente. En gran medida hablo del modelo de gestión pública que busca ser pura intervención a fin de adormecer la crítica y la disidencia. De un modo bastante sofisticado, intervenir se convierte en inconveniente y el resultado acaba siendo una sociedad cloroformizada en términos de iniciativa.
Llevamos en crisis más de dos años pero parece que nos estamos acostumbrando. Lo peor ya ha pasado dicen. Es probable, por lo menos en el concepto de que la caída ya no será tan vertical. Ahora toca la parálisis. Esa parada técnica que se alargará años y que se fundamenta en una atonía global que desincentiva la inversión privada e impide la pública por el tema del déficit, parece que no provocará grandes reacciones en el cuerpo social español. Se ha diseñado muy bien el espacio donde debe desarrollarse todo ello. Se ha preparado a la sociedad, se la ha dormido adecuadamente.
Pero, ¿cómo se logra eso? ¿Cómo se prepara a una sociedad para lo peor? ¿Cómo se la duerme? No es muy complejo. Se procura que la sociedad viva cómoda y eso la hace delicada. Esa comodidad la debilita irremediablemente y cuando pasa lo que pasa, cuando entramos en cifras de parados inverosímiles, o cuando la evidente ineptitud de nuestros dirigentes es de tal calado que insulta, nadie dice nada, o casi nadie. Vivimos en una sociedad que no sólo ha perdido el dinero, que aunque grave no es definitivo, vivimos en un escenario de derrotados que han perdido la dignidad y la libertad, nos arrastramos por el territorio de los desinformados. ¡Que gusto da no saber!
En este país sin espíritu de cambio, con una tasa de emprendeduría que da pena y con una capacidad de reacción inversamente proporcional a la cantidad de pisos que se hacían en plena burbuja, es muy difícil hacer pedagogía de lo que está pasando. Ahora pretenden hacernos creer que la crisis es financiera, económica y política. Eso es cierto, obviamente, pero también es social. Lo es en el punto de vista que cada país o colectivo saldrá de ella en la medida que sea capaz de ejercer su propia libertad y pueda emprender sus propios caminos.
La Administración en España es un inconveniente para el progreso. Da igual el color. Unos fomentando un modelo de crecimiento que se basaba en la compra masiva de viviendas por parte de gente que no las necesitaba para simular ser ricos sin hacer más que quedar en un café de barrio para negociar el precio con un agente inmobiliario formado a distancia. Otros no supieron desinflar el asunto y les reventó en la cara. Lo peor es que lo negaron como los otros negaban su majestuosa montaña de mierda amontonada adecuadamente durante años. Un desastre en general. Nos toca a los emprendedores poner en marcha el motor oxidado de este país.
Ahora mismo las entidades públicas, que podrían impulsar algo la actividad emprendedora siendo clientes de ésta, hacen lo mismo que las grandes empresas, buscar referencias internacionales, grandes contratos, experiencia imposible, ratios inasumibles y que te bajes los pantalones hasta los tobillos. La gestión pública debería de apostar por la innovación, y esa está en la gente más intrépida. Hay poca, pero la hay. Qué mejor que la administración para ser el primer cliente del emprendedor. Es un riesgo, pero ahora es el momento de apostar por los que pueden sacarnos de este barrizal. No hablo de subsidios ni de subvenciones, hablo de apoyo vinculado al trabajo.
Per la realidad es áspera. El Estado interventor se encarga de que no se premie el sacrificio de unos cuantos. Se estigmatiza al emprendedor en un entorno que ya de por si no favorece la cultura del empresario. El Estado intenta que nos acomodemos a vivir de manera subvencionada, en un país sedado. Por eso ahora toca preparar una sociedad inducida a soportar el descenso de categoría.
¡En exclusiva!
Aquí os dejo el primer capítulo de mi próximo libro. “Contra la Cultura del Subsidio”. Su salida está prevista para el 16 de noviembre. He logrado que, como regalo para los que habéis estado esperando la reapertura del blog, tengáis este detalle en “exclusiva”. Espero que os guste y os anime a querer seguir leyendo. Aun no tengo la agenda definitiva de presentaciones y firmas que la Editorial Planeta está determinando pero en cuanto sea posible os lo plantaré aquí. Sé que se están preparando cosas muy interesantes y foros en redes sociales para generar conversaciones sobre el propio libro.
Huelga en la N. Economía
El próximo 2 de noviembre a Obama le va a sentar fatal la cena. Básicamente por optimista. Creyó que en otoño del presente la economía norteamericana volvería a entonar la fase de crecimiento, que volvería crear empleo y, por derivación, tras un período de dudas sobre su gestión, el pueblo americano empezaría a valorar positivamente la gran tarea del bueno de Barack. Ni en la peor de sus pesadillas hubiera imaginado que la situación iba a ser tan desastrosa como en la actualidad. El paro no remite, el país no crece, los primeros síntomas de arranque se debieron a unos estímulos públicos que ahora no hacen más que engordar el problema y un sistema financiero tan contrario a que le toquen la entrepierna como antes de empezar el colapso.
Zapatero pensó algo parecido hace un tiempo, pero se estrelló contra el déficit. Un volumen inasumible que provocó el ultimátum de los mercados y, por derivación, de los dirigentes que más pintan en esta merienda. Por eso, él ya no contaba con fechas ni cifras. Ahora considera que lo bueno está por llegar.En USA un Zapatero negro y en España un Obama blanco han hipotecado el futuro de una generación cloroformizada. Tanto el uno como el otro esperan que el tiempo, con su inercia dichosa, acabe por asentar una economía en parálisis técnica. Los dos sueñan con que una de las máximas de la política se cumpla: la memoria de pez del ciudadano.
Y ahora toca atender. Los nuevos planes de estímulo de Obama, que meten los dedos una vez más en la herida aun mal curada, crearán empleo bien entrado el 2011. Está por ver que el efecto boomerang esta vez no sea catastrófico. Emitir más billetes, repartir más dinero, estimular de nuevo la economía como si Keynes estuviera sentado a la derecha del Padre, es un poco suicida, pero bueno, tal vez funcione.
Otra cosa es que aquí, en España, eso es inviable. Se pongan como se pongan los sindicatos eso no puede ser. No hay manera de sacar más dinero virtual de donde no existe. Supongo que cuando las almas cándidas que dirigen los sindicatos piden al Estado que transfiera más sustancia a una maquinaria paralizada y que no proporciona ingresos, lo dicen por que algo tienen que decir, porque no cabe en ninguna cabeza que España pueda soportar todo lo que los sindicatos solicitan.
Los sindicatos deberían de adaptarse a los tiempos. No es una frase hecha, es una verdad lírica. ¿Qué es eso de reducir los servicios mínimos? ¿Qué tipo de chantaje social oculta esa solicitud? ¿A que se refieren con eso de que no quieren que el 29 de septiembre no salgan vuelos internacionales de ningún aeropuerto español? Cuando un dirigente social exige algo de este tipo es que no está cerca de la realidad. Aunque se definan como líderes laborales, el contacto con la realidad empresarial y emprendedora de este país es nula.
¿Qué saben todos estos de lo que es poner en marcha un negocio? ¿Acaso saben que significa jugarte todo tu patrimonio todos los días para intentar dar trabajo a un grupo de personas? ¿Han oído hablar de los emprendedores por cuenta ajena? ¿Creen sinceramente que una huelga general en pleno siglo XXI puede detener el curso de la economía global?
Estos tipos no se enteran de nada. La mayoría de las actividades económicas que se desarrollan en una sociedad tecnológica como la nuestra dependen de plataformas que no harán huelga. Me retuerzo de la risa viendo a según que dirigentes que llevan décadas “defendiendo” a los trabajadores, no decir nada sobre la verdadera masa laboral de este país, por lo menos la que puede llevarlo a un cambio que lo saque del agujero: los emprendedores. Hablan de convenios y de “despidos” cuando aquí la única modalidad de apertura laboral que parece dar “algo” de resultado es el proyecto propio. O a través de un modelo emprendedor de uno mismo con el pago único del subsidio de paro o entrando como trabajador en uno de esos proyectos arriesgados de un emprendedor. Es decir, aquí lo que menos falta hace es huelgas sobre la “flexibilidad” laboral y más juergas sobre como pensamos estimular y ayudar a los emprendedores que se juegan todo a una carta cada mañana.
El cambio de modelo en el crecimiento de España no dependerá de una manifestación dinamizada desde las estructuras de los sindicatos y sus liberados, ni con una huelga general que en la mayoría de los casos responderá a la presión en algunos polígonos industriales y miles de persianas bajadas por miedo a que te rompan los cristales. Ese cambio que deberá traer empleo y empleo cualificado depende de decisiones políticas consensuadas desde la modernidad y no desde la impuesta voluntad de unos pocos que parecen vivir en plena Revolución Industrial.
Además, las empresas de este país seguirán vendiendo por ecommerce, seguirán enlazando por skype, atendiendo a sus peticiones de perfiles en redes sociales, actuarán en consecuencia con los tiempos de la nueva economía, la de la atención, la de los negocios que no cierran, la de la venta por empatía.
Los sindicatos deberían saber que, cuando impulsan una huelga general de este tipo, cientos de miles o millones de trabajadores no se sienten aludidos porque trabajarán desde sus casas gracias a las fórmulas de enlace que existen hoy en día. Que los profesionales que ocupan cada vez más las cifras de ocupación por cuenta propia son gente que no tienen un lugar ni un escenario en el que “computar” como huelguista. ¿De que leches hablan? ¿En que mundo vienen? Que alguien, urgentemente, les explique que el mundo ha cambiado.
Esos sindicatos que exigen ahora una “rectificación” a una medida que el gobierno no ha diseñado, que viene impuesta y que responde al dispendio que los sindicatos no criticaron en su día porque ya les iba que ni al pelo, son viejos y lentos. Viejos, porque en la percepción que en una economía digital y globalizada nadie puede ver a un “defensor” actualizado y homologable a sus intereses. Lentos porque no llegan a tiempo a los cambios que se han producido en el mundo.
Al contrario que en Alemania, por ejemplo, donde los sindicatos no perciben ni un céntimo de euro del Estado sino de sus afiliados y donde la liberación de horas son exclusivamente para la negociación de convenios y no para menesteres varios, en España viven de la transferencia pública y de la subvención clásica. No defienden al parado. Por mucho que digan, el 29 de septiembre ponen en riesgo más paro. Primero porque en la medida de entorpecer el funcionamiento de una economía muy débil, con pocos signos de avance, puede provocar más daño que bien. Paralizar un país en estos términos y en un momento como este es contraproducente.
Si se adaptaran verían que las manifestaciones no tienen que ser en la calle. ¿Que quiere decir eso de que hay que llenar calles y plazas para que un gobierno escuche la legitima crítica del pueblo?. Hoy en día hay mecanismos mucho más eficientes y potentes que pueden utilizar las redes sociales para ejercer esa protesta. Los medios digitales y sus foros, los blogs, las propias redes, las plataformas sociales y otros escenarios se pueden convertir en una amalgama desordenada de crítica que ya no necesita sindicatos ni mandingas.
Hace tiempo que el mundo protesta de otro modo, se manifiesta de otro modo, y ahora, incluso lo hace mientras sigue produciendo. La imaginación y el talento no ha llegado a los sindicatos que siguen con sus mismas canciones de siempre. Es tiempo y hora de que en la dirección de esas estructuras caducas se instalen personas que entiendan la época que les ha tocado vivir.
No me imagino haciendo huelga general los servidores de Google Maps en España. Tampoco veo muy real pensar que las granjas de computadoras de Tuenti se paren durante el 29. Ni los de mi empresa. Mis ordenadores seguirán trabajando. Están en la nube, como algunos dirigentes sindicales. Ya me entienden.
Artículo publicado en Cotizalia
¿Suben los pisos?
El pasado sábado en la sección que hago en el programa de Cristina Lopez Slichting, me tocó hablar de la hipotética subida de precios de los pisos. Claro está que, aunque el Instituto Nacional de Estadística diga que ya ha empezado la recuperación del valor de la vivienda, eso tiene el mismo valor que un billete de 21,50 Euros. Obviamente no estoy de acuerdo.
[audio:http://marcvidal.net/wp-content/uploads/2010/09/COPE2.mp3]
- En primer lugar viene a ser un resumen estadístico de los pisos que se venden y el precio al que se venden. Es decir, aquellas viviendas que no se escrituran no entran en el conteo. Por lo tanto, si se consideran parte del análisis sólo las propiedades que se venden, obviamente en época de escasa demanda los vendidos son los más atractivos, tendremos que, seguramente, gran parte de estos pisos son precisamente los que siempre fueron demandados por diferentes razones. Son las joyas muchas veces de las promociones.
- En segundo lugar los precios no descienden por el maldito “efecto banca”, por el que por mucho que queramos colocar a coste real el valor de las viviendas, las empresas pantalla y promotoras bancarias lo impiden, y lo impiden por razones obvias. No quieren incorporar en sus balances activos cuyo valor es inferior al peso del crédito que las soporta.
- En tercer lugar los precios de esas promociones vinculadas a crédito sobreexpuestos de cajas y bancos no pueden descender más del valor hipotecado ya que técnicamente eso no se permite. Ningún notario puede escriturar una vivienda por un valor inferior a las cargas que soporta.
- En cuarto lugar los bancos y cajas que disponen de viviendas en stock se han lanzado a la colocación desesperada de todas ellas a través de ventajas financieras de todo tipo a compradores solventes, normalmente sus propios vinculados.
- En quinto lugar esas entidades financieras logran un efecto perverso colocando pisos por valores muy superiores al que el mercado aceptaría en condiciones normales, limpiando balances y ocultando la realidad de la tragedia.
- Otros factores que inciden en una venta menos pragmática por parte de los compradores son los “estímulos” indirectos como la subida del IVA y la retirada de ayudas fiscales el año que viene a la compra de vivienda.
Finalmente decir que es como una broma macabra pensar que un país con más de un millón de pisos vacíos con una oferta sobredimensionada y con una dificultad enorme para crear empleo pueda ser un escenario de subida de precios. Que el INE no sea más objetivo en sus razonamientos sobre los datos obtenidos parece, incluso en una sociedad mediatizada como esta, lógico, pero que la prensa les baile el agua y publique sin aportar un solo análisis al respecto es humillante.
No quiero con esto decir que comprar una vivienda sea una mala idea, lo que digo es que comprar pensando que ya empieza la revalorización de precios y por lo tanto adoptar la compra de inmuebles como una buena inversión sería un error. Aconsejo comprar a los que quieran comprar, simplemente a los que deseen una vivienda en propiedad, o una segunda residencia por algún motivo puramente personal, no financiero, ni de gestión patrimonial. Eso ya ha pasado, por lo menos durante mucho tiempo. Por ello, a fin de que cuando quieras saber si compras bien o mal, aconsejo rodearse de buenos profesionales, con conocimiento del escenario y honestos. No abundan.
¿Invertir en oro?
La última entrega de mis colaboraciones de este verano con RAC1 versó alrededor de modelos de inversión para no expertos. ¿Invertir en oro es seguro? ¿Cómo podemos hacer rentables nuestros ahorros sin pillarnos los dedos? Os dejo con la traducción de de la sección “economía en efectivo” que hice para el programa “el món a Rac1” de la cadena de radio RAC1. Durante unos veinte minutos tratamos el tema de la internacionalización.
[audio:http://marcvidal.net/wp-content/uploads/2010/09/0901-11h-Dimecres-01-09-10-En-efectiu-.mp3]
Desde el punto de vista del ciudadano de a pié, dejémonos de grandes inversores, ¿dónde podemos ir a invertir?
Podemos invertir en muchísimas cosas, bolsa, patrimonio, etc. De todos modos, es con quién y cómo se puede invertir. La idea sería saber si tenemos un intermediario, si lo hacemos a través de un bróker bancario, si lo hacemos con un agente bursátil o hasta nosotros mismos mediante una plataforma digital pagando unas cuotas.
Mejor asesorarse un poco antes, ¿no?
Sí, pero hoy hay mucha información sobre lo que se puede invertir o no se puede invertir, puedes obtener información. Y también hay nuevas plataformas de carácter social que tienen que ver con la opinión global de los inversores y en el que si te metes por allí y vas cogiendo un poco las tendencias puedes sacar algo. Pero bueno, tampoco es recomendable meterse sin saber nada.
Empecemos, por lo tanto, por lo que no hay que hacer. ¿En qué no hay que invertir visto el panorama?
Se puede invertir en bolsa pero sin abusar. Yo creo que las empresas que están muy endeudadas son las que nos de tocar nada, en estos momentos, en una época que seguramente será muy deflacionaria (deflacionaria significa que las cosas caerán de precio) no es el mejor de los casos. Hay empresas que siempre se ha dicho que son el gran seguro que tenemos pues cuidado con estas empresas tan grandes y tan seguras porque seguramente no serán tan rentables. Telefónica es una empresa absolutamente endeudada y, de hecho, con la compra que ha hecho de Bigoo (que es una operadora portuguesa para trabajar el mercado brasileño) se ha endeudado todavía más y, seguramente, se ha endeudado fuera de España, precisamente, para que no parezca que está tan endeudada España, que es este es un juego que hacen las empresas, ¿no? Cuidado con este tipo de inversiones, tampoco recomiendo demasiado invertir en deuda soberana (en bonos, bonos del Estado), tal como está el mercado hoy en día no parece muy fiable. Y en todo caso, si queremos bonos, podemos comprar de empresas de carácter corporativo. Serían los bonos de las empresas que también emiten en papel y estas empresas (sobre todo las que tienen facturación en países muy seguros como Canadá, Noruega, Suiza) facturen muy por estos sitios. ¡Hasta Rusia!
¿Qué pasa con la inversión en oro?
El oro, es que cuando las cosas no pintan bien… Me he olvidado, sobre todo, de un detalle y es que nadie invierta en nada inmobiliario.
En el sector inmobiliario ya nada, es pasado…
Lo digo así, y lo siento por todos los que venden pisos pero las cosas pintan que tardarán muchos años a volver a ser algún tipo de efectivo rentable. El tema del oro, es que el oro, claro, cuando las cosas pintan mal o cuando la economía es muy inestable o cuando las divisas, por ejemplo, tienen afectaciones por parte de que los Estados están estimulando la economía de forma artificial (como es el caso que estamos pasando ahora). Hoy la economía, en términos general y en todos los países está siendo afectada por una serie de artificialidades que los gobiernos y las políticas económicas de los países están llevando a cabo, lleva a que sea muy inestable apostar una divisa, apostar un tipo de acción, apostar un tipo de bono, en cualquier tipo de historia. Entonces hay un patrón (el patrón oro) que ha funcionado muy bien, históricamente, cuando estas cosas son así, cuando hay inseguridad. Estoy hablando muy en general, pero cuando hay una inseguridad económica la gente encuentra el oro como un espacio de seguro de inversión. Meten allí el dinero y ya está. Hay muchos tipos y maneras de hacerlo pero, bueno, en principio sería meterse por seguridad.
¿Pero también tiene riesgos?
Sí, los riesgos de trabajar en un modelo de trading. Un modelo de compra-venta, día si día no, me meto allí como si el oro fuera una acción más. El oro es un patrón de inversión a largo plazo, que compramos para asegurarnos que tenemos un espacio allí donde las cosas pueden crecer o decrecer, finalmente parece ser donde las cosas pueden ser más seguras y es una inversión a largo plazo y no puede ser un espacio de especulación. El oro no sirve para especular.
¿Cómo se compra oro? Es que no tengo ni idea… ¿cómo puedo hacerlo?
Hay muchas maneras. Yo la que recomiendo es una muy nueva e interesante de una empresa que se llama GoldMoney, (con la que no tengo nada que ver) pero es la que yo utilizo cuando he tenido que trabajar en este sentido, en la que tú compras, mediante una cuenta bancaria en la que pones dinero, y el valor de tu dinero se refleja en oro. Cuando quieres retirar tu dinero lo que retiras es el valor de tu dinero en oro. Es como tener una cuenta bancaria en oro. Entonces tú puede contractarlo como quieras y cualquier entidad financiera puede hacerte de intermediaria. Puedes comprar lingotes.
Esto se hace, compras lingotes…
Puedes comprarle a un agente que vende este tipo de cosas. Ahora, el problema es: ¿Dónde lo metes? ¿Dónde lo guardas? Normalmente, la gente lo guarda en cajas fuertes, en casa o en los bancos. Y luego tiene un valor en oro que cada día puede ir a ver, si yo tengo 100 libras (o gramos) en oro cuánto vale esto. Pues lo sabes yendo a ver cuánto vale vender aquello. Después hay los intermediarios bancarios.
¿Cuánto vale, ahora, una onza de oro?
Hoy stá en 1277$, lo cual es una barbaridad.
Es mucho…
Contad que venimos de precios de 800, 700 y pico, y parece que nos vamos para 1500. Es una buena inversión en estos momentos.
Por lo tanto, ¿recomiendas comprar mucho oro?
Mucho, mucho… que cada cual compre cuanto pueda pero yo no recomendaría comprar mucho de nada, en estos momentos. Yo aconsejaría una diversificación absoluta en tu inversión y, ante todo, asesorarse muy bien y hacerlo en mercados internacionales, no únicamente de por aquí.
Diversifiquemos, pues. ¿Otros metales en los que invertir?
Se puede invertir en millones de cosas (cobre, platino, paladio, azúcar, petróleo, maíz, plata, de todo). De hecho se puede invertir en cosas muy raras.
Ahora iremos a ello, pero ¿en qué deberíamos invertir?
Esto depende mucho de cada uno, de sus preferencias, de las carteras. Es muy difícil de decirle a todo el mundo: Inviertan en. Si se sienten inseguros (que son los pedidos que yo más tengo últimamente) si la gente no sabe qué hacer con su dinero, si dice: ¿me llevo el dinero a Alemania? Esto de llevarse el dinero a Alemania, primero, no es tan sencillo y, segundo, depende cómo te lo llevas no es correcto, no es legal. En cualquier caso, el tema de invertir en algún tipo de producto, o de algo más o menos sofisticado (algo que no sea una acción de una empresa) recomendaría que si no sabes qué hacer ni dónde poner tu dinero y, además, no te corre prisa el oro puede ser un buen refugio.
El oro es un buen refugio…
Sí, también la plata está subiendo bastante. La plata parece ser, también, un espacio de seguro (No tan fiable como el oro) y el platino bajo mucho hace meses pero vuelve a tener un espacio. Quienes compraron platino hace un año han perdido, pero quienes lo compren ahora pueden estabilizarse.
Otros, por ejemplo azúcar. ¿Se invierte en azúcar?
Sí, aquí entramos en un terreno un poco escabroso. En este mundo se puede invertir en todo y se puede hacer de dos maneras: se puede invertir como inversor o como persona que apuesta, lo que denominan hedge funds. Los hedge funds son gente que apuestan sobre algo que no compran. Entonces, si baja pueden apostar que baje, por ejemplo, o pueden apostar que suba. Pero los hedge funds, que todo el mundo habla mal de ellos…
Son los malos, manipulan los mercados… ¿no?
No, lo que hacen es apostar sobre un mercado que ellos consideran. Cuando es bueno, todo el mundo considera que son muy buenos pero cuando es malo todo el mundo dice que son muy malos. Dejémoslos de lado porque todo el mundo ha hecho de hedge funds alguna vez y vayamos al tema del azúcar. El azúcar tiene el problema de cualquier materia prima de carácter alimentario: es muy feo apostar en inversiones de este tipo porque los precios suben cuando hay mucha demanda y poca oferta. Si hay poca oferta y mucha demanda sube el precio de las cosas. Para que suba el precio del azúcar, se puede comprar azúcar en Chicago (la bolsa donde todo se puede comprar y vender). Tú compras un barco que está cruzando el Atlántico cargado de azúcar, y es tuyo, y vale lo que sea. El azúcar empieza a subir de precio justo cuando empieza a escasear. Y es muy feo, pero hay empresas que producen azúcar que dejan de producirlo para que escasee y así suba el precio. Lo mismo que el petróleo.
O sea, es especular con la producción de alimentos directamente…
Sí, sí, esto es feo pero hay cosas que lo son más.
¿Cómo qué?
No lo sé, por ejemplo, hay modelos de inversión vinculados a las catástrofes naturales o a las especies en extinción, no es broma.
A ver, explícamelo bien, tenemos un minuto…
En estos momentos, vas a las pantallas de Bloomberg y detectas dónde están los huracanes, por ejemplo, y hay una serie de apuestas como si estuviéramos jugando a apuestas deportivas. Hay una serie de valores de cálculo que tienen que ver, fundamentalmente, con el tiempo que tardará en llegar un huracán u otro, qué nivel de destrucción tendrá, etc. Respecto a lo que paso en el Golfo de Méjico con las especies en extinción o las que estaban siendo afectadas por la catástrofe de las plataformas petrolíferas, hubo un valor especulativo vinculado a las especies que entrarían en extinción por culpa de aquella catástrofe. O sea, esto es mucho más complejo y yo no recomiendo estas inversiones, evidentemente, por temas morales. Mejor el oro.
Nos quedamos con el oro. Gracias, Marc.
Memoria de pez
Definitivamente vivimos en medio de un teatro siniestro. Unos amenazan con que para alcanzar los beneficios de la jubilación compensada deberemos cotizar unos 38 años en lugar de los 35 actuales. El motivo (dicen) es que no hay manera de sustentar el peso de las pensiones a medio plazo. El consejo al respecto es obvio, asegúrense de llegar a viejos con algún sistema de gestión patrimonial que les permita ingresos más allá de los “garantizados” por papa estado. Digo que es repugnante engullir este tipo de sapos porque, mientras esto es noticia, otro hecho clama al cielo. Resulta que las glotonas entidades financieras de este país, que en medio de la mayor crisis (estimulada por ellas) y que están ganando dinero “arroz” a paladas, se montan unas prejubilaciones que pagamos todos a edades que son insultantes. Para no revolver más las tripas de los que leen este blog, evitaré hablar de los liberados sindicales. No es necesario retorcerse por el ardor de estómago.
Seguimos inmersos en la fábula, en la confusión de lo que aparentemente ha pasado y lo que nos han dicho que no pasó jamás. Ahora resulta que ya se venden más viviendas, que el déficit lo reduciremos sin problemas y que los ayuntamientos no tendrán problemas para financiarse. Pues ni lo primero, ni lo segundo y ni, sobretodo, lo tercero.
¿Más viviendas que cuando? Si es más que hace un mes, en el “intermensual” es lógico que crezca, si las cantidades son tan estrechas que, con que cualquier entidad financiera recoloque en una de sus empresas pantalla una promoción de costa, ya tienen un “crecimiento significativo”. Me va a gustar ver como lo disfrazan con lo de Basilea III. No obstante, viendo como la jefatura financiera y el control económico europeo se tragó lo de los estrés tests, me huelo que mirarán para otro lado a cambio de no tener que afrontar las responsabilidades de todos.
¿Reducción del déficit? Este tema es como para darse de baja del género humano. Resulta que en dos meses de tomar decisiones “obligatorias” contra el desmesurado déficit público, éste ya se ha reducido. La prensa se lo traga y lo pública tal cual. El análisis más detallado demuestra que no es así y que el segundo semestre irá descuadrando adecuadamente las cuentas públicas y que, a medida que se recaude menos, el gasto público irá a cuenta del déficit. Está por ver si Europa nos amenazará otra vez.
¿Ayuntamientos solventes? Unas “empresas” públicas que se han acostumbrado durante años a gastar términos ordinarios unos ingresos extraordinarios no pueden ahora reducir de golpe sus servicios sin incrementar sus impuestos. Como la presión fiscal local no es demasiado flexible y además se evidencia inmediatamente en la conciencia y bolsillo del ciudadano, la capacidad para afrontar el año electoral es escasa para la mayoría de municipios de este país. Mas de un millar de consistorios son cadáveres y por derivación sus ciudadanos consumen servicios a punto de ser embargados.
Cabe destacar que la memoria social sobre la economía es de pez. Que ya nadie recuerde cuando apenas hace dos años nadie aceptaba la situación que se advertía venidera tan triste. Como lo es comprobar que en las comparaciones “interanuales” de los datos macroeconómicos nadie hace las hace a distancia, la de comparar los datos con los de hace dos o tres años, entonces veríamos la verdadera radiografía de la situación. Tengamos en cuenta que eso de “salir de la recesión” es una conceptualización tramposa, que otorga a un crecimiento escaso de un 4 o 5% menor al de hace un año, la posibilidad de entrar en positivo (y por derivación el abandono de la recesión técnica) sólo porque se le compara con el trimestre inmediatamente anterior (que sigue siendo un 4 o 5% inferior al de un año antes). Comparar la miseria con la miseria da una comparativa penosa, pero si la segunda miseria es algo superior a la primera, digamos que es una miseria que abandona la recesión.
Juegan con la mala memoria de la gente, pero toda una generación, mientras tanto, sigue perdiéndose en el desierto.
Sobre el dichoso modelo
En mi columna semanal en Cotizalia, hoy hablo de algunos de los problemas que se empiezan a evidenciar tras no haber puesto en marcha un cambio de modelo de crecimiento económico tal y como nos tocaba hacer aprovechando la dichosa crisis. En un artículo titulado “Ese modelo era una ruina y, ahora, esa ruina es el modelo“ le doy la vuelta al asunto de la reforma laboral y un hipotético “contrato de crisis“.
Estreno en la COPE
El pasado sábado empezó mi colaboración semanal con el programa de Cristina López Schlichting. Con independencia de mis planteamientos sociopolíticos que no coinciden demasiado con algunos de los expuestos históricamente por la cadena, mi aportación al programa será de una píldora de apenas diez minutos que, cada fin de semana, intentará analizar rápidamente las claves de lo que ha pasado en los últimos siete días en temas económicos y cuales pueden ser las de los próximos. En la primera compartí espacio con las Supremas.
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Formarse en redes
Como ya sabéis, la Universitat de Barcelona a través del Instituto de Formación Continua me encargó la dirección del nuevo Postgrado en Community Manager & Social Media. Consideraron que Cink era el partner ideal para dar respuesta a la demanda de las empresas de estos nuevos profesionales. Precisamente uno de los motivos por los que acepté el proyecto fue el de poder disponer de profesionales bien preparados una vez finalicen el postgrado. Eso puede pasar en alguna de las delegaciones de la empresa o donde tenemos acciones en marcha.
Cink lleva más de dos años gestionando de manera profesional ese entorno y, ahora que las empresas están adoptando esta figura profesional como una parte de sus estructuras, ha llegado el momento de aportar valor a algunos de esos nuevos entornos. En línea con el desarrollo de la Web 2.0 la profesión de Community Manager se ha posicionado como imprescindible en la estrategia de comunicación y comercialización de una empresa. Dada la importancia que la comunicación corporativa ha adquirido en la Web, el programa profundizará en las funciones que ha de desempeñar el Community Manager dentro de una empresa por un lado y en gabinetes de acción integral por otro. Los alumnos se convertirán en especialistas en al gestión de las redes sociales y aprenderán a comunicar las acciones de la empresa a través de este nuevo medio.
El Postgrado en Community Manager & Social Media pretende ofrecer una buena oportunidad laboral para los alumnos que cursen estudios en esta área que ha adquirido importancia en estos últimos años. Sabemos que las cosas pintan duras, difíciles como nunca antes se habían presentado, por eso todo tipo de iniciativas que giren en torno a darle la vuelta, y en escenarios de futuro, mejor.
Para los que piensen que en las redes sociales y en los entornos de comunicación social sólo hay humo, les aconsejo a profundizar en algunos de los elementos que demuestran que “algo ha cambiado definitivamente” y que, sin llegar a convertir en “orden de ley divina”, por suerte o por desgracia, las relaciones humanas, empresariales, institucionales y políticas se producen en un ámbito digital y social. Para estar donde van a pasar las cosas, entre otros espacios, este Postgrado, en su primera edición, es fundamental.
Para amortiguar el coste económico, cada alumno pueda acceder a un iPad de regalo, con el que intentaremos realizar uno de los retos que se nos impusieron al principio: aportar datos y elementos de estudio al nuevo Plan de Innovación Metodológica el IL3 de la Universitat de Barcelona, lo que por otro lado es otro de los factores por los que este master se convierte en muy interesante. Si os parece que podéis tener cabida, y sabiendo que las plazas van a ser limitadas, aquí podéis encontrar más información e inscribíos.
Quiero agradecer el soporte de Jesús Gordillo en este proyecto, pues seguramente sin su coordinación de docentes y contenido esto sería imposible de gestionar visto lo visto.
Internacionalizar pymes
Hoy os dejo con la traducción de un nuevo capítulo de la sección “economía en efectivo” que hice para el programa “el món a Rac1” de la cadena de radio RAC1. Durante unos veinte minutos tratamos el tema de la internacionalización de las empresas y que se puede hacer para vender en el exterior. Lo importante del programa no es tanto las claves de como, sino el hecho de que es una opción más para afrontar el difícil momento y, sobretodo, que no debe ser un tema tabú para las pymes, se puede.
Lo que decíamos, justamente salir a fuera a hacer negocios es una de tus especialidades, no paras, todo el día para arriba y para abajo… Pero, ¿por qué tendríamos que ir fuera, al extranjero, con nuestro negocio?
Cuando alguien dice que una crisis es una oportunidad, es una forma débil de hablar de la crisis, porque la crisis es un problema grave para todo el mundo. Y para las empresas que ya existen, las que tienen mucho tiempo y hasta para las que están en proyecto o se están montando, la opción de salir fuera y coger otros mercados es una de las posibilidades cuando el mercado de aquí se está secando. De hecho, todavía vienen tiempos muy complicados, hablar hoy de esto no es una casualidad, porque las cosas se van a complicar, seguramente, durante los próximos 3-4 meses y será un momento en el que, alguien que quiera sobrevivir, en muchos casos, tendrá que pensar en buscar nuevos mercados. Estos nuevos mercados pueden ser una única salida para algunos, puede ser una manera de mejorar sus propios rendimientos que tienen aquí, puede ser una forma de aumentar nuevos mercados. De hecho tenemos productos que aquí pueden ser rentables pero pueden serlo mucho más en otros sitios. Tenemos, por ejemplo, la posibilidad de aprender de otros mercados para mejorar nuestros productos o aprovechar un conocimiento que hemos adquirido aquí (el know-how que tenemos como empresa) y poderlo exportar a lugares donde todavía esto sea un valor añadido.
Hoy Marc, si sois pequeños y medianos empresarios (hasta grandes) os dará alguna idea en este sentido. Pero antes situémonos un poco, Marc. ¿Qué es mejor? ¿Empezar de cero en el extranjero o salir con un negocio iniciado aquí?
Lo que hay que hacer es un planteamiento similar al que hacemos al montar una empresa. Una buena idea no garantiza que el negocio funcione. Es decir: “No, tengo una gran idea, y he montado un Business Plan que me dice que esto será perfecto” Y luego no funciona porque es demasiado perfecto. Seguramente porque la idea era muy buena pero no había una necesidad. Primero, hay que examinar las necesidades, sea aquí o donde sea. Si es, por ejemplo, en el exterior, en otro país, debemos saber qué necesidades tienen. Yo pongo el ejemplo de uno de los casos que he vivido, en Kazajistán (una ex república soviética), donde una empresa de zapatos examino países y uno donde hacían falta zapatos era Kazajistán. Y dices, ¿en Kazajistán nadie hace zapatos? ¡Pues no! Los zapatos los compraban en China, con un modelo muy concreto, con suela de goma… un zapato de poca categoría. Y Kazajistán es un país en el que en algunos sectores sociales está aumentando el poder adquisitivo y empiezan a tener algunos estándares estéticos europeos. Y alguien que podía producir esto y llevarlo a mercado empezó a comprar tiendas y espacios en el centro de las capitales de Kazajistán (guardemos las diferencias) pero en estos momentos se están vendiendo zapatos a mansalva. Es una manera de afrontar un nuevo mercado. ¿Qué les falta? Están creciendo, los países que ahora crecen (que son muchos) tienen muchas necesidades de equiparación, a nivel de producto y de consumo de tipo occidental.
¿Cómo podemos saber nosotros qué necesita un país para encontrar una brecha donde hacer las primeras ventas?
Haciendo un examen. No podemos basarnos en expectativas que alguien nos ha contado. En este caso, por ejemplo, no lo que yo digo y exclusivamente o lo que dice alguna persona que sepa un poco más del tema. Lo que hay que hacer es revisar el espacio y hacer un presupuesto de lo supondría ir a otros países, hacer un examen real. Esto no es coger un avión en Business-class, pasarte dos semanas y ya sé lo que tengo que hacer, ya sé cómo internacionalizar y hacer negocios fuera. ¡No es esto! Uno se tiene que implicar en la sociedad del país donde surge esta posibilidad de negocio y sobre todo conocer el mercado para, poco a poco, irse implicando.
Deben haber muchos mitos y leyendas con esto de salir fuera, al extranjero, porque más o menos todo empresario quizás se lo ha planteado en algún momento. ¿Qué mitos debemos dejar de lado?
Básicamente que no es llegar y besar el santo. Desde nuestra visión occidental, queremos ir a países del Tercer Mundo, que todavía están creciendo, donde será facilísimo porque yo sé más que ellos. Pues resulta que vas allí y te estrellas. Y te estrellas porque ellos tienen una manera muy diferente a la tuya de entender todo esto, la microeconomía funciona de forma más potente. Por ejemplo, irse a ciertos países de Latinoamérica donde crees que tú tienes un know-how y una capacidad de desarrollo de productos muy superior a la suya y resulta que esto allí no se vende. Ellos trabajan en otro modelo. Ir a países muy avanzados (Estados Unidos u otros) y pensar que allí será muy fácil porque es un mercado muy grande o irse a la China porque son mil millones… estos mitos o ideas preconcebidas no funcionan. El proyecto de trabajar fuera, de poner en marcha la exportación de productos propios tiene mucho que ver con la capacidad de digitalización de estos productos. ¿Cómo podemos vender sin ir? ¿Cómo podemos importar cosas que nos puedan complementar? Esto también es negocio internacional ¿Cómo podemos adquirir cosas de fuera para nuestro negocio de aquí? Toda esta dualidad, este feed-back en importar y exportar productos es una de las posibilidades para tener éxito.
¿Hay diferentes maneras de salir al extranjero, no?
Sí, bueno, si alguien que nos esté escuchando tiene pensado ir a algún país del mundo a desarrollar su negocio tiene tres opciones: Acción comercial pura y dura, yo tengo una plataforma de venta y vendo des de aquí a todo el mundo y puedo hacerlo y como máximo puedo coger algún agente comercial local y por ejemplo vendo zapatos, software o lo que sea. Esta es la manera más sencilla, buscar alguien que nos ayude desde allí y prácticamente no ir nunca. Es una opción. La otra es instalarnos físicamente, esta es la más compleja, en teoría, porque tiene dos opciones: la filial o la sucursal. La filial, ya lo dice el nombre, es como poner un hijo allí, es como tener una parte de ti en aquella zona (por ejemplo cualquier país del mundo) en el que montas una pequeña filial y si te pasa algo es como si tuvieras un brazo de tu empresa y si no funciona te lo cortan pero la empresa como tal funciona. Tener una sucursal, que es otra manera de implantarse, es diferente. Si le pasa algo, es una sucursal de tu empresa que entra en crisis y además afecta a toda tu estructura empresarial. Y la tercera, y la más viable en estos momentos, o la que yo más recomiendo, es la de encontrar un partner local. Aquí hay que andarse con cuidado.
¿Qué es un partner local?
Un partner local es aquel acompañante que tendrías en tu proceso de ir al exterior.
Como un socio en el lugar, ¿no?
De hecho es un socio y también hay varias maneras. Para ir directo a la que yo recomiendo, es crear una tercera empresa, local, tú te das de alta allí como empresa, existes (como sucursal o filial, como quieras). Entonces pactas con una empresa que hayas examinado con ayuda de alguien, descubrir que la empresa es seria, que tiene capacidad de implantación pero le falta algo que tú le puedas aportar y ella tiene algo que tú no tienes, que evidentemente es la implantación. Cuando llegas a este pacto, estableces cómo puedes permanecer allí. Y esto se llama Vía Partner, y Vía Partner puedes crear una tercera empresa participada por los dos y, normalmente, es la que ofrece mayor éxito.
Pero tienes que tener mucha confianza en alguien, ¿no? ¿Cómo podemos saber que es alguien de fiar? Porque, claro, nos podemos pillar los dedos…
De la misma manera que cuando haces una UT (Unión Temporal) de empresas aquí, también te tienes que fiar, en principio, de los informes, del papeleo, del análisis, de Google, de mil cosas donde al final acabas buscando información. No hay mucho más, pero evidentemente hay cuerpos consulares donde preguntar, hay cámaras de comercio para averiguar, etc.
Hablemos de importación-exportación, aquello que dices: yo hago fuets y los exporto. O bien importo un vodka de Rusia, lo que sea. ¿Qué preguntas debemos formularnos para saber si estamos en disposición de hacerlo con nuestro producto?
A veces, debemos tener claro que llevar el negocio al exterior pasa, en ocasiones, por casualidad. Yo conozco un caso llamado Jamones 2.0 (unos jamones que se hacen en Granada, en la Alpujarra), conozco la persona que puso en marcha este proyecto, lo puso en marcha como un proyecto de emprendeduría propia, complementario a su trabajo habitual, y empezó a buscar fórmulas de promoción de su producto: Empezó a poner un poco de jamón en una bolsa de plástico y enviárselo a algunos amigos de Facebook, cosas por el estilo. Hasta que, de algún modo, llegó este producto a alguien de Londres. Sin saber cómo ni de qué manera, llegó a Londres. Y esta persona se dedicaba a gestionar un restaurante en Londres, y este restaurante de Londres dijo que quería jamón de allá, de aquella señora. Y de momento, ya estaba, ya estaba trabajando en el exterior, ya estaba internacionalizado su negocio. Pero es que en este momento son dos decenas de restaurantes de todo Gran Bretaña que le piden este jamón específicamente a esta señora. Pues esto a veces pasa por casualidad, está vendiendo fuera más que aquí. El 70% de su facturación está exteriorizada. ¿Cómo podemos hallar? ¿Dónde podemos ir? Muchas veces son casualidades y otras son un planteamiento previo, una estrategia… pero no te viene garantizada esta estrategia.
Ahora se habla mucho de Asia y de que es el mercado. ¿Es uno de los mercados que debemos mirar con mayor atención?
Hay que ser experto, hasta existen escuelas de negocios que ofrecen másteres específicos sobre cómo hacer negocios en China. El problema de China es la conceptualización que tienen. Yo respecto a China no tengo demasiada experiencia, hay que decirlo, pero lo que conozco de la gente que está trabajando allí es que se sorprenden de su capacidad de copiarlo todo y esto conlleva un riesgo enorme. A veces cuento el caso de Industrias Figueras (de sillas), hubo un viaje que se hizo allí y me acuerdo que en un momento determinado presentaron uno de los directivos de Industrias Figueras a unos chinos que le dijeron que estaban encantados de conocerlo, que para ellos era como un héroe, que en las propias Industrias Figueras era un personaje y estaban tan orgullosos de conocerle y de que le hubieran llevado a su propia industria que le abrieron las puertas de su propia factoría de allá y le mostraron todo lo que hacían Y eran exactamente iguales que las del señor Figueras. Y claro, el señor Figueras dijo: ¿Esto qué es? Y dijeron: No, es que estaban tan orgullosos de lo bien que copiaban y maravillados de su producto. Es decir, cuidado con China porque es un país con una capacidad para copiar brutal.
Y todo el tema de India, que también dicen que es un mercado emergente…
Sí, claro, pero son espacios que por el mero hecho de que su clase media, que es incipiente, crezca el 0,1% ya son 10 millones de personas más como posibles clientes. Es un tema puramente numérico, pero cuidado porque la competencia allí es vital. Y si nos pensamos que podemos entrar en estos mercados, exclusivamente, porque la mano de obra es más económica también nos estaremos equivocando de modelo.
¿América Latina?
América Latina es donde más experiencia tengo y donde, realmente, hace muchos años que buscamos fórmulas de negocio. Allí, lo que hay que entender es que no podemos hablar de América Latina, debemos hablar país por país y modelo por modelo.
País por país porque hay muchas diferencias, ¿no?
Porque no tiene nada que ver Honduras con Guatemala, no tiene nada que ver Panamá con Chile o Argentina con Brasil. Estamos hablando de economías muy diferenciadas con unos modelos económicos también muy diferenciados.
Dices que quizás Chile se está marcando como una buena opción, ¿no?
Chile, en el ámbito tecnológico es puntero pero, por ejemplo, Panamá (donde he estado recientemente) descubrimos que son países que tienen una reducida penetración de internet (Panamá la tiene muy baja, Chile la tiene muy alta) pero, por ejemplo, en el tema de desarrollar negocios allá de carácter digital son oportunidades muy grandes porque, de la poca penetración de internet que tiene Panamá, prácticamente todo el mundo está conectado a través de una red social y a través del móvil. Panamá es el país con más móviles por habitante del mundo. Chile es el país con una penetración de redes sociales más alta del mundo. Brasil es el país donde no hay forma de que Facebook sea capaz de vencer a Orkut, otra red social muy propia. Son espacios muy propios, donde trabajar es sencillo por el tema idiomático (prefieren hablar con un español que con un norteamericano, pese a que el norteamericano hable español). A ellos el acento “gringo” no les maravilla aunque ellos tienen una capacidad anglófila para utilizar palabras inglesas muy a menudo pero su confianza hacia occidente se encara mucho hacia los españoles.
Y de eso podemos sacar partido, ¿no?…
Seguramente
¿Y en África?
África es el continente que más crece el mundo en estos momentos en términos porcentuales pero, claro, viene de tan lejos que es muy difícil. Hay oportunidades, sobre todo para el mundo de la construcción, para el mundo de la promoción inmobiliaria desde el punto de vista de llegar a pactos con gobiernos locales que están desarrollando proyectos que vienen subvencionados por organismos internacionales. Pero cuidado, porque allí sí que tienes que ir de la mano de alguien.
Ya…
La ruina es muy probable si no sabes con quien vas.
Sí, claro, hay que ser de máxima confianza…
Sí, pero no porque ellos sean más propensos a tomar el pelo a nadie. No, el problema está en que es un mundo totalmente diferente, contrario al que nosotros conocemos y los mecanismos sociales no tienen nada que ver.
¿Recomendarías a algún pequeño empresario y/o mediano empresario que nos esté escuchando de probarlo?
¡Sí! Es que algunos no tendrán más remedio.
¡Como mínimo! Para decir: ¿cómo empiezo?
Sí, lo que pasa es que tampoco confiemos demasiado, es decir, nos pueden ayudar pero tenemos que ser nosotros mismos los que podemos poner en marcha las cosas.
Marc Vidal, es analista económico, ¡Gracias, que vaya bien, hasta la semana que viene! ¡Adiós!
¡Hasta la semana que viene! ¡Adiós!
La publicidad en las redes sociales
El mercado publicitario en España se redujo más de un 15% en 2008, un 18% en 2009 y, aunque menos, también se reducirá este año. Más de un tercio del mercado publicitario europeo ha desaparecido. Nunca había pasado algo así, ni en las peores crisis en términos de inversión. La comunicación publicitaria no cayó a estos niveles ni en 1993 tras los fastos olímpicos y de la Expo, ni tan siquiera en 2001 con el reventón tecnológico.
Sin embargo, y engordando la teoría de que no situarse en el punto exacto te acelera el desastre, esa caída de inversión en publicidad no se ha producido en Internet. Ayer comentaba que la gente ya no visita tres o cuatro tiendas hasta que decide que comprar, ahora se desplaza por las webs y portales, blogs de opinión y redes donde se enfrentan las marcas con sus consumidores, y deciden comprar, cada vez más a golpe de clic. Si deciden ir a un establecimiento a comprar, es tras ese repaso a los catálogos publicados digitalmente y cada vez con menor frecuencia esa comparativa se produce en el sentido analógico del término. En ese campo, la publicidad contextual de Google o la generada por enlaces a partir de acciones semánticas siguen siendo las que mayor valor otorgan a las campañas. Ahora bien, eso también está cambiando.
Las empresas e instituciones invertirán en 2010, en las diferentes redes sociales de tipo global que se gestionan profesionalmente en el planeta, más de 2.000 millones este año. Aquí cabe destacar que entre las que son de tipo pornográfico y Facebook se calzan casi dos tercios del pastel. Más de 1.000 millones de euros en anuncios para Facebook este año. De esta cantidad, un 75% de la inversión todavía estará situada en Estados Unidos, a pesar de que sus ciudadanos ya son menos de una cuarta parte de los clientes de la red social de Zuckerberg.
Si estos os parecen buenos datos, las previsiones para 2011 son aun mejores. Cerca de 1.500 millones en ventas se acercan por el horizonte. A pesar de que estas cifras son importantes, aun están muy lejos del valor nominal “teórico” que se le otorga a la compleja empresa digital que alberga dicha red. Estamos construyendo el modelo empresarial socializado y eso no es fácil. No será simple valorar estas organizaciones y su entrada en bolsa lo complicarán aun más todo. Demos tiempo a estas operativas y esperemos que no se cometan los errores de otras bolsamanías tecnológicas que tan mal nos lo hicieron pasar.
Vamos a ver donde crece el fenómeno de la inversión publicitaria en Facebook por ejemplo. El crecimiento que esta red necesita ya no está en los Estados Unidos, sino en el resto del mundo. El aumento de ventas para 2011 fuera de Norteamérica rondará el 500% en dos años, frente a un 30% en su sede natural. A pesar del escepticismo sobre la viabilidad de los anuncios en las redes sociales parece ser que los anunciantes encuentran algún tipo de sentido a sus banners socializados. Sin embargo donde verdaderamente se está disparando el mercado publicitario no es en Factbook o en Twitter u otras como podría aparentar alguna de esas cifras, no, donde lo hace es en los entornos de juegos sociales por culpa del requerimiento básico de su propia existencia: un gran número de usuarios.
Una de las grandes deficiencias que tenía la gestión profesional de redes sociales y sus campañas integrales era la de definir claramente el rendimiento de las mismas. En ese sentido muchos fueron los que nos lanzamos a desarrollar herramientas que pudieran medir esas acciones. Nielsen fue la primera en localizar la piedra filosofal. En estos momentos, a través de una herramienta propia, analizan la efectividad de una campaña publicitaria en entornos sociales y especialmente en Facebook.
Según explican en un estudio realizado a casi un millón de usuarios de Facebook a partir de 125 campañas, “se confirma que el recuerdo de marca y la notoriedad de la misma crecen de manera proporcional a la vinculación personal que ese usuario muestra en la red social por ese servicio, producto o marca”. Se supone que gracias a eso la intención de compra crecerá al mismo ritmo, por lo que algo nuevo está estructurándose en ese entorno.
Seguramente, si el rédito a las empresas es real y demostrable, el fracaso de las puntocom y los retornos inexistentes de aquellas inversiones alocadas de entonces no vuelvan a repetirse. Se está trabajando duro para poder demostrar que las redes sociales son algo más que una moda, un entorno puntual de relaciones, para hacer llegar que las empresas e instituciones tienen mucho que obtener de esos territorios. Básicamente se está vinculando un espacio de negocio a un territorio donde pasan cosas de verdad. Si es así, si al final se logra demostrar que la inversión posee un retorno fiable, el futuro de estas herramientas en bolsa no será el de Terra.
Debemos estar a un paso de la apertura de las redes sociales, a pocos centímetros de que las diferentes plataformas colectivas hablen entre ellas. De momento todas viven en sus jardines privados, acotados y segmentados por los millones de clientes que tienen, pero, cuando los anunciantes soliciten rangos de repercusión como hacen con la omnipresencia de Google, expresarán la necesidad de generar campañas de comunicación digital en entornos sociales que no estén vallados. Al tiempo.
Están a años luz
Es espantoso descubrir como los “elegidos” que dirigen nuestro tránsito por este valle de lágrimas no se enteran de nada o de muy poco. Tanto políticos, como algunos directivos de empresas, muchos viven a años luz de la realidad. Ayer descubríamos que Telefónica se lanzó al recorte sistemático del modelo de acceso a Internet para los pobres británicos. Tómenlo como un fétido globo sonda sobre lo que nos va a tocar vivir aquí en menos que canta un gallo. Si aun no se han atrevido a tomar una decisión parecida es porque la privilegiada posición heredada de la época del monopolio es tan inmensa que no habría manera de defenderla.
Sin embargo, esta historia de pagar por gigabyte que te zampas, es la guinda del pastel que ya nos presentó el máximo dirigente de la operadora hace unos meses, cuando hablaba de “cobrar a buscadores por hacer uso de la red”. Que el consejero delegado de la principal empresa de este país y, previsiblemente, una de las compañías en vanguardia tecnológica, no sepa interpretar los nuevos escenarios digitales tampoco es tan grave. De hecho, tenemos políticos abordando temas de crucial importancia sin, por decirlo finamente, apenas conocerlos.
Esa evidente distancia entre los que mandan en empresas de tipo institucional, o en la administración, y lo que pasa en realidad en el mundo que les rodea, se evidenció en grado sumo hace poco, cuando la secretaria general del PP,María Dolores de Cospedal se puso a denunciar el dispendio de las “teles” autonómicas. La mujer tenía razón en una cosa: esa sangría no puede continuar. Cuando algo es insostenible y además es un cromo repetido, debe adelgazarse su coste y hacer eficiente su uso.
El dinero público no está para patrocinar la imagen de ningún político y menos ahora que las cosas no están para bromas ni meriendas. Pero, aceptando esa retórica manida de los que pensamos que la prensa, aunque sea audiovisual, no debe estar subvencionada eternamente por los impuestos de los que no la ven y monopolizada por los que se alternan en el poder que la establece políticamente, cabe decir que todo eso es texto caduco y antiguo.
A lo que me refiero es que hablar hoy en día de televisión en términos de canales o cadenas de presión, es no entender que los tiempos están cambiando a una velocidad que muchos no parecen entender. La televisión está sufriendo cambios a un nivel que los modelos de negocio conocidos no servirán para su supervivencia. Hablar de privatizar canales autonómicos es seguir en el estribillo inservible de una economía que rechaza la emisión dirigida y que muta hacia una audiencia que selecciona lo que quiere ver y cuando lo quiere ver.
La nueva audiencia, incluso, decide donde lo quiere ver y bajo que soporte desea percibir la publicidad cuando la acepta. Está claro que alguien no se está enterando que eso de la TDT nació cadáver. La caja tonta, ahora digital y terrestre, no deja de ser un organismo receptor de intereses. Ahora, ese interés, está en las múltiples plataformas que ofrecen contenido audiovisual y que para visionarlos no es preciso pasar por ninguna cadena de televisión o sucedáneo.
Los canales de televisión y sus envoltorios tienen los días contados tal y como las conocemos. Los modelos económicos que responderán adecuadamente a una competencia ubicada a un golpe de clic serán los que permanecerán, y les aseguro que esos no serán los actuales cadenas, a menos que entiendan que la próxima parada, el futuro, ya ha sido anunciada.
¿Qué les pasó a otros que se resistieron al cambio? Agencias de viajes sin modelo de negocio sostenible, sobreviviendo de las migajas que Internet les permite atrapar, los derivados de aquellos reacios a comprar por Internet o que por aspectos generacionales cada vez de menor cuantía, siguen comprando “en persona”.
¿Cuántos jóvenes menores de 25 años saben como es una sucursal bancaria? Las agencias de seguros han debido aprender a enfrentarse las unas a las otras en plataformas que comparan sus precios en tiempo real, los hoteles han debido formarse para defenderse de las críticas feroces en las redes sociales, las discográficas se arrastran por el silicio y sobreviven gracias a cánones y otras estrategias carroñeras que también desaparecerán por lógica moral.
¿Quién iba a pensar hace 2 años que las tiendas de ropa iban a ser el principal modelo de negocio en ecommerce en Europa por encima de la venta de billetes de avión o de hotel? La venta de automóviles se hace de otro modo ya, ahora un comprador va directamente a su concesionario del modelo y marca elegido tras visitar otros tres catálogos virtuales, las cajeras de los supermercados están siendo remplazadas por gestores de envío logístico y la prensa en papel por una atomizada manera de leer las noticias en múltiples formatos y soportes de tipo digital que genera medios nuevos automáticamente.
Algunos se resisten: libreros y televisiones tradicionales. Los primeros más vale que observen como van mojando sus barbas los de los mp3 y las segundas que se bajen el pdf descriptivo del último aparatito endiablado de la factoría de Steve Jobs. En menos de cinco años, la manera en la que vemos la televisión será tan distinto que ahora nos parece imposible. En muy poco tiempo, algunos ya lo hacemos ahora, seleccionaremos en nuestro smartphone que queremos ver, cuando y desde donde, lo enlazaremos y lo visualizaremos. No habremos encendido la televisión y estaremos viendo cualquier cosa que se emita en televisión independientemente del canal y su uso.
Una de las tareas más sofisticadas de los programadores de televisión (y yo trabajé en ese rocambolesco puesto laboral) es posicionar un programa gancho justo antes del informativo. Léase algo como un programa de corazón, de sucesos o de juicios populares inmediatamente anterior a las noticias que interesa catapultar ese día. Eso es algo que ya no sucede en miles de aparatos del mundo. Vemos las noticias multiplicadas y revertidas en diversos canales que se gestionan automáticamente en nuestro ordenador y que se trasladan a la pantalla de la televisión del salón sin pasar por el cable de siempre.
Es cierto que la política no suele caracterizarse por ir en vanguardia de nada, tal vez todo lo contrario. La gestión pública habitualmente va a remolque de la sociedad y de sus intereses, de sus gustos y sus tendencias. Además es cierto que los que llegan a esos puestos de responsabilidad suelen ser los menos visionarios, arriesgados y emprendedores de la clase, por lo que los ves siempre corriendo en todas direcciones sin saber donde está la puerta del futuro inmediato.
Por todo ello, seguramente, pensar en negocios vinculados a esa nueva manera de ver televisión o del ocio audiovisual, es mucho más productivo que atender a las maravillosas lecciones sociológicas de sus señorías. Si por ellos fuera el modelo sería siempre el mismo pues permite manipular y dirigir la opinión según sus intereses. Que duro es eso de vivir tiempos de redes, tiempos en los que los usuarios y los electores se confunden en una amalgama desordenada de voluntades, algunas incluso, ya han dejado de ver la televisión tal y como la veían nuestros padres o hermanos mayores.
Artículo publicado en Cotizalia
La venta por Internet
Hoy os dejo con la traducción de la sección “economía en efectivo” que hice para el programa “el món a Rac1” de la cadena de radio RAC1 (Grupo Godó). Durante unos veinte minutos tratamos el tema de la venta por Internet, el eCommerce y otros elementos que pueden ser interesantes si tenéis pensado poner en marcha una tienda digital. ¿Has comprado alguna vez por internet? Esta es la pregunta que estamos haciendo hoy en “El món a Rac1” y una gran mayoría (el 87%) dice que sí y el 13% dicen que no. Tú supongo que no hace falta ni que te lo pregunte, tú debes comprar-lo todo per internet.
Todo, todo prácticamente.
Realmente, la entrada de Zara que es una marca de gran envergadura y muy popular ¿marca un antes y un después en la compra en línea?
En teoría no debería marcar nada en especial porque la compra en línea ya hace tiempo que funciona y el crecimiento es exponencial cada vez más, con más efectividad y la seguridad cada vez está más garantizada. Lo que sí que puede marcar es el inicio que grandes marcas (y sobretodo una marca del grupo Inditex como Zara) reticentes a entrar, asuman que este es el nuevo escenario económico y que este es digital al 100%.
Es curioso porque además Zara ha llegado un poco tarde cuando siempre se ha distinguido por innovar mucho…
Yo creo que han innovado también en esto, ahora mismo. Quizás innovan en esperar. La innovación sólo es válida cuando el mercado la asume como tal. Si tu innovas y el mercado no lo acepta tú no has innovado, has fracasado. Tenemos fracasos de hace tiempo. Miró y otras tiendas que no acabaron de consolidarse porque entraron muy temprano. Evidentemente que Zara ha sido innovadora en todo, crearon un nuevo modelo de consumo en el que creaban una demanda inminente. Ellos no tienen temporada si no que van generando nuevos stocks constantemente en cualquier parte del mundo y esta modalidad, que ha sido copiado en otros negocios y marcas, es en la que han sido pioneros. Y en el ámbito de la venda on-line no lo son pero lo serán cuando irán enfocándose hacia la multi-venta en el ámbito de las multi-plataformas.
Tradúcelo…
Potenciarán, en gran medida, que se pueda comprar ropa (de Zara en este caso) desde cualquier punto, dispositivo y de forma muy ágil. Yo creo desarrollarán una tecnología que permita comprar desde un teléfono móvil sin dificultades.
Qué puede aprender Zara de otros sitios de éxito como Privalia, que está vendiendo ropa desde hace tiempo.
Privalia tiene un modelo de negocio vinculado a los stocks que no se venden. ¡Brillante! Seguramente fue muy difícil ponerlo en marcha, convencer a marcas y a productos que nadie quería poner. Y ellos acabaron por convencer. Yo creo que aquí hubo un trabajo absolutamente vinculado a las personas que estaban detrás de Privalia. En todo caso, el trabajo de Privalia tiene más a ver con el stock que queda y las ofertas vinculadas y no tanto en el modelo de venta on-line. No obstante, es una venta on-line con un producto muy innovador en el sentido que yo busco unas cosas que para ti supondrán una ventaja tener.
¿Qué otros tipos de venta on-line existen?
Primero hay que distinguir tres factores: 1) el Business to Business, aquellos sitios donde las empresas ofrecen (mediante algún tipo de plataforma) aquello que tienen para que otra empresa lo compre. 2) el Business to Consumer, un negocio pone una tienda para que lo compre el consumidor final. 3) el Consumer to Consumer, la capacidad de los propios consumidores para poner a la venta sus propios productos. El usuario final es el vendedor y no hay fricción, ni ningún tipo de empresa de por medio que nos gestione esta venta. Es el caso de subastas, E-bay, otros escenarios que han ido impulsando de forma importante el consumo digital y las ventas en la red.
Supongo que por el impulso de los últimos años hace que marcas como Antoni Miró lo vuelvan a intentar ahora pese a que en 1998, en el primer intento, no le funcionó. En estos años deben haber pasado muchas cosas, ¿no?
Miró en este caso es el ejemplo del que llega demasiado pronto. Todos los que hemos montado negocios y hemos fracasado sabemos qué significa esto. Aquella idea tan buena que tenia no funcionó y, al principio no sabes por qué, pero descubres que seguramente el terreno no estaba preparado. Y en el caso de Miró no lo estaba por un factor fundamental y es que la gente no estaba vinculada a la venta on-line por miedo a ser estafada. La venta on-line en aquel entonces estaba supeditada al ámbito de los viajes (billetes de avión, etc.)
Y ahora resulta que la cosa ha cambiado un poco. Porque parece que la ropa va tomando fuerza.
En estos momentos, se vende más ropa por internet que billetes de avión.
Casi un 40% de los internautas tienen la intensión de comprarse alguna pieza de ropa a través de la red este año y sólo un 32% piensa comprar billetes de avión.
Esto es la previsión, pero de hecho, esto ya está pasando. Tampoco es tan extraño, hay que desmitificar un poco el tema de la venta on-line. ¿Quién no se acuerda de aquellos catálogos que tenía mamá, que llegaba con ropa de miles de colores y formas que al final ponía cuatro cosas en una lista con cuadraditos tipo escáner que si te equivocabas al rellenarlos le llegaba a otra persona de otro pueblo? Así ya se vendía mucha ropa y ahora se vende de forma digital. Y digamos que los factores que influyen en que las cosas se vendan más o menos ya no son tanto que la gente esté de acuerdo en no comprarse ropa que no puede probarse sino en los factores que puedan influir que te llegue a tiempo a casa. Ahora hay un modelo de visualización de tu ropa, un maniquí virtual que tú vistes con la ropa que quieres comprarte y además este maniquí puede parecerse a ti. Puedes elegir el cuerpo, como eres o como querrías ser en un determinado momento, no vale mentir porque si no no vale después… esto no me queda bien ahora, dices, claro esto no me queda bien porque este no era mi cuerpo. Al final esto también es un factor de acercarte al efecto final.
Pero muchos te permiten devolver la ropa si después te la pruebas y no te va bien.
Por ley lo tienen que hacer. Actualmente, la garantía de devolver los productos si tú los mantienes con la calidad con la que te ha llegado y con una serie de características básicas como es el almacenaje, cualquier tienda tiene la obligación de devolvértelo.
¿De qué cuota estamos hablando del negocio de una tienda de ropa? Por ejemplo, Mango ¿Qué llegaría a vender por internet, en porcentaje de negocio?
Ahora mismo, Mango considera que vende un 1% de todas sus ventas, lo cual es muchísimo.
Proporcionalmente no es mucho…
Consideran que en los próximos tres años pueden llegar al 7%. Si las cosas van como ha pasado con otros productos, por ejemplo con los viajes, si conseguimos que la fricción, es decir, que el efecto entre lo que tú decides comprar y el producto que te llega tiene la mínima fricción en materia económica, es decir, te llega rápidamente, sin problemas, que la garantía de pago cada vez es más clara, que además tus amigos lo hacen así, si además las conversaciones en las redes sociales proporcionan esta voluntad de acabar comprando, si has creado tendencia de uso sobre el hecho de comprar por internet… Yo creo que, en porcentajes, estaremos cerca de un tercio o cuatro quintas partes y no en las cifras actuales.
Lo has ido nombrando, Marc, pero aún persiste el mito que una compra on-line es una estafa asegurada. Todavía hay este mito. Y este es uno de los grandes obstáculos contra los que hay que luchar.
Es un mito, realmente lo es, como aquello de decir que los aviones son peligrosos. Si cogemos el porcentaje de accidentes, evidentemente, estos no se producen en los aviones, se producen en la carretera, cruzando la calle… Lo mismo pasa con esto. Si cogemos los porcentajes de posible delito a partir de una tarjeta de crédito que tú pones en internet, el porcentaje final es muy inferior a salir a la calle y que te puedan atracar. De hecho, las grandes estafas (que te vendan una cosa que al final no es) se producen en las mismas tiendas. La garantía que te ofrece una tienda o comercio es la confianza que le tienes, no el tipo de pago. En internet, tú debes saber en quién puedes confiar y en quién no. Hay muchos mecanismos, hoy en día, para saber que lo que te están vendiendo es lo que te están vendiendo, y en el caso que no sea así también puedes reclamar, evidentemente. Pero la seguridad actual, de tipo financiero, es decir, si mi tarjeta no me la copiarán o le harán lo que sea… es más fácil que te copien la tarjeta pasándola por una autopista que a través de internet.
Por cierto, hablábamos antes de pioneros, también los supermercados están vendiendo mucho por internet. La compra de cada día, de lo que comemos…
El aumento se ha parado un poco, pero estamos hablando de un 300% superior a hace 5 años. En estos momentos, las grandes superficies que venden a través de internet toda la compra… además yo creo que es uno de los mejores inventos que hay. Que tú puedas decidir qué quieres tener en casa para comer y para beber, y que te lo traigan, y que además lo decides a través de plataformas móviles todavía más (por ejemplo, en medio de un atasco). ¡Esto es genial! ¿No?
Esto es lo que haces tú en los atascos…
Alguna vez, lo que pasa es que yo compro poco.
Muy bien, vamos al tema práctico. Imaginemos que tenemos una tienda, un comercio… y dices: quiero montar una tienda en línea. Para tener éxito, ¿cómo hay que hacerlo?
Formas para poner en marcha una tienda on-line hay varias. Hay plataformas de carácter gratuito, de Creative Commons que te permiten poner en marcha una plataforma cogiendo tus productos, haciendo tu mismo las fotografías, hay software que actualiza automáticamente todo lo que tienes, cómo lo haces… El software vinculado a las plataformas de venta está muy evolucionado y es fácil de encontrar. No diremos marcas, pero vas a Google, lo pones y te aparecen miles. En todo caso, hay que examinar qué queremos hacer con esta tienda una vez la ponemos en marcha (ponerla en marcha es muy fácil). Lo que hay que intentar es que si ponemos una tienda on-line, tenemos que conseguir que esto reduzca costes en nuestro sistema de venta o que también los reduzca en la compra de aquellos clientes que puedan acercarse, que con esta venda on-line nosotros podamos conseguir una cosa que tenga que ver con las comunidades de clientes. O sea, que la gente que se acerca a nuestra empresa a través de internet pueda generar sus propias comunidades a través de nuestras marcas. Esto permite la venta on-line, porque tienes la capacidad de llegar digitalmente a estos clientes. A través de la venta on-line también podemos competir con grandes empresas. Hay que saber que los pura sangre (los grandes caballos que hay en los concursos) no siempre ganan las carreras cuando estamos hablando de temas digitales. Nosotros en nuestro potrillo podemos llegar a sitios muy interesantes, muy importantes y sobre todo a facturaciones que no podíamos imaginar ya que no tenemos ni territorio ni horario. Aquello funciona 24 horas al día mientras que si estamos de forma analógica hay que cerrar.
Por lo tanto, ¿tú crees que puede ser una buena idea para un comercio pequeño, mediano, tradicional abrir su propio portal?
Yo creo que es imprescindible.
¿Lo es?
Cualquiera que tenga un lugar de venta de cualquier tipo de producto tiene que buscar la manera de digitalizar este producto. Si yo tengo una panadería, yo tengo que poder estructurar de forma eficiente la posibilidad de que alguien me compre de forma digital. Ya no tendríamos que diferenciar entre la tienda digital y la analógica, yo tengo una tienda y este comercio tiene que ser capaz de vender en ambos escenarios, y si hay alguien que debe impulsar esto, sea desde la Administración o cualquier otro ámbito, que lo haga porque es la capacidad de modernizar una economía.
Pero, ¿y la distribución, Marc?
La distribución, en este caso, es la gran beneficiada de este hecho. Porque la logística deberá dar respuesta a este tipo nuevo de comercio. Yo creo que se debería hacer un planteamiento global, integral y transversal entorno al comercio electrónico, de la venta on-line, de la venta digital de modo que cualquier comercio que quisiera lo pudiera hacer y que hubiera, a partir de aquí, algún tipo de estructura que vinculara el mundo logístico, el transporte de todo esto (que serán los grandes beneficiados), porque al final será el resultado de este transporte lo que le dará viabilidad o no al comercio. Yo creo que cualquiera que desee transportar sus productos tiene que buscar alguien que lo asesore, esto está claro, para ver cómo se puede hacer y de qué modo se puede hacer de forma eficiente y con quien puede colaborar o con quien puede asociarse para llegar a estos efectos.
No tiene que estar sólo, porque algunos dirán, esto es una movida… empiezo a recibir peticiones y me ahogo…
Puede ser que si o puede ser que no, pero todo se puede ir ampliando poco a poco. Lo que creo es que la economía digital nos lleva a un nuevo escenario que tiene que ver con la relación entre empresas, la relación consumidor-empresario y en este caso: o nos organizamos u otros países nos pasarán por encima.
Tú hacías la comparativa en el caso de las librerías en línea, si comparamos Amazon y la Casa del Libro.
Si bueno, la Casa del Libro o Amazon… las diferencias en este caso es la velocidad con la que te llega el producto, fundamentalmente, pero yo creo que la principal diferencia no debería estar aquí si no en cómo te llega. En la Casa del Libro no te puedes descargar libros, de modo que estamos hablando de una tienda antigua en el ámbito de la creación de libros, de música… Si tú tienes una tienda de libros y estos libros tienes que esperar que te los traigan cuando existe la posibilidad de leerlos sin que te los traigan, tienes una tienda antigua y que tiene fricción económica, es decir, no llega tan rápido como podría llegar. La tienda que te ofrece la posibilidad, tan sólo, de vender libros electrónicos gana.
¿Está calculado cuantos días debería tardar una compra en línea en llegarte a casa para que fuera realmente competitiva?
Sí, hay algún análisis hecho por parte de asociaciones de carácter logístico o de transportes en el que se dice que lo ideal son 24 horas. Todo lo que llega en las 24 horas no expulsa al comprador, no aleja al comprador del producto ni del hecho de la compra. A partir de las 24 horas, empiezan a desaparecer estos clientes. En 48 horas, los clientes desaparecen de forma masiva. Y a partir de una semana, has perdido el cliente.
¿Hay alguna forma, para los que todavía dudan, de comprobar la calidad del producto antes de que te lo envíen?
Si, esto ya es otro tema, largo, que sería cómo descifrar un poco los comentarios, las aportaciones y todo lo que se dice en la propia red. Yo creo que lo fundamental viene de la Social Media, las comunidades en las redes sociales, los escenarios donde la gente puede opinar, hablar y explicar sus experiencias de consumo, donde los usuarios se convierten en gran medida en productores de estos productos (lo que serían los prosumidores), ya que a medida que van consumiendo opinan sobre ellos y ayudan a la producción. Estos señores, estas personas que somos todos nosotros, son los que al final nos dan, un poco, la garantía sobre lo que estamos comprando, a parte de otros factores. Yo creo que la gran clave, la gran diferencia, la novedad respecto a la opinión general de un producto o para saber si un producto está bien o está mal es que ahora no sólo nos lo tiene que decir un experto, la propia empresa o un periódico si no que nos lo pueden decir los propios usuarios. Y nos lo dicen de forma masiva en varios escenarios.
Además, ahora las tiendas en línea tienes muchas formas de promocionarse en la red.
Si, precisamente es esto. Una tienda en línea ya no tiene que tener un banner, puede perfectamente crearse varios territorios virtuales en las redes sociales, donde precisamente se estructura otro tipo de publicidad que tiene que ver con la participación de la gente.
A parte de la compra del supermercado y de billetes de avión, ¿qué es lo más raro que has llegado a comprar por internet, Marc?
Yo me compre un perro, hace muchos años (en 1997) y fue un perro vasco que compré en Francia, que se llamaba Reni, pobrecito, que ya no está… Pero lo compre por internet, sí.
¿La cosa fue bien no?
Era un crack.
Muy bien, Marc Vidal, la semana que viene más. ¡Gracias, adiós!
¡Gracias, adiós!
Es la Nueva Economía, idiota.
Empieza un nuevo curso, una nueva oportunidad para el cambio. En mi caso he decidido intentar ser algo más idiota, si eso es posible. A pesar de que hay que ser un iluso para no ver que el monstruo no ha desistido, que no se alejó dejando a su presa tranquila, que lo peor no ha pasado y que las heridas que hemos sufrido en la defensa de su primera agresión no tendrán tiempo de cicatrizar, he tomado la decisión de no darle importancia. A pesar de todo ello, me niego a hacer una lista de todo lo malo que se cierne sobre nuestras existencias de color rosa. Y me niego porque tras pasear por algún paseo marítimo de este país, uno comprueba que el que se preocupa es porque quiere. Los grandes datos, las cifras macroeconómicas en rojo sangre no son nada comparadas con una buena mariscada a crédito o una fiesta VIP de tres días financiada en doce cómodas cuotas. La verdad es que siendo idiota se vive mejor. Que lo malo llegará es evidente, pero mientras no llegué que me quiten lo bailao.
Voy a dejarme de preocupar de que el 86,75% del ahorro del Fondo de Reserva de la Seguridad Social esté invertida en papeles de Deuda Española. ¿Por qué voy a preocuparme? Digamos que eso es motivo de tranquilidad, quiere decir que el gobierno se fía de su capacidad para gestionarla. No vayan a ser mal pensados, agoreros o catastrofistas creyendo que es muy arriesgado que uno se juegue todas sus opciones en la misma tirada. Al fin y al cabo, ¿cuántas familias no han calzado sobre su hipoteca avalada por su vivienda, otro crédito al consumo sujetado por el contrapeso de la primera de las deudas? Que tire la primera piedra quien no haya hecho lo mismo que el gobierno. Si a la mayoría le ha ido bien, si son legión los requetehipotecados que siguen disfrutando de vacaciones de lujo riéndose como la cigarra, ¿porque no le va a ir igual al todopoderoso Estado?
Voy a dejar de preocuparme por los Ayuntamientos de este país, por si van a entrar en quiebra a puñados. Alguien lo pagará, ya veréis. No me preocuparé viendo que el consumo minorista cae, pues ya bajarán los precios y todo volverá a su cauce y esos que decían que “la deflación era algo muy malo” tendrán que comerse sus propias palabras con sobrasada mallorquina. No voy a preocuparme más por el paro. Seguramente la mayoría de los que están en paro encontrarán trabajo tarde o temprano. Además, hay un montón de ayudas para que eso no sea un trauma. Por ejemplo, la prórroga de los 400 euros es un acto de responsabilidad política que tranquiliza una barbaridad. Además, la nueva reforma laboral aventura que los parados son una especie que se extinguirá en breve. Ya lo veréis.
Preocuparse por la crisis sistémica es de tonto a las tres. ¿Desde cuando una crisis de tipo sistémico puede afectar a España? ¿No recuerdan cuando Zapatero (amigo íntimo e inseparable del otro gran enviado desde un Universo paralelo, un tal Barack) decía que eso que llamaban crisis en medio planeta aquí no dejaba de ser una “desaceleración” controlada? Pues eso, ahora tampoco va a ser para tanto. El mundo se arreglará y España no va a ser menos. Total, que cierren 1000 microempresas y PYMES al día desde principios de año es un saneamiento gradual de nuestro sistema económico. ¿Qué mejor?
Les aseguro que no pienso preocuparme por cosas sin importancia. Ahora lo que me va a ocupar es un esfuerzo integral en idiotizarme al máximo. Dejaré de leer el crecimiento negativo del PIB interanual contando desde hace un par o tres de años y lo empezaré a comparar con el inmediatamente anterior, así me engañaré profesionalmente y me parecerá que ya salimos de la recesión técnica. No volveré a pensar en crisis (última vez que pronuncio esta palabra que creo están pensando borrar de la Wikipedia) ni en que, ahora con la guerra sucia al déficit público, los ministerios van a generar una sequía inversora que seguramente provocará lo contrario a lo que esperan. Pensar que reducir inversión pública y aumentar impuestos va a generar que el déficit no decrezca sino todo lo contrario, es una indecente apuesta por ensuciar la democracia. Como yo soy demócrata no pienso llevarle la contraria al gobierno, ni a doña Elena, válgame Dios.
Aunque si me permiten un motivo más íntimo, más real y menos irónico, les diré que para poder enfrentarme al día a día como emprendedor o como gestor de empresas lo mejor es apartarse un poco de ese panorama. Dicen que emprender en este país es difícil, que es cosa de locos, pero también es obligatorio alejarse de la realidad durante ese proceso. Si bien se debe atender a las dificultades, los sueños deben buscarse independientemente de la mierda que tengamos alrededor. No obstante una cosa es obviar la realidad y pelearse con el escenario que nos ha tocado vivir y otra es negarla.
Acepto que ya no es necesario seguir anunciando el final del mundo. Ya no son cinco o seis los que cada día enumeran el sinfín de pruebas y elementos que así lo hacen ver. No parece necesario seguir insistiendo en todo ello. Pero, no obstante, me niego a olvidar los nombres y caras de sus responsables. Una cosa es obviar, otra negar. Que el territorio a cruzar es un barrizal está claro, que lo embarraron unos tipos en concreto también, que hay que prepararse para una segunda recesión es algo que ya descuentan hasta los que votarán a Trinidad Vacunas Jiménez.
A cambio, propongo hablar de la otra economía, la que ha venido a llamarse Nueva Economía. Para ello deberemos hacer cada semana un doble análisis. Por un lado interpretaremos algún dato de la economía tradicional y la enfrentaremos a las opciones que tenemos desde puntos de vista más innovadores. Una Nueva Economía basada en conceptos como la Economía Digital, los negocios sin ingresos, el consumo relacional, las energías sustitutivas, los patrones financieros del futuro, los nuevos espacios de inversión, los productos mejor capacitados según que países, la gestión económica en red y en lo social, la emprendeduría colectiva, la vinculación entre universidad y empresa,
El incendio no está extinguido, sólo parece controlado. Sin embargo parece que el viento volverá a soplar y en varias direcciones reactivando las llamas. Dependiendo de en que planta o estancia estemos del edificio, y antes de que colapse, deberemos buscar la salida de emergencia más cercana. Aquí intentaré aportar alguna para los que cada día se enfrentan a la dura empresa de abrir sus negocios, montar nuevos proyectos, internacionalizar sus ideas o buscar el escaso trabajo que existe.
Tal vez todo esto sea innecesario pues, como dicen, seguramente no hay de que preocuparse. ¿Verdad?
Artículo publicado en mi columna semanal de Cotizalia
La revolución del conocimiento
En una ocasión un senador romano propuso que los esclavos llevaran brazaletes blancos, porque según él, éstos se habían hecho tan ubicuos que ya no había manera de distinguirlos de la ciudadanía. Su idea fue rechazada por el Senado, con la razón de que “si los esclavos supieran cuán elevado es su número podrían acabar con nosotros“. Quienes nos gobiernan piensan parecido. Creen que si los ciudadanos supieran cuan elevado es el número de individuos interconectados en red, y sobretodo la capacitación de esos enlaces, seguramente su estatus peligraría.
Durante estos tres años se han producido en el conjunto del mundo más cambios que en el conjunto de los últimos dos siglos. La centenaria banca de inversión desapareció y los sistemas reguladores están todavía bajo revisión. Fue necesaria una masiva inyección de dinero público para salvar el sistema en el momento que la economía tradicional y sus modelos se pusieron en entredicho. Es por eso que, si analizamos con exactitud que representa todo ello, nos daremos cuenta que estamos sufriendo un cambio de paradigma, una regeneración estructurada a partir del conocimiento y el valor del talento global.
Sigo intentando situar el escenario, hablar de un ecosistema que se resiste a morir pero que se regenera poco a poco hasta el punto que pronto parecerá otro. Es imprescindible escribir de modelos de creación, de territorios de conquista y de que podemos hacer para padecer lo mínimo posible. Me apetece explicar la forma poliédrica de ese nuevo sistema que se agarrará con fuerza a conceptos como la inteligencia distribuida, a los prejuicios dospuntoceristas, a la gestión moderna y a la gestión del futuro.
Es preciso que hablemos de los cubículos del conocimiento, del talento global, de pensar diferente, de pensar compartiendo, de conectar cerebros, de cuenta de resultados como deceso de las ideas, del efecto contagio de la colaboración, de la garantía de la exclusividad como valor del compartir, del caudal de pensar conjuntamente y no tanto en equipo, de cambios inevitables, de gestión del conocimiento en las organizaciones del futuro, de modelos y razones de las comunidades virtuales, de alianzas de éxito como valor democrático de las empresas más débiles, de sociedades dinámicas, de las ventajas de esta crisis, de los negocios transparentes y de la recesión permeable.
En eso me pongo ahora mismo, los que entiendan que esos conceptos son los vértices de un polígono repleto de ventajas, tendrán muchas más herramientas para decidir. Cuantos más seamos más sentido tendrá llevar ese brazalete, esa pulsera de la verdad, del conocimiento, del pensar por nosotros mismos. Es momento de razonar, de emprender, de construirnos de manera individual a partir del conocimiento y no tanto del discurso oficial, para entre todos ir estimulando nuestro entorno en modelos económicos nuevos.
Estamos a las puertas de una revolución como ya lo estuvieron otros antepasados, sólo que esta vez es digital, orgánica, distribuida y global. Hace algún tiempo, al confluir diversos factores se reprodujeron sistemáticamente otros grandes cambios. La revolución industrial y tecnológica fueron grandes elementos de cambio, y convivieron con una crisis sistémica que adelantaba una mutación real y evidente en todos los estadios de la economía. La manera de traducir aquellos cambios siempre condujo a mejores escenarios pero también con una fractura notable del propio sistema. El modelo financiero actual que se sustenta en un crecimiento del valor del dinero por encima del coste real del capital, ha provocado un desajuste insalvable a estas alturas, pero considero que más que una causa, no deja de ser una consecuncia de algo mucho más transversal y que la tecnología de la información ha acelerado.
Hace ocho décadas vivimos el crack del 29, hace 15 la crisis de la década de los 90 y hace cinco la primera terquedad del sistema expansivo basado en las punto com. Hoy vivimos un modelo crítico que parece disponer de las caracterísiticas de las tres. Esa encrucijada de modelos en crisis nos habla de una crisis mucho más compleja. Un final de fiesta que no debe ser visto como algo negativo. Es una gran oportunidad para atender con ímpetu y valentía esa nueva revolución, una nueva etapa que me gusta definir como la revolución del conocimiento.
La revolución del conocimiento surgirá del valor de las cosas y no del coste de las mismas, será el momento de las grandes factorías de ideas, de pensamientos, de dudas, de estructurar la fabricación en base a su precio esencial y no tanto al especulativo. La especulación no es mala por definición pero si por derivación. Especular es algo intrínseco al hombre pero cuando lo que genera es desvalorar otros elementos de las cosas entonces es nocivo. La especulación es esencial cuando valora expectativas, cuando anima, cuando genera riqueza de pensamiento.
Ahora que el dinero es un bien natural y no un elemento práctico para la compra, el valor ya no se da por el interés de las cosas si no por la producción de las mismas. El sentido del patrimonio ha cambiado y con ello el paradigma económico también cambiará. Esta crisis es la mayor de las oportunidades que hemos tenido en los últimos dos siglos para establecer nuevos modelos de negocio, nuevos sistemas de relación financiera, nuevos vínculos entre empresa y gobierno, nuevas estrategias mucho más justas y, en definitiva, una nueva generación de ideas que fuercen los cambios imprescindibles que este mundo precisa.
En esta nueva era, en este nuevo ecosistema plagado de ideas, en ese nuevo mar en el que deberemos navegar, los que antes entiendan que deben impulsarse con vientos desconocidos, los que sepan que es tiempo de veleros y no de lanchas motoras, esos sobrevivirán, crecerán y serán mucho más felices. Los que escuchen a sus mandatarios, a esos dirigentes aparentemente perdidos, a esos que cambian sus previsiones una y otra vez, los que esperen de ellos que les ayuden a sobrevolar este momento crucial de la historia sufrirán mucho más.
No es momento de subsidios sino de purgas, no es momento de alargar agonías sino de amputar aquello que está podrido. El sistema es demasiado duro y robusto como para permitir un parto sin dolor, pero el sistema no es inmune. El momento está cerca y me ilusiona enormemente que así sea. Deseo un mundo mejor para mi hijo, mejor que este. La oportunidad está a diez metros de nuestra propia existencia, algunos amigos que aquí se dan cita ya han empezado a caminar hacia ella, otros lo harán pronto, al final todos.
¡Felices vacaciones a todos!
Éxito y economía digital
Esta es la segunda entrega de los programas para RAC1, en este caso hablamos de “nueva economía” y todo lo que ello implica desde un punto de vista sencillo y entendedor. Espero haberlo logrado. Facebook, Twitter, negocios sin ingresos, nuevos escenarios y territorios digitales como valor económico del futuro.
De hecho, hoy te lo hemos puesto un poco fácil porque esta es una de las áreas que tú dominas más, eso de las nuevas tecnologías, tienes un blog muy activo y, en definitiva, eso que llaman la “nueva economía” ¿no?, lo llamáis vosotros los expertos…
-Sí, bueno, el otro día tenía en Barcelona una conferencia, hace unas semanas, de la Universidad de Girona, y la rectora, bueno, la decana del tema económico de allí, me dijo que eso de la “nueva economía”, hasta que no lo acabemos de definir, ella ni entra ni sale. Que no habrá ningún tipo de asignatura dedicada. Y decíamos: “hombre, la nueva economía sí es algo que existe, y es toda una percepción que tiene el mundo económico (...) de un nuevo modelo, y este nuevo modelo se construye a partir de términos digitales y de unos nuevos patrones”. Una empresa vinculada a la nueva economía no cierra nunca, si quiere, no cierra nunca, está abierta 24 horas, porque no tiene un espacio físico que se deba cerrar: tiene la capacidad de vender a través de Internet o de mil maneras, ¿no? Pero la nueva economía lo que busca al final, fundamentalmente, es mejorar los sistemas y los modelos económicos tradicionales. Entonces, sería la “nueva” economía desde el punto de vista de mejorar la “tradicional” economía.
¿Y eso quiere decir incorporar las nuevas tecnologías a una empresa normal por ejemplo?
-Fundamentalmente. Viabilizar empresas y modernizarlas a partir de las nuevas tecnologías.
Proyectos como Google, Facebook, Twitter, supongo que estos son los nuevos emblemas, de esta nueva economía ¿no?
Sí, antes de eso sería importante detectar, que estas empresas, que serían los nuevos emblemas, parten de un planteamiento económico nuevo que comienza a final de los años 90. Realmente es cuando empiezan a montarse estas empresas, y han acabado haciéndose muy grandes durante la década del 2000. Parten de un concepto que se llama “propiedad emergente” y os explicaré qué es. Es muy sencillo, no se refiere a las propiedades de “poseer” sino a las propiedades que tienen, las características de algunas cosas nuevas, como por ejemplo, el que tú yo compartamos ideas. No es lo mismo compartir cosas que tienen unas características determinadas, que compartir ideas, donde lo que hacemos es sumar y entonces llegamos a tantas ideas como seamos capaces de crear, con la capacidad de pensar juntos, pero, sobre todo, la capacidad de pensar en común. Es decir, estas empresas han sido capaces de montarse en torno a un hecho nuevo, que es que alguien que esté en Tokio y alguien que esté en California, y alguien que esté en Madrid, en momentos diferentes, y en espacios diferentes, piensan en común, y lo integran todo en un mismo espacio, que es el espacio digital. Un espacio de trabajo, un espacio escrito, donde se van complementando las ideas. Ya no es que se quede la mejor idea, sino que se crea una idea nueva que tiene que ver con un pensamiento en común. Estas empresas nacen de aquí. Nacen de observar un objeto, un bosque, y éste es el ejemplo más claro: imaginemos que nosotros nos acercamos a un bosque (es pura metáfora, ¿eh?), y vemos muchos árboles. Según la economía tradicional, sólo nos fijaríamos o en un árbol, o en todo el bosque. Entonces, veríamos las características de un sólo árbol, o de un gran bosque. La forma en que hoy en día la economía nueva intuye este bosque, es que somos capaces de observar todos los árboles con todos sus detalles. Porque quien observa ya no es una persona, sino un grupo de personas. Y todos informan al grupo de lo que están viendo. Con lo que vemos todo el bosque con todos sus detalles.
Claro. Y eso es lo que ha consolidado empresas como estas que comentabas, ¿no?
-Exacto, empresas que han utilizado la “viralidad“ como factor fundamental de economía, es decir, cuando ellos hacen una cosa, acaba trasladándose a miles y miles de personas por el efecto viral que tiene la propia red. La economía en torno a lo que serían las capacidades de segmentación. Por ejemplo, Google vende anuncios, pero vende anuncios a aquél a quien realmente le interesa ese anuncio. Google ya no le pone un anuncio a todo el mundo, sino que ése que hace una búsqueda sobre “camisetas amarillas”, pues en su lateral aparecerán tiendas que venden camisetas amarillas.
De hecho es de lo que vive, ¿no? Este es el secreto, si no al final no hay más posibilidades, ¿no? Hay un dato impactante, que, cuando preparábamos el guión nos ha impactado, que dice: “de las 10 primeras empresas del mundo, 4 no existían en el año 2000”.
-O existían de una manera muy ligera. Claro, hay empresas que de hecho tienen una valoración en estos momentos que no sabríamos decir si es real o no: que alguien pague por un 15% de Facebook 21.000 millones de dólares, quiere decir que tiene un valor absolutamente demencial. O que en Twitter se haya hecho una ronda de inversión que la convierte en una de las empresas más grandes del mundo. Quiero decir, estas empresas, ¿qué hacen?, ¿a qué se dedican realmente?, ¿qué producen?, ¿por qué estas empresas nuevas tienen este valor? ¿por qué otras empresas más grandes, en lo que sería capitalización bursátil, por ejemplo, hay estas empresas que no existían hace 4 días? ¿por qué han crecido tan rápido? ¿por qué una empresa como Facebook, que tenía un millón de clientes, por decirlo de alguna manera, hace menos de 5 años que tiene 500.000, 600.000 millones? ¿de dónde surge este crecimiento? ¿cómo se puede generar este valor? Pues tiene que ver con eso que estaba diciendo: la “viralidad”, la capacidad empática de un sistema informático, en este caso, son eso, las redes sociales.
Este es el secreto de por qué han crecido tan rápidamente. Pero, ¿por qué son tan rentables? Es decir, Google, Facebook, que no venden nada…
-Facebook no es rentable en estos momentos. Es muy valiosa, pero aun no es técnicamente una gran máquina de beneficios, aun no es rentable.
O son tan poderosas, ¿no?
-Google es poderosa porque es Dios, sinceramente. Yo creo que alguien, o los que tenemos unas creencias relativamente diferentes a lo tradicional, hay un momento en que dices “si cojo las características de Dios, son las mismas que tiene Google: está por todas partes, contesta todo, no sabes exactamente dónde está o quién es, y lo controla todo”. Google, al final, entra en discusiones con gobiernos, ¿eh? Hay momentos en que tiene procesos de enfrentamiento con gobiernos. Y, al final, es una empresa de unos señores que diseñaron un algoritmo, que son muy potentes, y, en este caso, han llegado a controlar incluso lo que quieren hacer los países. Pero es que con Facebook pasa lo mismo: hay políticos de alto nivel del mundo, o la Casa Blanca, o cualquier magnatario del mundo, que acaba publicando en Facebook algunas de sus grandes decisiones. El otro día, Chávez, el presidente de Venezuela, estaba retransmitiendo por Twitter la exhumación del cadáver de Bolívar. Es decir, esto ha cambiado mucho, y muy rápido. Chávez no tenía Twitter hace tres meses. ¡En tres meses hemos pasado de nada a todo!
Y ya saldrá alguna otra cosa curiosa, de aquí a unos meses…
-Eso seguro. Estaría bien que la gente supiera, que mirase atrás y viera qué era Internet hace 5 años. Y veremos que no existía Facebook, que era fundamental Terra, Yahoo, o unas cosas que ahora algunos no sabemos dónde están…o tienen un uso muy reductivo. El hecho de que Google en estos momentos no sea, y esto es importante, el mejor buscador que hay, también es determinante.
Porque quieres decir que puede aparecer uno mejor.
-No, porque ya no es el mejor, el más eficiente para hacer búsquedas. Ahora es más eficiente Twitter para hacer búsquedas puntuales. Por eso Twitter ahora sí que es un modelo de negocio.
Vale, vamos a Twitter. Pero antes de eso, un momento, ¿Google es rentable porque trabaja con publicidad y Facebook no lo es porque no trabaja con publicidad?
-Google es rentable por dos factores: uno, porque ha sabido vender de forma muy segmentada y eficiente la publicidad y dos, porque ha creado un modelo que tiene que ver con que haya millones, y millones, y millones de búsquedas cada segundo, de manera que cada búsqueda proporciona una imagen, o una posibilidad de imagen, lo que sería un ‘click’ o la posibildad de hacer un ‘click’ (depende de lo que se paga), pero lo que paga es por campañas de ‘clics’. Es decir, ha definido la nueva economía y la nueva publicidad en torno a esta nueva economía y eso es lo que le hace tan eficiente. Y eso le pasa millones de veces cada segundo. Y eso acaba produciendo en todo el mundo una serie de réditos brutales, ¿no? Y las caídas en publicidad que ha habido en el mundo en los últimos dos años a Google le ha afectado relativamente poco, porque al final es el refugio de una publicidad low cost, porque tú gastas muy poco por anunciarte…
Porque no es muy cara…
-No, porque es absolutamente mesurable. Tú dices “voy a gastarme 40€” o “voy a gastarme 400 millones”. Da igual. Y además lo que obtiene son una serie de indicadores, que hasta ahora la publicidad no podía darnos. Un anuncio de televisión te puede decir “bueno, me han visto 2 millones de personas, en teoría, pero no sé exactamente si estos 2 millones son los que yo quería o no quería. Sí, por la hora, debían ser personas interesadas en mi producto, pero tampoco lo sé seguro”. Mientras que Google te dice “te han ‘clicado’ 200.000 personas; y estas 200.000 son personas que han buscado alguna cosa en torno al producto que tú haces”. Claro, eso le da un valor fundamental, y yo creo que eso es lo que le da valor a una empresa…Facebook es otra historia.
Facebook es otra historia, pero en cambio, hay gente dispuesta a pagar millones, y millones de dinero por comprar Facebook.
-Invierten en Facebook. Facebook es mucho más que una red social en estos momentos. Acabará siendo, desde mi punto de vista, el sistema operativo de las redes sociales. Los que han utilizado PC todos tienen Windows, los que han utilizado Mac tienen otros sistemas operativos que son el software por el cual tú puedes trabajar con ese ordenador. Pues yo creo que Facebook acabará siendo una especie de sistema operativo de las redes sociales: a través de Facebook entraremos a nuestras redes sociales, o una cosa similar a Facebook hará uso de todas nuestras redes sociales. Por eso es tan importante estratégicamente.
Vale, Twitter.
-Twitter, nadie te lo dice directamente, pero yo creo que nace, un poco, de casualidad, ¿eh? Quiero decir, Twitter nació sin un modelo de negocio claro, no era un negocio cuando nació, no tenía un Business plan, porque no hace falta tenerlo para una algo que no espera obtener beneficios inmediatamente, y yo creo que nace como una cosa del patrón de decir “bueno, hacemos una cosa que con 140 caracteres es como el SMS, lo ponemos aquí y nos podemos comunicar unos cuantos”. Pero claro, tuvo la suerte de nacer en Sillicon Valley. Cuando esto lo piensan en Sillicon Valley no es lo mismo que si lo piensas (...), porque ya estás rodeado de lo mejor, en el sentido de que si una cosa allí funciona, te lo acabarán exportando ellos mismos. Y eso es lo que pasó con Twitter. Y Twitter al final, va generando un tráfico inmenso. Acaba siendo una herramienta, pasó algo similar a lo del SMS...la gente decía: “¿tú crees que esto del SMS será un éxito?” Pues, que alguno ponga en duda si es un éxito o no. Y lo mismo pasa con Twitter: “¿mensajes de 140 caracteres por Internet? Eso es absurdo…” Y resulta que es un absoluto éxito: ha llegado ya a los 200 o 300 millones de usuarios. Pero resulta que su rentabilidad ha nacido después, y ha nacido porque cuando alguien busca algo en Google en estos momentos, Google y Twitter han llegado a un acuerdo, porque Twitter se ha posicionado, claramente, como el mejor a nivel de búsquedas en todo el mundo: cuando tú buscas una noticia de última hora, Google no la tiene reflejada en su buscador, mientras que Twitter tiene ya millones de personas que acaban de comentar esa noticia, de manera que cuando en Google buscas la noticia, aparece en alguna que Twitter lo ha dicho, y si Twitter no le diera permiso, no podrías entrar directamente. Entonces, pagas un canon, y Google le paga canon por cada búsqueda que nace de Twitter.
Y por eso dices que Twitter acabará siendo el mejor…
-Twitter vive muy bien, y vivirá muy bien. Y ahora mismo es cuando empieza a ganar dinero de verdad.
Sí porque, además, ahora muchísima gente tiene Facebook, pero Twitter es una cosa muy…
-Twitter es una cosa mucho más “friki”. Yo utilizo las dos cosas, el Twitter de Marc Vidal y el Facebook de Marc Vidal, pero realmente, con el Twitter tengo una relación mucho más cercana para la gente con la que yo trato, porque es una comunidad, podríamos decir más cerrada, más directa o más reducida, y el Facebook es una exposición mucho más clara: fotografías,...es otra historia. No sé exactamente.
Pues será el futuro…Venga, Twitter. Y en toda esta historia de la nueva economía que le llamáis vosotros los expertos, supongo que, claro, habrá mucha gente que dirá: “eh! yo tengo una idea en una nueva red social, con esto me ganaré la vida en una empresa de estas de blogs y tal…” Seguro que hay mil casos de gente que cree que puede crear una cosa de estas, ¿no?
-Sí. De hecho, hay ejemplos de proyectos en marcha que nacen en las propias redes sociales y que han conseguido su propio (...), su propia comunidad, ya que aquí la clave está en crear una comunidad alrededor de tu producto o tu marca. Y hay ejemplos absolutamente curiosos, como un señor del sur de Francia, que tenía nada, 100 ó 200 seguidores, y este señor fabricaba Crema Catalana que le llaman ellos y, este hombre, en un momento determinado tuvo un stock que superaba su venta puntual y dijo: “¿sabes qué? que pondré en mi Twitter que me sobra, y que pasaré mañana por (...) y por la plaza”. Y sí, lo puso en Twitter y dos ó tres personas dijeron “oye pues sí, yo estaré mañana en la plaza (...) y ¿a qué hora será?” y él contesta y tal. Y a medida que ha pasado el tiempo, en estos momentos este señor hace una ruta que informa exclusivamente por Twiter no tiene ni página web, ni blog, ni Facebook…, y hay un hecho que es que este señor pone toda su ruta, que es el sur de Francia, tiene empleados que hacen lo mismo, y reparte la Crema Catalana por todo el sur de Francia informando exclusivamente por Twitter. Y los pedidos se los hacen por Twitter.
Es buenísimo…
-Es buenísimo. Porque ha creado una comunidad de gente que, además, opina que es muy buena esta Crema Catalana y va haciendo que, cada vez, haya más gente que quiera esta Crema Catalana, con este detalle, glamuroso, de las redes sociales…
Sí, sí, sí. ¿Y algún otro caso así?
-Sí, hay una empresa en el norte de España, en Asturias, que vende calzoncillos por Internet y, fundamentalmente, entre su propia comunidad que creó en Facebook. Es una tienda cualquiera de Gijón, que realmente, su porcentaje más alto de clientes, ahora son clientes de Gijón, curiosamente, de una comunidad vinculada al mundo local, pero que se relaciona socialmente deforma digital. Tiene su gracia.
Y tanto que sí. MySpace también forma parte de esta nueva economía, ¿no?
-Sí. MySpace revolucionó el hecho de la música. Fundamentalmente es una red social musical, de grupos y de gente que hace música, que ha acabado teniendo un aparato importante…Y quien niegue que MySpace ha marcado de forma relativamente importante toda la revolución de la música de descargas, lo que ha supuesto el hecho de que la música de acceso universal a grupos que no tenían acceso a ningún tipo de discográfica ni posibilidad de hacer nada, y con MySpace han podido acabar (...)... Hay algunos ejemplos de cantantes que son producto de MySpace y que han conseguido tener unos seguidores de una manera brutal.
Marc, estamos a punto de acabar, pero seguro que no todos nuestros oyentes están en el tema de las redes sociales ni saben exactamente qué quieren decir todas estas cosas. Pero, ¿hay nueva economía fuera de las nuevas tecnologías?
-Sí. La nueva economía se debe caracterizar por un hecho, que es trabajar en red, pero no sólo en la red. Sino que debemos imaginarnos por ejemplo un bosque…Hay un tipo de árbol que es la secuoya, que son unos árboles que crecen muy alto, que tienen más de 100 metros de altura y, la única manera de que en el mundo botánico, en la naturaleza de este planeta, algún árbol llegue a 100 metros de altura es que lo haga en grupo. Las raíces de las secuoya no llegan a un metro de profundidad…Entonces, si tienen 100 metros de alto y sólo un metro de profundidad de raíz, ¿cómo se aguantan? Pues se aguantan enlazadas las unas a las otras. No verás una secuoya sola de más de 30 metros. Para que llegue a 100 metros debe estar en un bosque. Este bosque, se “autoaguanta“ todo: no hay ni un sólo árbol que, cuando caiga no lo levante el propio bosque, lo sube el bosque durante unos años, y todos alcanzan los 100 metros de altura. Es decir, la nueva economía utiliza el trabajo en red: no necesariamente a través de Internet sino el hecho de que debemos ser capaces de crear ‘comunidades económicas’ en torno a que si todos somos capaces de ayudarnos, todos llegaremos a 100 metros de altura. La nueva economía busca eso.
Marc Vidal, muchísimas gracias por habernos acompañado un miércoles más y volvemos la semana que viene. Gracias
-Hasta el miércoles que viene. Gracias.
Ideas para emprender
Hoy os dejo con la traducción de la sección “economía en efectivo” que estoy haciendo durante este verano para el programa “el món a Rac1”de la cadena de radio líder en Catalunya, RAC1 (Grupo Godó). Durante unos veinte minutos tratamos el tema de la emprendeduría y de cómo afrontar nuevos proyectos en lo personal, cuales son los mejores sectores y que hacer ante la dificultad. Se buscó ser lo más optimista localizando fisuras del sistema económico en decadencia para que se nos permita ganarnos la vida honradamente. La sección consiste en que la conductora, Núria Riquelme, me vaya interrogando sobre un tema hasta llegar a detalles que en verano puedan ser interesantes.
Comenzaremos la sesión, muy optimistas. Hoy Marc nos dirá en qué podemos invertir una indemnización por despido para tener un mínimo de éxito y no morir en el intento. De entrada, ¿es un buen momento para tirar adelante un nuevo proyecto? ¿o eso es sólo para los suicidas?
-No, de hecho, los momentos ideales para embarcarse en nuevos proyectos complejos son los momentos más difíciles. Y en este caso estamos viviendo un momento difícil, donde las buenas ideas acaban encontrando un camino. Hay una comparativa que es la de los vasos: hay quien ve las cosas medio vacías, medio llenas… Pero en el campo de la gente que monta nuevos negocios, en el campo de los emprendedores, se puede ver desde dos puntos de vista nuevos. Y el vaso, cuando hablamos de un tío racional, al vaso le sobra el doble. Tiene la mitad de agua necesaria, o que el tamaño del vaso es el doble del necesario. Pero los emprendedores lo que vemos es que hay el doble por llenar. Y esta es la filosofía que todos deberíamos adoptar cuando uno decide tomar todo el subsidio único en este caso que hace el Estado y ponerse en marcha para llenar este vaso.
¿Tú le recomendarías alguien que hiciera esto?
-Sí, de hecho lo recomiendo todos los días.
Pero claro, debemos saber muy bien, supongo que la clave es ésta, en qué ponemos ese dinero, ¿no? En qué podemos tener un mínimo de éxito…
-Primero deberíamos vigilar algunos factores para que este éxito no acabe. Una de las cosas que tenemos que tener en cuenta es, por ejemplo, no endeudarnos excesivamente con el dinero que se nos da. Debemos pensar también en una cosa que a veces no se tiene en cuenta: cuando nos dan este soporte económico debemos saber que es nuestro dinero de paro que nos deben dar cada mes. Cuando hacemos este proyecto sobre el que haremos esta petición de dinero, ha de ser exactamente aquél. Es decir, si nosotros luego hacemos otra cosa, y pedimos que se nos den 12000€ y con ellos compramos un coche para desplazarnos y poder vender, y acabamos comprando dos ordenadores, debes hacer exactamente eso. Porque si después esos 12000€ los utilizas para pagar el sueldo de dos empleados que has contratado, eso no es factible. Pueden decirte que no has utilizado el dinero para lo que dijiste. Tienes que demostrar que has invertido el dinero para lo que es. Y busquemos las formas de negocio después, a partir de este ingreso. Sobre todo, no debemos confiar excesivamente en nuestros clientes…Normalmente, los emprendedores lo que hacen es confiar excesivamente en sus clientes, le dan mucha crédito a que estos clientes acabarán pagando, y esta capacidad de soportar lo que sería este hecho. También, normalmente cuando montamos un negocio no tenemos práctica en tratar con proveedores, y deberíamos prepararnos e informarnos de cómo tratar con proveedores, agarrarse a muchísimas ofertas…si lo normal es coger tres ofertas por un mismo producto, pues coger 5. Sería aumentar un poco más el cuidado sobre las cosas que hacemos o que haríamos en cualquier otro modelo de negocio, una vez lo comenzamos.
Y en estos momentos tú nos puedes decir…en los próximos 6 meses, ¿qué puede ser un negocio que tenga éxito o negocios que puedan tener una viabilidad?
-Lo primero es que si lo supiera a ciencia cierta, yo mismo no estaría aquí...Estaría intentando poner en marcha estos negocios…Pero sí que hay algunos factores o escenarios que podrían darnos pistas. Nos acercamos a un territorio económico en el que el low cost tendrá más salida que las cosas que tengan más (...), y otro escenario mucho más complejo que tiene que ver con los ricos/el riesgo?, con la gente que tiene mucho poder, que parece que no les afecta la crisis (que también, ya hablaremos algún día), pero en este caso estaríamos hablando de productos low cost. Estaríamos hablando de proyectos o negocios que sean capaces de ser escalables, que sean fácilmente ‘replicables’: que podamos hacerlo más grande de una forma prudencial, a medida que vamos adquiriendo más posibilidades…Yo ahora tengo un negocio en el que puedo vender botellas de agua, pues, que pueda vender 6 botellas de agua y tenga que contratar a una persona más, y que cuantas más personas, y puedo ganar más dinero, o puedo vender más…Y no es referencial, es exponencial este hecho escalable. Y, además, si es gente con ganas de hacer cosas desde el punto de vista del crecimiento, que no sólo es auto suficiente, que es auto ocupación, sino que quieren hacer un proyecto empresarial, ha de ser fácilmente internacionalizable, y eso que parece extremadamente complicado o difícil, o está muy lejos de los proyectos de un autoocupación, realmente no lo está. Hoy en día las tecnologías nos permiten empezar a vender fuera o no tener horarios, o puertas que tengamos que cerrar en ningún momento, entonces pensar que este negocio también pueda ser replicable en otros escenarios, en otros países, también es importante. Ahora, ¿cuáles son los campos o sectores? Yo detecto que cada vez son menos innovadores estos sectores ¿no? Y hay que darles una respuesta nueva, ¿no? Por ejemplo el sector de los niños: los niños seguirán naciendo, con más o menos ritmo, pero seguirán naciendo. Y sabemos que los padres cada vez están más implicados en dar ventajas formativas a sus hijos, creyendo que estos estímulos iniciales acabarán siendo determinantes en su futuro. Pues, buscando alguna manera de dar estas ventajas, estaríamos creando un modelo de negocio que los padres estarían dispuestos a asumir.
Por ejemplo, empresas dedicadas a la formación de niños…
-Yo me imagino una guardería donde, desde ella estos niños pequeños estén imbuidos o reciban estímulos exclusivamente en una lengua, por ejemplo el inglés, que dicen que es la ventaja o el chino. Es sobre todo ofrecer un servicio muy específico, que vayan al (...) exacto y que pueda ser replicable en muchos sitios…Por ejemplo, si yo soy un experto de esto en Barcelona y he montado tres guarderías en este sector, sólo necesito encontrar a alguien que me ayude a hacerlo en Lleida, y en Tarragona y después es una forma de crecer. En el caso de niños sería atacar el tema formativo, el tema ocio, el tema de servicios de libros para niños pero multiformato. Es decir, cómo llegar a los niños, desde el punto de vista cultural. Todos aquellos que son periodistas o escritores, que parece que tienen que ser ‘multiformativos’, deben tener mucha capacidad para hacer muchas cosas, no sólo de periodistas o sólo de escritores, pueden volver a replegar velas y volver a crear contenidos pero para un (...) muy concreto, pero con una tendencia clara hacia la formación, que acabará siendo por lo que un padre compra un libro…
Claro porque si estamos en crisis, le tenemos que dar al padre un libro que diga “en este libro me lo gasto”.
-Básicamente. En más sectores puedes plantearte: ¿el inmobiliario será un sector de futuro? El mobiliario sí. Todo aquello que sea “alquilar” y no sólo pisos, o coches, sino alquilar incluso plantas. ¿Quién tiene tiempo para cuidar, tener o hacer cosas? Lo digo en serio: buscar qué puedo alquilar, yo lo compro y lo rentabilizo al máximo. Yo puedo tener seguros sobre las plantas.
Y tampoco requiere una gran inversión…
-Sí pero cuando digo ‘plantas’ pueden ser también, alquiler de obras de arte. Es decir, tienes una visita en casa, quieres quedar bien y no tienes arte…pues aquí tienes diferentes niveles de arte.
Sí pero aquí ya necesitas una inversión más grande…
-Sí pero puedes alquilar sólo 8 cuadros de algún artista joven que tenga valor, lo puedes dar a conocer. Puedes crear negocios paralelos alrededor de lo que sería alquilar obras de arte, es decir, puedes hacer escuelas de arte, puedes buscar fórmulas para potenciar a estos artistas, puedes crear foros de debate sobre estos artistas, puede alquilar el arte de estos artistas que pueden pagar un canon para poder trabajar contigo…mil maneras. Yo encuentro que el aspecto del alquiler, aquello la gente no puede guardar, tener o comprar, porque no podemos comprarlo todo y queremos de todo, a veces es sólo porque queremos mostrar. Y si queremos mostrarlo pues lo alquilamos temporalmente. Por ejemplo, el mundo de la tercera edad es absolutamente prioritario, siempre se ha visto desde la óptica de “los llevaremos de viaje o residencias”, pero yo creo que los abuelos lo que están es en su casa, y necesitarán muchas cosas en su casa. Entonces, aquí se abre un nuevo abanico que son los servicios a domicilio para gente mayor, que sería un (...) muy concreto y sobre un tipo de servicio que podría ser estético, médico, odontología… A mí el dentista no me viene a casa, y hay muchas cosas que hace el dentista que pueden ser móviles. De hecho, hay ejemplos de dentistas que van a tu casa, a domicilio. Los abuelos pueden hacer ejercicio desde su casa, se pueden hacer gestiones y trámites,...Para los abuelos, hoy en día, puede ser un drama poner en marcha, entre Internet y tal. Nosotros vamos, lo hacemos directamente, y cobramos un pequeño porcentaje por hacer estos trámites. Creo que facilitar la vida a los demás será un campo de trabajo y de negocio absolutamente claro.
Por cierto, hay un gran clásico, que dicen: “es que el trabajo de enterrar muertos, de funerarias siempre tendrán éxito”
-Pues, no necesariamente. Porque hay una tendencia hacia otras fórmulas para acabar nuestros días, desde la incineración…El sector funerario, si lo examinamos, ya tiene situaciones de crisis. Hay empresas que tienen tendencia a la baja en sus facturaciones. No está asegurado como sector. De hecho, hay tendencias sociales en el ámbito funerario incluso a hacer fiestas cuando alguien se muere con lo cual, y otras alternativas. Al final ya no lo hace una funeraria, lo hace una empresa que se dedica a hacer fiestas, no sólo son las funerarias las que hacen estas funciones, hoy en día es muy multisectorial. De hecho, quién iba a decir hace unos años a las agencias de viaje, que serían un negocio ruinoso…Es que apareció Internet… Quiero decir, no hay nada absolutamente en ningún negocio o sector que tenga garantizado su modelo de negocio en los tiempos que vivimos hoy en día que son absolutamente dinámicos…
Por ejemplo, un oyente que nos escucha y piensa “tengo una idea genial, yo creo que es genial, pero no tengo ni un Euro”. ¿Se pueden encontrar inversores?
-Sí. Hay inversores para los que tienen ideas, lo que pasa es que tienen que saber venderlas debemos ser asesorados sobre cómo debemos construir esta idea. Hoy en día hay algún foro, algún espacio en que los inversores o socios industriales, personas que tienen las cosas muy claras, existen. Ahora, está claro que debemos tener claro eso, debemos saber ponerlo en marcha, de hecho, uno de los retos de futuro sería el tema del ‘coach’ para emprendedores, es decir, gente que tiene capacidad para poner en marcha un proyecto pero no saben cómo vender, ni cómo ponerlo en marcha. Los MBA que hasta ahora eran un Master Bussines Administration, ahora serán un Master Bussiness Enterpreneurship para poner en marcha negocios. Por eso no tiene tanto sentido ahora hacer un Master en administración de empresas como hacer un Master en poner en marcha empresas. En cualquier caso, si alguien tiene una buena idea, y esta idea requiere mucho dinero, deberá ponerla en segundo plano. Debería empezar por proyectos que requieren menos inversión, por ejemplo, una persona que tiene pensado montar una academia o un fondo argumental en torno a los idiomas, pues empieza traduciendo, que está bien pagado. Comienza a buscar canales de difusión e Internet es el espacio natural de todo eso. Es el lugar donde todos podemos vender cualquier producto aunque no sea digital. Pero, no necesariamente debes querer montar un negocio desde el principio con mucho dinero, si entramos en foros, en espacios, el hecho es informarse. Hoy en día podemos hacer la relación de sitios donde puedes encontrar a estos ‘bussines angels’, estos inversores. Existen. En Barcelona hay muchos. Hay gente muy valiente en esta ciudad.
Y la otra posibilidad es “tengo mucho dinero, pero no tengo ideas”.
-Pues, si alguien tiene mucho dinero pero no tiene ideas, nos puede llamar directamente y le pondremos en contacto con mucha gente que sí que las tiene. Pero las personas que tienen mucho dinero, lo que quieren son proyectos que estén bien constituidos o, como mínimo, que puedan saber que ese dinero estará detrás de alguien que primero, tiene mucha ilusión y conocimiento de lo que hace, y puede rodearse de gente que también sabe. A veces, los grandes inversores no buscan sólo una mente brillante, sino un equipo. Y en este caso, creo que es fundamental encontrar unos buenos socios también. Es más divertido en equipo, que solo.
¿Sólo si eres joven puedes ser emprendedor? Porque a veces relacionamos las dos palabras.
-Espero que no, porque yo no dejaré de emprender ni al final…Hay una ‘raza’ de eso. Se nace, o tienes ninguna otra posibilidad. Por ejemplo, los países más emprendedores del mundo están en Sudamérica, en África, no son europeos los más emprendedores, porque no hay absolutamente ningún otra opción: o eres un indigente eres miserable o pasas a ser una persona que monta su negocio. La microeconomía funciona muy bien en estos países porque al final, son pequeñas comunidades que se alimentan entre ellas. Con lo cual, nacer emprendedor requiere una facultad natural que es la de liderazgo, la de enfrentarse a las dificultades, la experiencia vital también te la da. Hay una cosa hoy en día que me da mucha pena es que mucha gente joven tiene una carencia de este espíritu de sacrificio, de ponerse en contra, muchas veces, del sistema. Cuando yo digo que nos tenemos que poner en contra de las cosas tal como vienen, no lo digo porque sea un revolucionario, sino que lo digo porque es la manera natural de ponerse en marcha, y de enfrentarse a tiempos que a veces no son buenos. Y los emprendedores siempre están en crisis. Yo cuando hablo de crisis, la gente debe saber que los emprendedores estamos siempre en crisis. Porque siempre estamos, sobre todo, jugándonos todo nuestro propio patrimonio. Cada minuto de nuestra vida, todo está puesto allí, delante de un banco.
Sí pero eso es parte del riesgo ¿no?
-Sí, pero cuando te sale bien, vas acumulando. Y estas experiencias (que hay países en que se premia y hay países en los que no, como España) permiten, que de la experiencia de los errores se acaban construyendo los grandes proyectos, los de futuro. Y estos proyectos se pueden construir con 50, 60 años. Yo conozco emprendedores de 60 años que están haciendo cosas muy interesantes y espero que se emprenda en estas edades.
Y también, supongo que no desmoralizarse. Tú me comentaste un día que muchas veces te habías atrancado…
-Bastantes. De hecho, a veces pongo el ejemplo de Milton Erickson que tuvo una vida muy complicada. De hecho, la última vez que yo entré en una situación personal de crisis económica porque me falló un proyecto y pensé “ya no puedo más, de aquí ya no me levantaré”, acabó en mis manos la historia de Milton Erickson, que fue un señor que nació en Aurum, en Nevada creo que era, y a los 17 años tiene un ataque de polio y se queda que no puede ni caminar. Pero a los 25 coge una canoa y se va a cruzar el Amazonas. Y piensas “ostras, qué espíritu de sacrificio”. Este señor sigue trabajando en su vida, estudia y se convierte en el padre del psicoanálisis moderno: da conferencias, escribe, es una persona comunicativa, además la hipnosis se hace hablando…Pues, con 50 años recibe otro golpe de la vida que es un segundo ataque de polio; se queda que no puede casi hablar, prácticamente ni caminar. Pues hasta los 72 años que pudo volver a hablar no dejó de insistir para poder dar otra conferencia, la última conferencia. Y pensé sobre la historia de este hombre: “se ha levantado de una cosa que eso sí que es terrible, de lo que yo no me repondría en 30 años…” Debemos saber que tampoco es tan grave fracasar, y que el fracaso, al final nos enseña, y que la equivocación es una parte fundamental de la construcción de nuestro conocimiento.